Opinión
La abolición de las armas nucleares, un freno a la crisis climática

La crisis climática requiere recursos económicos y voluntad política, y por ello debe necesariamente incluir el desarme nuclear.
Homenaje Hiroshima
Homenaje a las víctimas de Hiroshima. Foto de ICAN.

Es miembro de la Alianza por el Desarme Nuclear.

2 abr 2024 05:24

La vida sobre la Tierra enfrenta dos amenazas existenciales: la crisis climática y las armas nucleares. Ambas están fuertemente vinculadas y se refuerzan mutuamente; sin embargo, muchos ignoran cuán serio es el riesgo de una guerra nuclear y cómo es que la abolición de las armas nucleares puede ayudar a resolver la crisis climática.

La crisis climática es realmente grave y empeora exponencialmente. Esto se debe a actividades humanas, tales como el aumento en el militarismo, que directa e indirectamente contribuye en gran medida a las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), y la ganadería, que es responsable de más emisiones de dichos gases que todo el sector del transporte en su conjunto. A pesar de la conciencia general de la existencia de la crisis climática y sus causas, las emisiones de GEI siguen aumentando y, con ello, la temperatura global. Los últimos cinco años han sido los más cálidos jamás registrados.

Como lo hemos vivido, esto se ha traducido en varios efectos, como el aumento de eventos climáticos extremos —sequías, inundaciones y huracanes— y la escasez de agua —que afecta la biodiversidad, la agricultura y la disponibilidad de agua para consumo humano y electricidad a través de la energía hidroeléctrica—. La consecuente pérdida de productividad agrícola, a su vez, da lugar a una mayor inseguridad alimentaria y a desnutrición. Por estos efectos, se espera que el desplazamiento de la población aumente a 100 millones de personas por año para el 2050.

¿Qué debe hacerse? En primer lugar, reducir rápidamente nuestras emisiones de GEI, lo que significa alejarse de los combustibles fósiles, aumentar las prácticas agrícolas sostenibles (como reducir la ganadería) e invertir en energía renovable. También necesitamos proteger y restaurar nuestros bosques y otros ecosistemas naturales, que juegan un papel crucial en la captación de carbono y la regulación del clima. Es necesario invertir en investigación y que los políticos escuchen la evidencia científica y actúen en consecuencia.

En resumen, necesitamos recursos y voluntad política.

Ahora bien, ¿cómo encajan las armas nucleares en todo esto?

En primer lugar, la crisis climática aumenta el riesgo de una guerra nuclear. El Reloj del Apocalipsis actualmente marca 90 segundos para la medianoche, el mayor riesgo de la historia. En general, esto se debe a tres factores: 1. El liderazgo político inestable en los Estados con armas nucleares; 2. El aumento en el riesgo de una detonación nuclear accidental o ciberterrorismo debido a la vulnerabilidad de los sistemas de alerta máxima; y 3. El cambio climático.

El cambio climático aumenta las posibilidades de conflictos por recursos como la tierra, el agua potable y las reservas de alimentos, y aumenta la presión para migrar. El colapso político, a su vez, lleva a que líderes extremistas sean quienes lleguen a controlar las armas nucleares, lo que representa un riesgo en regiones donde ya existe tensión política.

Ahora bien, una sola detonación nuclear, especialmente en los tiempos actuales, es capaz de causar un daño ambiental significativo e irreparable. Incluso un uso limitado de armas nucleares tendría consecuencias climáticas catastróficas. En un intercambio nuclear entre India y Pakistán, ambos Estados con armas nucleares y a menudo en conflicto, con 100 bombas del tamaño de Hiroshima —menos del 1% del arsenal mundial— aparte de la catástrofe local y regional, habría un impacto climático global. Se reducirían los tiempos de cosecha de los granos básicos de los que dependen muchas poblaciones, lo que provocaría una hambruna que podría matar a más de dos mil millones de personas en todo el mundo.

A mayor escala, una guerra nuclear provocaría una destrucción de proporciones inimaginables, con decenas de millones de muertos, una altísima contaminación por radiación que se extendería por todo el mundo, y un invierno nuclear que provocaría la destrucción de nuestra civilización y la extinción de muchas especies, posiblemente incluso la nuestra.

Otro punto a considerar es que las armas nucleares son extremadamente costosas de mantener. Se ha calculado que la inversión actual en armas nucleares asciende a 116.000 millones de dólares al año y va en aumento.

Ahora, considerando que la solución a la crisis climática requiere recursos económicos y voluntad política, debe necesariamente incluir el desarme nuclear. Las armas nucleares no solo son una grave amenaza para el ambiente, sino que representan un costo y un riesgo inaceptables y socavan los cimientos de la cooperación internacional y la buena voluntad.

Para paliar la crisis climática se requiere una movilización masiva de recursos. Una gran parte de esta inversión de capital podría provenir directamente de los recursos sustanciales que se liberarían una vez que se implemente el desarme nuclear. A su vez, el talento científico y los recursos políticos actualmente implicados en las armas nucleares podrán redirigirse para buscar innovaciones ecológicas.

Además, para enfrentar ambas amenazas, es imperativo que la comunidad global se una con un enfoque de equidad, cooperación y responsabilidad compartida y, para ello, es fundamental canalizar los esfuerzos de la humanidad hacia el fomento de una cultura de paz y el fortalecimiento del régimen multilateral.

El Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares (TPAN), adoptado en la ONU en julio de 2017 por 122 países, es un paso significativo en esta dirección. El TPAN es producto del desarme humanitario y de la formulación de políticas basadas en la evidencia, y un triunfo de la diplomacia internacional, y promueve una cultura de paz y cooperación.

