Opinión
Reacciones al poliamor o cómo borrar la palabra de dos mujeres mientras se dice señalar al patriarcado

No sé nada de poliamor, pero siento la necesidad de decir lo que pienso sobre dos mujeres poliamorosas.

Vayan por delante dos advertencias: la primera, no sé casi nada de poliamor. Lo más poliamoroso que he hecho en mi vida es subrayar el libro de Brigitte Vasallo. La segunda: no suelo dar mi opinión. Ya no opino en Twitter y apenas lo hago en mi cuenta de Instagram, donde me siento un poco menos insegura. Y esto no solo tiene que ver con que la vida me desborde sino, sobre todo, con el miedo a enfrentarme al tono violento y al desprecio que es habitual en redes.

Pero siento la necesidad de decir lo que pienso sobre dos mujeres. Se llaman Paloma y Ana y son las protagonistas de un reportaje audiovisual sobre poliamor que publicamos la semana pasada. Ellas son los extremos de la V en esta relación en el que el vértice se llama Ángel. Porque hay muchos tipos de no monogamias y muchos tipos de relaciones poliamorosas, cosas que una aprende cuando escucha. Ese es uno de los privilegios de ser periodista, a veces una siente curiosidad por un tema o algo le incomoda o le chirría o le pone o le preocupa y puede indagar sobre ello en horario laboral. Como cuando vi una película porno de gang bang feminista a las diez de la mañana sentada en mi escritorio para hacer un artículo sobre porno ético

Pero vuelvo con Paloma y Ana, dos mujeres a las que el amor como nos lo han contado no les valía y decidieron indagar otras formas. “Coquetear con las no monogamias”, lo llama muy seximente Paloma en el reportaje. La situación es esta, decía: Paloma y Ana son los extremos de una V en la que Ángel es el vértice. Las dos tienen una relación estable con él en una relación que es abierta por todas sus partes. Nótese que no quiero desprenderme del sujeto femenino plural, porque esto es importante.

Paloma y Ana son dos mujeres a las que el amor como nos lo han contado no les valía y decidieron indagar otras formas: nótese el femenino plural, porque es importante

Aunque ambas tenían experiencia en relaciones abiertas, nunca les había pasado algo así. Ellas explican que han tenido que inventarse por el camino una forma de amar que no estaba en las películas que habían visto. Que celebran el amor porque tienen mucho. Que a veces mantienen en el armario su forma de quererse, pero que poco a poco han ido haciéndola pública y que la gente, cuando escucha y las ve, lo entiende. Que tienen una relación estupenda con su novio y entre ellas. Que saben que para que la relación esté bien en su conjunto tienen que estarlo todas las partes implicadas, y que por eso hablan mucho y se cuidan mucho. Que, por supuesto, ellas también tienen relaciones con otras personas.

Bien: todo esto es lo que dicen ellas. Esta es la experiencia de dos mujeres adultas —añado que feministas, aunque mal vamos si tenemos que medir la credibilidad de las mujeres con el siempre sospechoso feministómetro— contada en sus términos, con sus palabras y en sus espacios con una generosidad infinita porque creen que ya está bien de hablar de no monogamias como si fuera un pecado o la palabra clave del título sesudo de una editorial progre de ensayo. 

Sin embargo, desde que se publicó no he parado de leer reacciones que pretenden desmontar su historia cuestionándolas a ellas. Me refiero a comentarios que insinúan que ellas son unas vendidas al patriarcado. O que son unas víctimas que no saben lo que hacen. Me refiero a frases hirientes hasta para mí, de las que se infiere que hay un feminismo bueno y un poliamor bueno y que a ver quiénes son estas para ir haciendo el poliamor como les da la santa gana. 

Tal vez tendría que haber elegido una historia no monógama diferente, una con la que apuntalar mis creencias en lugar de una con la que poner a prueba mis prejuicios

Tal vez tendría que haber elegido una historia no monógama diferente, una que encajara mejor en los esquemas de quienes iban a verla. Una que me encajara mejor a mí. Una con la que apuntalar mis creencias en lugar de una con la que poner a prueba mis prejuicios. Pero elegí esta porque me pone a prueba. También porque es una historia de amor hecha de cero, sin herramientas, con conversaciones a dos, a tres, hacia afuera y hacia adentro. Sin recetas teóricas, sin bibliografía. 

Además, es una historia de amor que rompe con varios de los mitos del amor, llamémosle, de mierda: la realización a través de una “media naranja”, la exclusividad afectiva y sexual. Pero es que también es una historia de amor que dinamita ese otro mito de mierda según el cual las mujeres competimos, mostrando una relación, la de Paloma y Ana, que es un ejemplo precioso de cómo se conjuga el verbo “metaamar”, un palabro del que ellas rehúsan porque tienen un lenguaje propio. Para mí, lo dije arriba, ellas dos son las protagonistas de esta historia que ha hecho florecer media docena de prejuicios sobre las no monogamias y demasiados comentarios violentos hacia dos mujeres libres y sí, qué pasa, enamoradas.

