Contigo empezó todo
1492: verano de éxodo en España

Se acabó la tolerancia en la península de las tres culturas. El 10 de agosto de 1492 se cumplía el plazo para la salida de España de los judíos. 
La rendición de Granada
La rendición de Granada, pintada por Francisco Pradilla Ortiz en 1882.
6 oct 2018 06:28

Bajo el calor extremo de este verano de 1492, la España moderna se sigue perfilando a base de sus dos rasgos predilectos: la conquista genocida en el exterior y la limpieza étnica en el interior.

Mientras los caballeros castellanos continúan masacrando a los aborígenes canarios —la conquista de las islas terminaría en 1496 en Tenerife— y apenas quedan dos meses para que Colón “descubra”, para desgracia de estos, a los americanos, en la península se consuma el éxodo de entre 50.000 y 150.000 judíos, un contingente de población equiparable al contemporáneo Reino de Navarra.

Solo una minoría acepta la conversión y la gran masa de expulsados pone rumbo a Portugal, al norte de África o al Imperio Otomano, este último lugar uno de los pocos donde no serían pronto maltratados o expulsados.

De la convivencia a la intolerancia

En este agosto de 1492 se acabó la tolerancia de la que habían disfrutado los judíos durante ocho siglos, discriminados pero florecientes y en paz, en la España musulmana y en los reinos cristianos. Por lo general, eran gravados con impuestos para practicar sus costumbres y se limitaba su acceso a los cargos administrativos, pero la comunidad judía también disfrutaba de cierta autonomía. Frente a las leyendas propagadas por sus enemigos, solo existía una minoría acaudalada, mientras que la gran mayoría se dedicaba a la artesanía, el pequeño comercio o la agricultura.

No tuvieron eco durante este extenso período los constantes llamamientos antisemitas de curas y frailes, pero las crisis económicas y las luchas políticas del siglo XIV empezaron a convertirles en cabezas de turco. Comenzó la violencia, culminada en las matanzas de cientos de ellos en 1391. En enero, el arzobispo de Sevilla llamó a derribar las sinagogas. El asalto sangriento a la judería se extendió a otras localidades. Aterrorizados, muchos judíos huyeron o se bautizaron. Se estima que, para 1415, más de la mitad de los judíos de Castilla y Aragón se habían convertido oficialmente al cristianismo.

El golpe final

Los Reyes Católicos desatarían el terror en la fase final de la Reconquista. En 1478 se crea la Inquisición con la prioridad de acabar a las bravas con las prácticas de los conversos, “malos cristianos”. Nos podemos hacer una idea del trabajo de los inquisidores con este dato: en los primeros años, dictaron 700 sentencias de muerte solo en Sevilla. En 1480, tanto judíos como mudéjares son segregados en guetos —hasta entonces las juderías formaban parte de las ciudades— y, en 1483, los judíos son expulsados de Andalucía.

Ya conquistada Granada, desde la Alhambra, símbolo de la ciudad de las tres culturas, Isabel y Fernando amputan una de ellas en marzo de 1492 al firmar el edicto preparado por el inquisidor general Tomás de Torquemada —que curiosamente tenía ascendientes judíos—.

El 10 de agosto se cumplió el plazo para haberse convertido o haber malvendido sus propiedades y abandonado la que ha sido su tierra durante siglos. El edicto de Granada advierte sin tapujos sobre las consecuencias de desobedecer: “Si algún judío que no acepte este edicto si acaso es encontrado en estos dominios o regresa será culpado a muerte”.

Del papel firmado en un lujoso salón de la Alhambra se ha pasado a la dura realidad de esos cuatro meses, un éxodo masivo descrito así por un párroco testigo de los hechos: “Salieron de las tierras de sus nacimientos chicos y grandes, viejos y niños, a pie y caballeros en asnos y otras bestias, y en carretas, y continuaron sus viajes cada uno a los puertos que habían de ir; e iban por los caminos y campos por donde iban con muchos trabajos y fortunas; unos cayendo, otros levantando, otros muriendo, otros naciendo, otros enfermando, que no había cristiano que no hubiese dolor de ellos y siempre por do iban los convidaban al bautismo y algunos, con la cuita, se convertían y quedaban, pero muy pocos…”.

