Acuerdos comerciales
Mercosur: ahorro para la UE, expolio para Sudamérica

América del Sur vive otra de sus llamadas “olas neoliberales” y tiene a la extrema derecha en Brasil, uno de los integrantes de Mercosur, con quien la Unión Europea ha firmado un acuerdo comercial tras veinte años de negociaciones.

Agricultor Peru
Un agricultor peruano del Valle del Cusco. Gary Manrique
1 jul 2019 16:09

La Unión Europea se vuelve a blindar comercialmente. Tras casi 20 años de negociaciones, este fin de semana se aprobó el acuerdo comercial de la Unión Europea con Mercosur —Mercado Común del Sur, integrado por Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay, más otros Estados asociados—. Sin entrar en análisis políticos sobre si fue acertado o no expulsar a Venezuela de esta organización, en clave económica la Unión Europea se ahorrará unos 4.000 millones de euros en aranceles, aunque varias cuestiones quedan en el aire.

El libre comercio siempre lleva aparejada una injusticia comercial del contratante más fuerte frente al contratante más débil. En este caso, un Producto Interior Bruto más elevado no es la única garantía de la Unión Europea, también ser núcleo central de otros acuerdos comerciales como el CETA (con Canadá), el cuasi fallido TTIP (con Estados Unidos) o el último acuerdo comercial firmado recientemente con Japón.

En términos agrícolas se adivina una desigualdad muy patente en el horizonte. Si la producción de Sudamérica, pese a las altas emisiones de CO2 que serían necesarias para importar sus productos, compensa más económicamente, esto provocará un cambio en el modelo productivo latinoamericano.

Uno de los ejemplos más evidentes es la producción de quinoa, que hace menos de una década era uno de los alimentos base de países como Bolivia o Perú y ahora se consume masivamente en Europa. Por otro lado, la agricultura y la ganadería europeas, ya bastante tocadas y subvencionadas en campos como la producción láctea, se verían resentidas por la importación de productos que ya no sería necesario producir aquí —teóricamente—, bajo la excusa de cumplir con protocolos como los acuerdos climáticos de París. Esto marca una senda peligrosa, con países que pagarán para que otros contaminen más que ellos.

Desde la propia Unión Europea, el comisario de agricultura Phil Hogan ha insistido en que habrá productos europeos especialmente protegidos. Serán los denominados “de alta calidad y regionales, protegidos por su indicación geográfica”. Esta definición es bastante ambigua y un continente en el que cabrían muchas cosas que no se especifican, si finalmente el acuerdo logra salir adelante. Para ello deberá todavía superar muchos trámites parlamentarios y la ratificación de todos los países miembros de la UE.

Respecto a la carne, habrá una tarifa preferencial para 99.000 toneladas —un 1,25 % del consumo total europeo—, cifra sobre la que después es previsible que se aplique algún tipo de gravamen, según las mismas fuentes.

Phil Hogan
Phil Hogan, comisario europeo de Agricultura y Desarrollo Rural. Foto: Europa Pont

En temas de transparencia, desde las instituciones europeas se advierte de que se protegerán los intereses de los productores de la UE, aunque no se dice nada de los productores sudamericanos.

en contradicción con los ods

Este acuerdo también choca con algunos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, agenda impulsada por la Organización de Naciones Unidas (ONU) para sustituir a los Objetivos del Milenio y que los Estados firmantes quieren implantar en 2030. En su segundo punto, se habla de garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles.

Según informes de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), en Latinoamérica un 4,7% de sus habitantes estaban en riesgo alimentario en 2014, porcentaje que aumentó en 2016 hasta llegar al 6,4%.

Este indicador también advierte de la propia desigualdad entre países de Mercosur, ya que el riesgo de hambre en Paraguay en 2016 estaba establecido en un 20,20%, mientras que en Argentina no superaba el 6%, cifra, del mismo modo, alarmante.

El punto octavo quiere conseguir la promoción de un crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible. Aquí cabe preguntarse lo obvio: ¿es sostenible ese gran volumen de importaciones y exportaciones en condiciones económicas tan favorables? Los datos de la FAO aseguran que en los países en vías de desarrollo la mayoría de su población ocupada trabaja en el sector agrícola y esto supone la mayor parte de su PIB. En Sudamérica, entre el 40 y el 80% de las explotaciones agrícolas proviene de pequeños productores.

Trabajo infantil

Otra de las cuestiones de las que no se ha hablado al exponer este acuerdo ha sido qué pasará con países donde o no es ilegal que los niños trabajen o no se toman las suficientes medidas de control para que eso no ocurra.

La FAO estima que casi el 60% del trabajo infantil mundial se desarrolla en el ámbito de la agricultura, lo que comprendería a unos 100 millones de niños. Además, menos del 20% de los trabajadores agrícolas tiene acceso a protección social básica. Son aspectos que no interesa tratar con profundad en el acuerdo, a sabiendas de que Sudamérica es uno de los continentes con más desprotección laboral y económica.

