Fronteras
Grecia expulsa a cubanos a Turquía, un país donde nunca han estado

La creciente dificultad para acceder a Estados Unidos ha hecho que sean cada vez más los cubanos que decidan dirigirse a Europa a través de Moscú. Sin embargo, al llegar a Grecia, muchos acaban siendo expulsados a Turquía.
Casa ocupada migrantes
Una casa ocupada usada por las personas en tránsito en su ruta a través de la frontera griega. Roshan De Stone
Estambul
10 abr 2022 08:13

De La Habana a Moscú. Después, otro vuelo a Belgrado, para conocer a los traficantes que pueden llevarles a través de Macedonia hasta Grecia. Y, por último, un último avión de Grecia a España. Esta es una de las rutas transatlánticas más increíbles que cientos de cubanos han tomado para llegar a Europa en los últimos años. Una ruta posibilitada por traficantes de personas que recientemente ha estado bajo el ojo de las autoridades griegas.

Pero al entrar en Grecia, a pesar de solicitar asilo, los migrantes cubanos son expulsados a Turquía, un país totalmente desconocido para ellos. “No me esperaba nada de esto”, explica Castillo, un anestesista de 30 años de La Habana. “Cuando salí de Cuba, no podía imaginar que llegaría a Europa para que me echaran días después a un país en el que nunca había estado”.

Al igual que otros miles de cubanos, Castillo abandonó la isla para escapar de sus dificultades económicas y de la represión política, con la esperanza de encontrar mejores oportunidades en Europa. En cambio, se ha encontrado viviendo indocumentado en Estambul.

“Me dijeron amigos cubanos que habían viajado antes que yo, que si iba a Rusia podría contactar con redes que te organizan el viaje a España a través de Grecia”

Las sanciones de Estados Unidos y la pandemia de Covid han tenido un efecto combinado en la economía de la isla, con todo el país enfrentándose a una grave escasez de alimentos y productos básicos, y llevando a muchos de los jóvenes del país a buscar mejores oportunidades económicas en el extranjero. La emigración cubana por motivos políticos y económicos se ha dirigido históricamente a Estados Unidos. Pero las medidas introducidas durante la presidencia de Trump y aún mantenidas por la actual presidencia de Biden han hecho mucho más difícil que los cubanos encuentren asilo en Estados Unidos.

Los Protocolos de Protección al Migrante 2018 —también conocidos como el programa “Permanecer en México”— fuerza a los solicitantes de asilo que desean encontrar protección en Estados Unidos a esperar en México mientras se procesa su caso. Además, en marzo de 2020, Estados Unidos suspendió en gran medida el derecho a solicitar asilo a través del Título 42, una ley que permite la expulsión de cualquier persona que entre en Estados Unidos de forma irregular sin derecho a solicitar asilo, en nombre de la prevención de la propagación de Covid.

Por ello, los cubanos han tenido que buscar otros destinos. Viajar a Rusia y luego a Europa se ha convertido en la forma más viable. Rusia es uno de los 26 países que no exige visado a los cubanos, y uno de los pocos del hemisferio occidental. “Me dijeron amigos cubanos que habían viajado antes que yo, que si iba a Rusia podría contactar con redes que te organizan el viaje a España a través de Grecia”, explica Álvaro, otro cubano entrevistado en Estambul.

Álvaro ha conseguido volver a Moscú tras ser expulsado de Grecia a Turquía. “No podía quedarme en Estambul después de la experiencia que viví al ser deportado de Grecia. Fueron los tres peores días de mi vida”. Al igual que Castillo, Álvaro había llegado a Rusia y desde allí se había asegurado los servicios de las redes de tráfico para llegar a Grecia. Había viajado a Moscú con un amigo de Cuba, ambos querían llegar a España. “Tuvimos que esperar unas cuantas noches en unas casas abandonadas junto a la frontera entre Macedonia y Grecia antes de que los contrabandistas nos indicaran el camino para llegar a la ciudad griega de Polikastro”.

Tras 10 horas de caminata en la oscuridad para cruzar la frontera con Grecia, Álvaro y su amigo tomaron un autobús hasta Salónica, y desde allí otro hasta a Atenas. “Poco después de salir de la estación de autobuses de Salónica, el autobús se detuvo y entró la policía con equipo antidisturbios, deteniendo a todos los migrantes que iban en el autobús, incluidos nosotros”.

Retenido en un almacén militar junto con otros cubanos, sirios, pakistaníes y afganos, Álvaro relata que fue desnudado y golpeado con remos de plástico antes de ser obligado a punta de pistola a cruzar el río Evros hacia Turquía, en una de las devoluciones rutinarias de Grecia. Los agentes no registraron ninguna de sus solicitudes de asilo en el país.

