Música
Talk Talk, en el árbol de la sabiduría

En el díptico esencial de los británicos Talk Talk se escucha pop de corazón sacro, confundido entre tics jazz, aura góspel y la abnegada motivación por encontrarse con la espiritualidad de Alice Coltrane y el Miles Davis azul.

Talk Talk
El grupo inglés Talk Talk.
21 sep 2018 06:00

En sus dos últimos trabajos al frente de Talk Talk, Mark Hollis encontró un maná de músicas donde el misterio se conjuró como activo esencial de toda obra destinada a desbordar los pliegues del tiempo. Tanto Spirit of eden (1988) como Laughing stock (1991) estaban tallados sobre el patrón de lo inexplicable, al que pusieron cepo por medio de sesiones interminables en las que, tal como recuerda el ingeniero de sonido Phill Brown, el objetivo primordial era provocar accidentes que abrieran respiraderos pop no atisbados hasta aquel entonces.

Así sucede desde el mismo punto de partida de “The Rainbow”, en el primero de estos dos trabajos, con casi diez minutos de blues monacal, impulsado por las heridas abiertas en la voz de Hollis. Esos teclados suspendidos en el ambiente, la obsesión por la espaciosidad. La cadencia no es lenta; desanuda los lazos del corsé delimitado a las fórmulas pop. El fluir ingrávido de la instrumentación se emparenta con las grabaciones que Jan Garbarek hizo para el sello ECM, la cuna del ambient-jazz.


No necesitaron más de una canción para renegar de su pasado new romantic y posterior abdicación ante el synth-pop emocional de hallazgos como The colour of spring. De todos modos, en este último ya se podían atisbar pistas de lo que estaba por venir: temas densos, cosidos con un mayor interés por el bordado atmosférico que el melódico.

La sustitución de la parafernalia sintética por instrumentos clásicos reproducía las mismas intenciones albergadas por Florian Fricke cuando Popol Vuh publicaron Hosianna Mantra (1972). “No quiero usar el sintetizador como parte de la música religiosa cristiana. No se puede hacer referencia a ella como música de iglesia, a menos que consideres tu propio cuerpo como una iglesia; y tus oídos, como su puerta”.

Esta misma reflexión es la que surge a oídos de quien se adentra en el díptico esencial de Talk Talk: pop de corazón sacro, confundido entre tics jazz, aura góspel y la abnegada motivación por encontrarse con la espiritualidad de Alice Coltrane y el Miles Davis azul.

Seis canciones por disco que invocan un bucle temporal propio, donde las manecillas del reloj parecen haber sido congeladas en un punto de condición mística. O lo que es lo mismo: la magia de no haber truco. La fascinación del éxtasis estético.

Por pura inercia, en los engranajes que dan cuerda a los temas, Hollis y los suyos implantaron la noción post-rock: anteponer las texturas, timbres y exabruptos eléctricos a la clásica liturgia del riff y estribillo, pero con instrumentos rock.

Seis años antes de que el término “post-rock” fuera acuñado por el crítico musical Simon Reynolds tras escuchar Hex (1994), el primer álbum de Bark Psychosis, Talk Talk ya habían vislumbrado la esencia de una metodología más adelante recogida proverbialmente por These New Puritans, alumnos aventajados de Bark Psychosis: los descedientes naturales de Talk Talk.

El chispazo que funde a estos tres grupos parte de la capacidad desarrollada por Hollis, junto a su mano derecha, el productor Tim Friese-Greene, por hacer que las cosas no suenen jamás premeditadas. Esa sensación de encontrarse continuamente en terreno desconocido, pero sin vanagloriarse del descubrimiento, ni haciendo acopio de un mayor lustre en los acabados instrumentales y vocales.

La aparente dejadez que bulle en esta música va más allá de la desgana con la que retumba la batería; es algo que se refleja en estribillos brumosos o la ausencia de los mismos. No hay diques-guía en estas excursiones hacia las catacumbas del subconsciente. Unas que David Sylvian ya había comenzado a realizar en Tin drum (1981), el punto cardinal de Japan, o en cualquiera de sus posteriores discos en solitario, con Brilliant trees (1984) como modelo básico de acción.

De la heterodoxia otoñal de David Sylvian al Scott Walker del nuevo milenio, autor de melódicas viñetas avant-garde de alto riesgo, pasando por la elegancia ingrávida de The Blue Nile, la etapa ascética de Talk Talk se cierne como el planeta sobre el cual rotan algunas de las variantes pop más libres e inconformistas de los últimos treinta años.

Otros nombres como los de Hood, Roger Quigley y las camadas esotéricas de la generación perdida del post-rock británico de los 90 —tal que Labradford y Pram—, les deben a Talk Talk su épica traducción de (falsa) intranscendencia vital en obnubilante laberinto emocional. También la pérdida del miedo a la hora de emborronar los perfiles reconocibles de sus canciones por medio de una ejecución instrumental que evita cualquier clase de reproducción notal al uso o forma pianística.

Música de sensaciones para la cual la búsqueda de la perfección espontánea queda plenamente corroborada en la larga temporada necesitada para asentar cortes como el majestuoso “After the flood”, un río de impresiones sensoriales encauzado por un pulso profundamente humano. Lo mismo que Hex, el resultado de ocho años de laboriosa búsqueda hasta dar con la ruta a seguir. Trabajos que, en el caso de ambos grupos, se asemejan al del buscador de pepitas de oro. Y que contrasta con la pérdida de la paciencia a la hora de concebir la creación musical pop en el siglo XXI. Donde Talk Talk intentaban a toda costa deshilar los actos reflejos acordonados en su aprendizaje y desarrollo musical, la mayoría de sus discípulos se fijan en sus formas, no en su espíritu: germinado por su vasta cultura pero, sobre todo, una decidida vocación autodidacta.