Su universalización e implementación fortalecen el régimen multilateral y promueven la diplomacia científica y la cooperación internacional, elementos esenciales para enfrentar el cambio climático. Por sus efectos directos e indirectos, la firma y ratificación del TPAN deben, por lo tanto, incluirse como acciones urgentes en el marco de la crisis climática.

Se nos acaba el tiempo, pero aún tenemos opciones. Ante este doble dilema existencial, la humanidad se encuentra ante una encrucijada: podemos asegurar nuestra continuidad y prosperidad o podemos asegurar nuestra propia destrucción. Más que nunca, el mundo necesita diálogo; necesita participación social y líderes pragmáticos que sean capaces de escuchar a la ciencia, tomar decisiones valientes y promulgar e implementar políticas constructivas.

Cargando valoraciones...
Comentar
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Cargando relacionadas...

CRTVG - Corporación Radio y Televisión de Galicia
A Xunta do PP remata o seu plan de control sobre a CRTVG tras escoller á súa nova directora en solitario
A xornalista Concepción Pombo substituirá, co único aval do Partido Popular, a Alfonso Sánchez Izquierdo. O Goberno de Alfonso Rueda modificou a lei de medios para que os votos do seu partido fosen suficientes para elixila.
Altri
A Plataforma Ulloa Viva cambia a súa directiva para os vindeiros anos de loita contra Altri
A veciñanza da comarca máis afectada escolleu entre dúas listas logo de non chegar a un consenso. A gañadora tratará de ampliar a súa base de socias e socios por toda Galiza e abrirá máis as portas ás grandes organizacións do país, como a CIG.
El Salto n.79
A celulosa ou a vida: xornalismo situado e loita social para frear un ecocidio
O xoves 17 de xullo esperámosvos no CS 'A Nubeira' de Vigo para presentar o último número da revista El Salto xunto a algunhas das súas principais protagonistas: as que loitan contra o macroproxecto de celulosa liderado por Altri e avalado pola Xunta.
AGANTRO
O desprazamento forzoso en Chiapas: metáfora da vida núa
Conversamos coa investigadora América Navarro sobre o desprazamento forzoso en Chiapas.
Altri
Galiza elixe o rumbo da loita contra Altri nas eleccións á directiva da plataforma Ulloa Viva
A veciñanza da comarca máis afectada presenta dúas listas separadas logo de non chegar a unha proposta de consenso. Por unha banda, concorre unha candidatura continuísta e, pola outra, unha alternativa que se achega máis o nacionalismo institucional.

Últimas

O Salto medra contigo
O Salto Galiza abre un crowdfunding para empapelar Altri
Queremos investigar os responsables políticos e empresarias do que podería ser o maior atentado ambiental da historia recente de Galiza.
Orgullo
O Orgullo Crítico enche de diversidade e de humanismo Galiza: “Transfeministas con Palestina”
Crónica visual de como unha enorme multitude encheu de diversidade o centro da cidade de Vigo.
O Teleclube
'O Teleclube' alucina no deserto con Óliver Laxe e 'Sirat'
Laxe leva o seu cuarto premio de Cannes, esta vez en competitición, polo seu novo filme que explosiona na gran pantalla.
A Catapulta
O tempo, o espazo e a poesía de Estíbaliz Espinosa
A poeta visita A Catapulta para conversar sobre o seu traballo e a súa traxectoria literaria
O Teleclube
'O Teleclube' pecha a temporada cos supervivintes de '28 anos despois'
Danny Boyle e Alex Garland volven ao mundo dos infectados que inspirou o renacemento dos 'zombis'.

Recomendadas

Medio rural
A esperanza da xestión colectiva fronte ao espolio: os comuneiros de Tameiga contra o Celta
Mentres varios proxectos industriais tentan privatizar e destruír os ecosistemas galegos, algúns grupos de veciños e veciñas organizadas fan oposición social construíndo alternativas comunitarias. Ás veces, tamén gañan ao xigante.
Feminismos
Dous anos sen reparación tras sufrir lesbofobia nun Rexistro Civil de Pontevedra cando ían inscribir a seu fillo
Un funcionario negouse a inscribir ao fillo de Antía e a súa parella. Un erro de redacción na lei trans está detrás dos argumentos que o funcionario esgrime para defender a súa actuación.
Migración
A veciñanza mobilízase para acoller migrantes tras o peche de centros de Rescate Internacional en Galiza
Tras o progresivo desmantelamento de varios dispositivos de acollida, moitos refuxiados foron trasladados a outros puntos do Estado sen aviso previo. Outros son simplemente desaloxados trala denegación da súa solicitude de asilo.
Ourense
Ourense organízase para loitar contra patrullas de extrema dereita nos barrios máis empobrecidos da cidade
A veciñanza e os movementos sociais responden ao discurso do medo promovido por Frente Obrero e sinalan a súa estratexia de criminalizar a pobreza e sementar odio en contextos de exclusión e abandono institucional.
Comentarios

Para comentar en este artículo tienes que estar registrado. Si ya tienes una cuenta, inicia sesión. Si todavía no la tienes, puedes crear una aquí en dos minutos sin coste ni números de cuenta.

Si eres socio/a puedes comentar sin moderación previa y valorar comentarios. El resto de comentarios son moderados y aprobados por la Redacción de El Salto. Para comentar sin moderación, ¡suscríbete!

Cargando comentarios...