“Poco después de salir de la estación de autobuses de Salónica, el autobús se detuvo y entró la policía con equipo antidisturbios, deteniendo a todos los migrantes que iban en el autobús, incluidos nosotros”

Este tipo de devoluciones en caliente de Grecia a Turquía han ido en aumento desde la crisis migratoria europea de 2015. Las devoluciones son una práctica por la que un Estado obliga a un migrante a volver a cruzar la frontera por la que entró sin tener en cuenta sus circunstancias particulares.

En febrero de 2020, en un movimiento político para presionar a Europa, el primer ministro turco Erdogan “abrió las puertas de Europa” permitiendo que miles de personas llegaran y cruzaran la frontera de Turquía con Grecia. Grecia respondió con una reacción fuertemente militarizada en la frontera, aplaudida por el jefe de la UE por ser el “escudo de Europa”. Desde entonces, la frecuencia y el nivel de violencia de las devoluciones desde Grecia han aumentado exponencialmente hasta convertirse en una práctica sistemática, lo que ha provocado muertes cada vez más frecuentes en esta frontera.

El 2 de febrero de 2022, más de 20 personas murieron congeladas tras ser despojadas de sus ropas y empujadas desde Grecia a Turquía, un incidente que siguió ocurriendo durante los primeros meses de 2022. Fue en esos mismos días cuando también Lino y Yudith, una pareja cubana de 50 años, fueron empujados violentamente hacia Turquía. Al igual que otros antes que ellos, la pareja había viajado a Grecia utilizando la ruta descrita anteriormente desde Moscú a Grecia.

Sin embargo, a diferencia de Castillo y Álvaro, la pareja había permanecido en Grecia durante más de tres meses, alojada y registrada en un centro de acogida de migrantes en Salónica, antes de ser enviada a Turquía. La pareja había permanecido allí desde que entró en Grecia en octubre, a la espera de registrar su solicitud de asilo ante las autoridades griegas.

“Tengo una hermana que lleva 22 años viviendo en Grecia. Ella nos ayudó a venir a Grecia”, explicó Lino. Después de tres meses esperando su turno para registrar su solicitud de asilo en Europa, Lino y Yudith decidieron tomar las riendas y registrar su solicitud de asilo en la sede de la policía. “Allí un funcionario griego nos dijo que teníamos que registrar nuestra solicitud en Orestiada, una ciudad cercana a la frontera. Pero era mentira”.

En lugar de registrar su asilo en Grecia, la pareja fue detenida, retenida en una furgoneta durante la noche por la policía griega y obligada a cruzar el río Evros hacia Turquía por hombres con pasamontañas a primera hora de la mañana

En lugar de registrar su asilo en Grecia, la pareja fue detenida, retenida en una furgoneta durante la noche por la policía griega y obligada a cruzar el río Evros hacia Turquía por hombres con pasamontañas a primera hora de la mañana. “Nos deportaron de Grecia a un país en el que nunca habíamos estado, así, sin explicaciones. La policía nos quitó todo, los zapatos y hasta las medicinas de mi mujer”, declaró Lino.

Lino y Yudith, al igual que Castillo y Álvaro, son sólo unos pocos de la creciente comunidad de cubanos deportados ilegalmente a Turquía desde Grecia. Desprovistos de toda documentación, sobreviven gracias a la ayuda que les envían familiares y amigos en Cuba y Europa.

Turquía acoge actualmente a más de 4 millones de migrantes y refugiados, y es el país que acoge el mayor número de desplazados del mundo. Los cubanos no pueden solicitar asilo en Turquía. Pueden solicitar protección internacional, pero ésta no se concede a las personas que han viajado a través de un tercer país seguro tras abandonar su país de origen.

“Estoy atrapado”, dice Castilo. “No puedo volver a Cuba porque me castigarían por irme, pero tampoco puedo vivir aquí ilegalmente en un país al que nunca elegí venir”.

