We can't find the internet
Attempting to reconnect
Something went wrong!
Hang in there while we get back on track
Elecciones
La noche en la que ganó el bipartidismo
Corría marzo de 2008. España se asomaba a la peor recesión de su historia reciente y el PSOE de José Luis Zapatero y el PP de Mariano Rajoy celebraban los mejores números de sus partidos en la historia. Juntos concentraban el 83% del voto, una cifra que no se repetiría nunca. Desde entonces, la suma de ambas formaciones cayó en picado. En las elecciones de abril de 2015, tocaron suelo en el 45%. Desde abril de 2019 y la repetición electoral forzada por Pedro Sánchez, las cosas cambiaron y las cifras del bipartidismo no han dejado de subir en cada comicio.
En las elecciones de este 23 de julio, el PP y PSOE conseguían el mejor resultado de la última década con apelaciones al voto útil y al voto del miedo: al gobierno “social-comunista” que pacta con los independentistas por un lado, y a la extrema derecha por el otro.
En la noche en la que Tezanos tuvo razón, el PP obtuvo 47 escaños más y el PSOE lejos de derrumbarse –tal como vaticinaban todas las encuestadoras salvo el CIS– consiguió aumentar en dos sus escaños. Los grandes perdedores de este trasvase de votos interbloques han sido Vox y Sumar. Por no hablar de Ciudadanos, aplastado por las mismas fuerzas centrífugas meses antes del 23J.
Vox pierde 19 escaños
El partido de Santiago Abascal perdió 19 escaños y 623.000 votos. El líder de Vox explicó la derrota por la “desmovilización” del electorado por parte de Alberto Núñez Feijóo y el “blanqueamiento” del PSOE con sus ofertas de pactos. La pérdida de voto y escaños ha sido especialmente acentuada en las pequeñas y medianas provincias, allí donde Vox se había hecho fuerte el 10N. En Castilla y León, donde Vox lleva gobernando con el PP desde abril de 2022, la fuerza de extrema derecha ha perdido cinco de los seis diputados que había ganado en las elecciones de noviembre de 2019. La concentración del voto útil ha llevado a Vox a perder los diputados que tenía en León, Salamanca, Segovia y Ávila.
En Castilla y León, donde Vox lleva gobernando con el PP desde abril de 2022, la fuerza de extrema derecha ha perdido cinco de los seis diputados que había ganado en las elecciones de noviembre de 2019
La formación ultra también ha perdido tres escaños en Andalucía, dos en Madrid, Castilla-La Mancha y País Valencià. También ha perdido uno en Extremadura, Ceuta, Canarias, Baleares y Ceuta.
En Catalunya, el PP ha adelantado a Vox y ha recuperado su posición de referente electoral entre la derecha españolista: frente a los dos diputados catalanes que Vox mantiene en el Congreso, los populares suman cuatro más y triplican el resultado de los de Abascal.
Este resurgir del “voto útil” también ha hundido las expectativas de las candidaturas de la España Vaciada, que apenas obtuvo 3.000 votos, y de Teruel Existe, que pierde el escaño que había ganado en 2019.
Es espacio de Sumar también pierde
En el bloque del centro-izquierda se ha repetido el mismo esquema. La primera víctima, en escaños y votos, ha sido el espacio ocupado por Sumar.
En las elecciones del 10N, este espacio formado por Unidas Podemos, sus confluencias, Mes Compromís y Más País - Equo, obtuvo 38 diputados, 3,6 millones de votos y un 15,1% del electorado.
El espacio político que ocupa Sumar ha perdido siete diputados y 635.000 votos con respecto a los resultados de las últimas elecciones de 2019
En estas elecciones, esta coalición que agrupa a una quincena de formaciones políticas de izquierda ha caído en siete diputados y 635.000 votos con respecto a las últimas elecciones de 2019. A pesar de estos resultados, la lectura de la candidata de Sumar es optimista. “Hemos ganado”, dijo Yolando Díaz con un hilo de voz en la rueda de prensa en la noche electoral. Sumar pierde posiciones –especialmente Podemos, que se queda con cinco diputados–, se mantiene en cuarta posición –apenas 20.000 votos por detrás de Vox–, pero mantiene intacta su condición estratégica para formar gobierno. A diferencia de otras formaciones aliadas en la pasada legislatura, Sumar todavía no ha hablado del “precio” del apoyo de su formación a una posible investidura de Pedro Sánchez.
La apelación al voto útil ha acabado también con el plan de Adelante Andalucía de obtener un diputado por Cádiz, donde había limitado su participación para no quitar votos a Sumar en otras provincias andaluzas. Con apenas 8.234 votos, el partido de Teresa Rodríguez no tendrá un asiento en las Cortes.
La otra formación que se despide del Congreso es la CUP, que pierde 148.000 votos y sus dos escaños.