Se lleva a cabo así el golpe definitivo del afán del poder por construir un país monolítico contra una de las tres patas de la diversidad religiosa española, que continuará poco después contra musulmanes y moriscos.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Contigo empezó todo
Contigo Empezó Todo La saga de los Archs en las luchas de Barcelona
Manuel Archs muere fusilado a finales del siglo XIX. 30 años después, su hijo Ramón se pone al frente de la defensa armada de los sindicatos.
Contigo empezó todo
Contigo empezó todo El comunismo libertario de Hildegart Rodríguez
La joven madrileña, a quien se recuerda por morir a manos de su madre, contribuyó con sus ideas a la política revolucionaria durante la II República.
Contigo empezó todo
Contigo empezó todo Los obreros sevillanos que lograron trabajar seis horas al día
Poco antes del golpe militar de 1936, el Sindicato Único de la Construcción de Sevilla consiguió un acuerdo histórico con la patronal.
chusa
6/10/2018 10:30

Gracias por el articulo y aun mas gracias si puedes escribir otro sobre los musulmanes españoles que citas de pasada a lfinal de tu texto.

8
0
CRTVG - Corporación Radio y Televisión de Galicia
CRTVG A Xunta do PP remata o seu plan de control sobre a CRTVG tras escoller á súa nova directora en solitario
A xornalista Concepción Pombo substituirá, co único aval do Partido Popular, a Alfonso Sánchez Izquierdo. O Goberno de Alfonso Rueda modificou a lei de medios para que os votos do seu partido fosen suficientes para elixila.
Altri
Altri A Plataforma Ulloa Viva cambia a súa directiva para os vindeiros anos de loita contra Altri
A veciñanza da comarca máis afectada escolleu entre dúas listas logo de non chegar a un consenso. A gañadora tratará de ampliar a súa base de socias e socios por toda Galiza e abrirá máis as portas ás grandes organizacións do país, como a CIG.
El Salto n.79
Altri A celulosa ou a vida: xornalismo situado e loita social para frear un ecocidio
O xoves 17 de xullo esperámosvos no CS 'A Nubeira' de Vigo para presentar o último número da revista El Salto xunto a algunhas das súas principais protagonistas: as que loitan contra o macroproxecto de celulosa liderado por Altri e avalado pola Xunta.
Altri
Altri Galiza elixe o rumbo da loita contra Altri nas eleccións á directiva da plataforma Ulloa Viva
A veciñanza da comarca máis afectada presenta dúas listas separadas logo de non chegar a unha proposta de consenso. Por unha banda, concorre unha candidatura continuísta e, pola outra, unha alternativa que se achega máis o nacionalismo institucional.

Últimas

O Teleclube
O Teleclube 'O Teleclube' alucina no deserto con Óliver Laxe e 'Sirat'
Laxe leva o seu cuarto premio de Cannes, esta vez en competitición, polo seu novo filme que explosiona na gran pantalla.
A Catapulta
A Catapulta O tempo, o espazo e a poesía de Estíbaliz Espinosa
A poeta visita A Catapulta para conversar sobre o seu traballo e a súa traxectoria literaria

Recomendadas

Medio rural
Medio rural A esperanza da xestión colectiva fronte ao espolio: os comuneiros de Tameiga contra o Celta
Mentres varios proxectos industriais tentan privatizar e destruír os ecosistemas galegos, algúns grupos de veciños e veciñas organizadas fan oposición social construíndo alternativas comunitarias. Ás veces, tamén gañan ao xigante.
Feminismos
Feminismo Dous anos sen reparación tras sufrir lesbofobia nun Rexistro Civil de Pontevedra cando ían inscribir a seu fillo
Un funcionario negouse a inscribir ao fillo de Antía e a súa parella. Un erro de redacción na lei trans está detrás dos argumentos que o funcionario esgrime para defender a súa actuación.
Ourense
Ourense Ourense organízase para loitar contra patrullas de extrema dereita nos barrios máis empobrecidos da cidade
A veciñanza e os movementos sociais responden ao discurso do medo promovido por Frente Obrero e sinalan a súa estratexia de criminalizar a pobreza e sementar odio en contextos de exclusión e abandono institucional.