*Castillo y Álvaro son seudónimos utilizados para proteger la identidad de las personas entrevistadas para este artículo.
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Personas refugiadas
Personas refugiadas Fútbol en Lesbos, o de cómo hacer equipo en el exilio
Vienen de Afganistán, Yemen, Sierra Leona o Haití, están temporalmente en el Centro de Acceso Controlado Cerrado de Mavrovouni, donde se les vigila todo el tiempo. El campo de fútbol donde entrenan juntos se convierte en una especie de refugio.
Fronteras
Fronteras Cientos de personas refugiadas, incluidas menores, duermen al raso en la isla griega de Rodas
Organizaciones humanitarias denuncian que unas 350 personas refugiadas, algunas de ellas procedentes de Líbano, están durmiendo a la intemperie sin comida, sin agua, sin baños y sufriendo la violencia de las fuerzas de seguridad en Rodas.
Grecia
Militarismo La cuestión militar griega
Grecia es uno de los países europeos que mantiene el servicio militar obligatorio, sometiendo a los jóvenes reclutas a duras condiciones que afectan a su bienestar físico y psicológico.
Laboral
Laboral Investigada unha rede empresarial que explotaba a 82 migrantes nunha granxa de Lugo
Polo de agora, tres persoas responsables da granxa de Begonte centran as investigacións da Garda Civil. As 82 persoas explotadas vivían nun hotel de Ordes (A Coruña) que non tiña sequera licencia de hostalaría.
Galicia
Galicia ¿Quién es quién en Greenalia? La empresa que quiere otra celulosa en Galicia y arrasa olivares en Andalucía
Los tentáculos del entramado empresarial tras esta corporación tocan a gran parte de la oligarquía gallega. Desde medios de comunicación como 'La Voz de Galicia' hasta equipos de fútbol como el Deportivo o entidades financieras como Abanca.
Estados Unidos
Extrema derecha Trump anuncia un campo de concentración para 30.000 migrantes en Guantánamo en el 80 aniversario de Auschwitz
La estrategia de llevar la detención de migrantes a territorios lejanos, opacos y sin garantías de derechos también ha sido la opción elegida por la Unión Europea en el último año.
Salario mínimo
Pacto bipartito Trabajo y sindicatos acuerdan la subida del salario mínimo en 50 euros sin el apoyo de la patronal
Díaz anuncia un acuerdo con los sindicatos que llevará al Congreso de Ministros de forma “inminente” la propuesta del Ministerio de Trabajo. Los sindicatos proponían una subida de 66 euros y la patronal, de 34 euros.

Últimas

Madrid
Justicia El fiscal general del Estado, en el alambre, declara como investigado ante el Supremo
Álvaro García Ortiz acude al alto tribunal a explicar su versión de las filtraciones denunciadas por el entorno de la pareja de Isabel Díaz Ayuso. Es la primera vez que un fiscal de su categoría declara como investigado.
Pensiones
Revalorización de las pensiones Los pensionistas no se fían y salen a la calle tras el rechazo al decreto ómnibus
Coespe convoca a manifestarse este viernes 31 frente a la sede del PP tras la “posición negativa de la derecha ultranacionalista, sea española o catalana”.
Energías renovables
Energías renovables en Madrid El Centro Cultural Palomeras quiere ser autosuficiente, los préstamos de sus vecinos pueden conseguirlo
Una universidad pública y una cooperativa de energías renovables lideran el proyecto de préstamos que quiere convertir en autosuficiente al histórico centro educativo vallecano, y que busca reunir 150.000 en financiación ciudadana a un interés ético.
Israel
Sionismo Maccabi - Baskonia: no colaboremos con la banalización del mal
El partido de basket en Gasteiz es una oportunidad de oro para mostrar nuestra determinación a no contribuir al blanqueamiento del Estado genocida de Israel, oponiéndonos decididamente
Más noticias
Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Sin materiales, sin protección adecuada y sin financiación: los bomberos de Madrid denuncian “abandono”
La contaminación de los equipos de protección de cinco bomberos en un incendio en una nave de reciclaje hace levantar de nuevo la voz de los sindicatos, que ya tienen denunciada ante el TSJ de Madrid, la falta de financiación.
Cine
El Salto recomienda Diez películas y series en Filmin para acercarse a la diversidad de Andalucía
Una selección realizada por la periodista de El Salto Aurora Báez Boza sobre las mejores películas y series para descubrir las diversidades que habitan dentro de Andalucía
Dana
Tres meses de la dana “Aquí no llovió casi nada”
VV.AA.
Un vecino de Benetússer explica cómo la riada arrasó y cambió para siempre las vidas de miles de personas.
El Salto Radio
EL SALTO RADIO Cultura y resistencia desde América del sur
Cuatro historias sonoras de experiencias creativas y comunitarias en algunas ciudades de Perú, Argentina y Paraguay
Opinión
Opinión Monetizadores de la estupidez
Ser un chalado anticiencia puede llevar a pasearte por radios, televisiones y streamings porque eres rentable para gente sin un mínimo de ética periodística.

Recomendadas

Medio rural
Reportaxe As mulleres rurais soñan con deixar de ser heroínas
A falta de servizos básicos no rural é a primeira pedra no camiño de quen quere vivir e desenvolver os seus proxectos fóra da cidade. Aínda así, o rural galego atópase á cabeza en canto a titularidade feminina respecto á media do Estado español.
Literatura
Letras Galegas Da Sección Feminina do franquismo ao Cancioneiro Popular Galego: o pobo é quen canta e baila
As cantareiras protagonizarán o Día das Letras Galegas de 2025. Beatriz Busto e Richi Casás fálannos delas, de Dorothé Schubarth, do Cancioneiro Popular Galego e da dificultade de acceder aos arquivos sonoros que conservan as súas voces.
Jaén
Andalucía Lopera no quiere que Greenalia especule con sus olivos
Decenas de pequeños olivareros de la Campiña Norte de Jaén podrían perder sus terrenos en beneficio de una empresa que quiere talar los árboles para instalar siete parques fotovoltaicos.