Dicha tendencia hacia la senda más fácil revierte en la imposibilidad de encontrar versiones que, precisamente, abran vetas entre tan creciente normalidad. No hay más que escuchar a Do Make Say Think y su obstinado intento de enfatizar el aura mágica de “New grass”. Lo mismo se puede decir de Joan As A Police Woman, que también escoge la vía sencilla en su reinterpretación de “Myrrhman”. Canciones cuyo nacimiento surgió de la desorientación surgida en los Wessex Studios de Highbury, Londres, donde fueron grabadas, y para las que la pérdida de la noción del tiempo acabó impregnándose en el latido de unos sonidos cocinados en la oscuridad de un estudio apenas alumbrado por unas velas.

El proceso como representación fidedigna de la photo finish, dicha proyección del resultado final tenía tanto que ver con el circo que, en su momento, se trajo Bob Ezrin para inspirar a Alice Cooper en Welcome to my nigthtmare (1975), o como cuando cuando Unwound se encerraron en una habitación para grabar Leaves turn inside you (2001) bajo los efectos de la ingesta desproporcionada de jarabe para la tos…

Tras esfuerzos monumentales como Spirit of eden y Laughing stock, Talk Talk se quebró. Ya estaba todo dicho en dos bisagras irremplazables de la torsión pop; fabulosamente prorrogadas por .O. Rang, el grupo formado por Paul Webb y Lee Harris, acompañantes de aventura de Mark Hollis, también autor de Mark Hollis (1998), el disco que cierra una trilogía sin par con sus dos anteriores trabajos en Talk Talk: la criatura de la que tantos mamaron —como los Radiohead de Kid A (2000) y Amnesiac (2001)—, pero de quien nadie supo descifrar su misterio.

Arquivado en: Música
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

El Salto Radio
el salto radio Peinando canas 2: Ganas de cantar, ganas de vivir
En el segundo capítulo de esta serie dedicada al colectivo sénior destacamos el trabajo de Irina Capriles al frente del Cor de la Universitat Oberta per a Majors de les Illes Balears.
Culturas
Opinión Macrofestivales o la romantización del hiperconsumo
No hay macrofestival ético, del mismo modo que no hay banco que piense en las personas. La forma de construir relaciones sociales, así como el lugar desde donde estas se producen son importantes.
Literatura
Ensayo Qué (no) puede un cuerpo
Algunas novedades editoriales y tendencias audiovisuales sugieren retornos de modos de entender lo inhumano que fueron característicos de la neoliberal década de los 80.
Israel
Israel Netanyahu acelera los planes de ocupación total de una Gaza diezmada por el hambre
El ejército israelí quiere movilizar a 30.000 reservistas para una nueva expansión de la ofensiva sobre Gaza. Las organizaciones dependientes de la ONU alertan de la hambruna y las enfermedades en un enclave en el que escasea el agua potable.

Últimas

Opinión
Opinión España ya roza el 2,5% en gasto militar
Según el autor, investigador del Centre Delàs, el gasto militar real del Estado español será de 40.457 M€ y representará respecto al PIB el 2,48%. A esto se sumarán las inversiones comprometidas en programas de armamento.
Comunidad de Madrid
Universidad pública El alumnado de la UNED denuncia el “modelo antipedagógico” tras la supresión de tutorías presenciales
El proceso de eliminación de clases se remonta a 2008, aunque ha sido este año, con el nombramiento Claudia Sevilla como directora de centros asociados de Madrid, cuando el gobierno de Ayuso “ha pisado el acelerador”.
Opinión
Opinión El rentismo es racismo
La posición de las personas migrantes y racializadas en el conflicto del alquiler nos coloca como sujetos esenciales e imprescindibles en la lucha por la vivienda.
Más noticias
Tren de alta velocidad
Problemas ferroviarios Llegar a tu casa a las cuatro de la madrugada o cómo pasar la tarde del domingo atrapados en un tren
La línea de Iryo Sevilla-Madrid Puerta de Atocha fue uno de los 30 trenes afectados por las fuertes demoras. Su llegada, programada a las 20:50hrs, se produjo a las 3:05hrs de la madrugada sin apenas haber dado información a sus viajeros
Reducción de jornada
Reducción de jornada Cada vez está más cerca la semana laboral de 37,5 horas
Aprobada hoy en en Consejo de Ministros, la reducción de la jornada máxima legal será tramitada de urgencia en un Congreso que exigirá medidas compensatorias.
Rumanía
Rumanía La ultraderechista Alianza para la Unión de los Rumanos de George Simion se destaca para la segunda vuelta
La extrema derecha rumana sale de nuevo reforzada pese a la eliminación de la carrera electoral de su otro representante, Calin Georgescu. La segunda vuelta de las elecciones será el 18 de mayo.
València
València Rechazada la querella por tortura contra Ramón, policía infiltrado en València
Un juzgado de València desestima el recurso presentado por Alerta Solidària contra la inadmisión de la querella criminal por torturas contra el agente que pasó dos años infiltrado.

Recomendadas

Laboral
Laboral Coidar sen dereitos: a loita das traballadoras nas residencias privadas de Galiza
Sen tempo nin medios para ofrecer uns coidados axeitados, alertan dunha situación insostible nos centros e denuncian a privatización dun servizo a costa do benestar das persoas maiores e dependentes.
Galicia
Galicia Vigo, A Coruña e Ourense mercaron material policial a Israel por medio millón de euros en só catro anos
O alcalde ourensán, Gonzalo P. Jácome, adxudicou un contrato por 70.000 euros días despois do sete de outubro. Abel Caballero asinou outro de máis de 200.000 euros e a alcaldesa da Coruña seguiu a estela cun contrato de 170.000 euros.