No puede ser que autoricemos a unas pocas a reflexionar sobre no monogamias mientras ponemos bajo sospecha prácticas no monógamas construidas desde la experiencia, sin subrayar ningún libro. Os lo digo yo, que podría hacer un glosario poliamoroso sin haber sabido jamás salir de los términos de las relaciones monógamas. 

Viva el amor. Abajo los búnkeres.

Cargando valoraciones...
Comentar
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Cargando relacionadas...

CRTVG - Corporación Radio y Televisión de Galicia
A Xunta do PP remata o seu plan de control sobre a CRTVG tras escoller á súa nova directora en solitario
A xornalista Concepción Pombo substituirá, co único aval do Partido Popular, a Alfonso Sánchez Izquierdo. O Goberno de Alfonso Rueda modificou a lei de medios para que os votos do seu partido fosen suficientes para elixila.
Altri
A Plataforma Ulloa Viva cambia a súa directiva para os vindeiros anos de loita contra Altri
A veciñanza da comarca máis afectada escolleu entre dúas listas logo de non chegar a un consenso. A gañadora tratará de ampliar a súa base de socias e socios por toda Galiza e abrirá máis as portas ás grandes organizacións do país, como a CIG.
El Salto n.79
A celulosa ou a vida: xornalismo situado e loita social para frear un ecocidio
O xoves 17 de xullo esperámosvos no CS 'A Nubeira' de Vigo para presentar o último número da revista El Salto xunto a algunhas das súas principais protagonistas: as que loitan contra o macroproxecto de celulosa liderado por Altri e avalado pola Xunta.
AGANTRO
O desprazamento forzoso en Chiapas: metáfora da vida núa
Conversamos coa investigadora América Navarro sobre o desprazamento forzoso en Chiapas.
Altri
Galiza elixe o rumbo da loita contra Altri nas eleccións á directiva da plataforma Ulloa Viva
A veciñanza da comarca máis afectada presenta dúas listas separadas logo de non chegar a unha proposta de consenso. Por unha banda, concorre unha candidatura continuísta e, pola outra, unha alternativa que se achega máis o nacionalismo institucional.

Últimas

O Salto medra contigo
O Salto Galiza abre un crowdfunding para empapelar Altri
Queremos investigar os responsables políticos e empresarias do que podería ser o maior atentado ambiental da historia recente de Galiza.
Orgullo
O Orgullo Crítico enche de diversidade e de humanismo Galiza: “Transfeministas con Palestina”
Crónica visual de como unha enorme multitude encheu de diversidade o centro da cidade de Vigo.
O Teleclube
'O Teleclube' alucina no deserto con Óliver Laxe e 'Sirat'
Laxe leva o seu cuarto premio de Cannes, esta vez en competitición, polo seu novo filme que explosiona na gran pantalla.
A Catapulta
O tempo, o espazo e a poesía de Estíbaliz Espinosa
A poeta visita A Catapulta para conversar sobre o seu traballo e a súa traxectoria literaria
O Teleclube
'O Teleclube' pecha a temporada cos supervivintes de '28 anos despois'
Danny Boyle e Alex Garland volven ao mundo dos infectados que inspirou o renacemento dos 'zombis'.

Recomendadas

Medio rural
A esperanza da xestión colectiva fronte ao espolio: os comuneiros de Tameiga contra o Celta
Mentres varios proxectos industriais tentan privatizar e destruír os ecosistemas galegos, algúns grupos de veciños e veciñas organizadas fan oposición social construíndo alternativas comunitarias. Ás veces, tamén gañan ao xigante.
Feminismos
Dous anos sen reparación tras sufrir lesbofobia nun Rexistro Civil de Pontevedra cando ían inscribir a seu fillo
Un funcionario negouse a inscribir ao fillo de Antía e a súa parella. Un erro de redacción na lei trans está detrás dos argumentos que o funcionario esgrime para defender a súa actuación.
Migración
A veciñanza mobilízase para acoller migrantes tras o peche de centros de Rescate Internacional en Galiza
Tras o progresivo desmantelamento de varios dispositivos de acollida, moitos refuxiados foron trasladados a outros puntos do Estado sen aviso previo. Outros son simplemente desaloxados trala denegación da súa solicitude de asilo.
Ourense
Ourense organízase para loitar contra patrullas de extrema dereita nos barrios máis empobrecidos da cidade
A veciñanza e os movementos sociais responden ao discurso do medo promovido por Frente Obrero e sinalan a súa estratexia de criminalizar a pobreza e sementar odio en contextos de exclusión e abandono institucional.
Comentarios

Para comentar en este artículo tienes que estar registrado. Si ya tienes una cuenta, inicia sesión. Si todavía no la tienes, puedes crear una aquí en dos minutos sin coste ni números de cuenta.

Si eres socio/a puedes comentar sin moderación previa y valorar comentarios. El resto de comentarios son moderados y aprobados por la Redacción de El Salto. Para comentar sin moderación, ¡suscríbete!

Cargando comentarios...