Ni que decir tiene que la exportación de vehículos sin prácticamente aranceles será una operación económica que beneficiará a Europa, especialmente a Alemania, el mayor productor europeo de utilitarios. Bajo la excusa de un libre comercio, estos intercambios conseguirán no cumplir los acuerdos climáticos de París.

Esta coyuntura es más que previsible porque de esta maximización de los beneficios que supondría la supresión de aranceles también nacerían nuevas operaciones y el comercio entre ambos continentes se intensificaría. No se ha hablado de sanciones por un incumplimiento de emisiones todavía más acusado que el actual. Al fin y al cabo todos los acuerdos comerciales incumplen las emisiones de C02, incluso los propios países internamente, pero este tipo de tratados rompen con una supuesta línea mundial de reversión de los problemas acarreados, entre otras cuestiones, por la contaminación a escala mundial.

Por último, queda en el aire el ya evidente blanqueo de la Unión Europea ante la extrema derecha que representa Jair Bolsonaro. Tampoco se sabe si reclamará medidas especiales. Aunque Brasil es un gran actor económico en expansión, su presidente ya ha dado carta blanca a cuestiones como la esquilmación del Amazonas y ha autorizado operaciones que confrontan radicalmente con la postura —a caravista, aunque privada y económicamente lleve una línea totalmente diversa— de la Unión Europea en el tema medioambiental.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Globalización
Crisis del multilateralismo El terremoto Trump sacude las instituciones del orden mundial y la “globalización feliz”
Muchas de las instituciones que marcaron la vida internacional desde la caída del Muro han entrado en crisis. ¿Todas? No, especialmente aquellas que intentan regular los derechos humanos, de los pueblos y de la naturaleza.
Opinión
Opinión ¡Que vivan los aranceles!
Que Trump propugne aranceles no debe hacernos caer en la trampa de defender los intereses de los grandes oligopolios.
Mercosur
Mercosur Ministro Carlos Cuerpo, no nos venda la moto del acuerdo UE-Mercosur
A uno y otro lado del océano, las organizaciones agrarias, ecologistas y sociales sabemos que el efecto de este tratado será devastador para la agricultura social.
Galicia
Galicia A Xunta aprobou a celulosa de Altri argumentando que a súa cheminea de 75 metros sería “icónica”
O Informe de Patrimonio Cultural, favorable á multinacional, emitiuse con base en dúas encargas externas, contratadas e pagadas pola empresa ao ex presidente e ao actual tesoureiro de Icomos-España.
Alemania
Alemania Friedrich Merz es elegido canciller alemán por la gran coalición tras una jornada de suspense
El nuevo canciller alemán supera una votación extraordinaria tras un sonoro fracaso en su primer intento. Los conservadores gobernarán con el partido socialdemócrata.
Israel
Israel Netanyahu acelera los planes de ocupación total de una Gaza diezmada por el hambre
El ejército israelí quiere movilizar a 30.000 reservistas para una nueva expansión de la ofensiva sobre Gaza. Las organizaciones dependientes de la ONU alertan de la hambruna y las enfermedades en un enclave en el que escasea el agua potable.

Últimas

Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Madres organizadas contra los arrancamientos piden una reunión con Infancia
Pamela L.C. ve a su bebé dos horas a la semana después de que se lo retiraran dos días después de su nacimiento. Ella y otras madres han decidido organizarse para pedir medidas que frenen los arrancamientos.
Madrid
Madrid Sareb amenaza con desahuciar el centro social La Animosa, en Hortaleza
Los colectivos que participan del centro social okupado, y que han dado vida a este espacio durante los últimos cuatro años, convocan a defender su permanencia aunque se ha retrasado la fecha de desalojo hasta el 26 de mayo.
Opinión
Opinión España ya roza el 2,5% en gasto militar
Según el autor, investigador del Centre Delàs, el gasto militar real del Estado español será de 40.457 millones de euros y representará respecto al PIB el 2,48%. A esto se sumarán las inversiones comprometidas en programas de armamento.
Comunidad de Madrid
Universidad pública El alumnado de la UNED denuncia el “modelo antipedagógico” tras la supresión de tutorías presenciales
El proceso de eliminación de clases se remonta a 2008, aunque ha sido este año, con el nombramiento Claudia Sevilla como directora de centros asociados de Madrid, cuando el gobierno de Ayuso “ha pisado el acelerador”.
Opinión
Opinión El rentismo es racismo
La posición de las personas migrantes y racializadas en el conflicto del alquiler nos coloca como sujetos esenciales e imprescindibles en la lucha por la vivienda.

Recomendadas

Laboral
Laboral Coidar sen dereitos: a loita das traballadoras nas residencias privadas de Galiza
Sen tempo nin medios para ofrecer uns coidados axeitados, alertan dunha situación insostible nos centros e denuncian a privatización dun servizo a costa do benestar das persoas maiores e dependentes.
Alemania
Alemania Ines Schwerdtner: “Los conservadores tienen esta estrategia de normalizar la AfD, pero eso ha salido muy mal”
De profesión periodista, Ines Schwerdtner ha sido una de las responsables del ascenso de Die Linke, un partido que pasó de no aparecer en las encuestas a superar el 8% en las elecciones de febrero.