Series
En el cielo todo va bien, pero no estamos en el cielo

La mortalidad humana se filtra en las imágenes en la nueva Twin Peaks, tan enigmática como siempre y quizá algo más pesimista.

Twin Peaks, capítulo 2
Una escena del capítulo 2 de la última temporada de 'Twin Peaks'. Showtime
23 oct 2017 11:00

En el primer largometraje de David Lynch, Cabeza borradora, una mujer de ropa y actitud naif cantaba insistentemente: “En el cielo todo va bien”. Esa canción, “In heaven”, hizo una cierta fortuna a través de las versiones de múltiples grupos, de Devo a Pixies pasando por Bauhaus. Sirvió también para poner música al lado más angélico de la filmografía del realizador. Porque los cuentos de Lynch pueden incluir abundantes dosis de perversidad, pero han terminado repetidamente con tonos más luminosos.

Los finales de Corazón salvaje y Twin Peaks: fuego camina conmigo ejemplificaron esta tendencia. Lynch concluía esos viajes al lado más oscuro de los backyards de los Estados Unidos con fantasmagorías benignas, apariciones de belleza y bien absolutos que podían considerarse encarnaciones de inocencias no manchadas por el horror. Eran, quizá, signos de que el artista internacional que resumió su biografía en clave localista (“Nacido en Missoula, Montana. Eagle Scout”) conserva algo del estadounidense medio, atraído por los finales felices, el terror moralista o el dualismo en la representación de bienes y males fácilmente discernibles.

Quizá no es así. Porque el happy end desaforado de Terciopelo azul, con estampas de vida apacible y vuelta al orden embellecidas con el canto etéreo de Julee Cruise, parecía sarcástico. Y porque en la filmografía de Lynch encontramos muchos limbos y muchas zonas grises, aunque raramente se pierda la noción de un bien y un mal distinguibles.

El realizador se ha movido gustosamente entre los polos más o menos opuestos de lo oscuro y lo luminoso, lo bello y lo siniestro. También ha explorado sus yuxtaposiciones a través de luces negras y oscuridades esclarecedoras, de momentos siniestramente bellos o bellamente siniestros.

En los últimos años, se diría que el Lynch maduro ha rediseñado esas catarsis extrañas que dejaban al espectador descolocado: ¿tenía que consolarnos una especie de aparición mariana tras contemplar la horrible noche final de Laura Palmer en Twin Peaks: fuego camina conmigo? Las posteriores Mulholland drive e Inland empire acabaron con destellos de luz entre tonos más oscuros.

Háganse las tinieblas

¿Qué lugar ocupa la nueva temporada de Twin Peaks en todo ello? De nuevo, tenemos espíritus malvados. Y presencias benéficas más grises, como ese Fogonero que tiene más de dios partidario de la intervención mínima que de entregado ángel de la guarda.

No se puede decir que la serie caiga precisamente del lado del optimismo. Entre otras cosas, por la estupidización que sufre Dale Cooper, el héroe más luminoso de la obra lynchiana. Cooper era un verdadero entusiasta que disfrutaba con fruición e ingenuidad casi infantil de cafés, donuts y pasteles de cerezas. No dejaba de loar las bondades de una pequeña localidad algo alejada de la modernidad pero acechada por males atávicos (o no tan atávicos: ¿todo comenzó con la bomba atómica o esta solo generó una fisura entre dos mundos?), incluso cuando comenzaba a conocer sus secretos más terribles. Podría considerarse casi un símbolo del obstinado optimismo americano, una fortificación levantada sobre una realidad violenta.

Twin Peaks, capítulo 4
Dale Cooper y su doble personalidad en la última temporada de 'Twin Peaks'. Showtime

Las escenas más luminosas de la nueva serie tienen mucho de falso, comenzando por la vida familiar de la que se apropia sin quererlo el precariamente renacido Cooper, un Ulises perdido en una odisea ridícula.

Desaparecida la trama de amor adolecente sublime entre la mejor amiga y el amante de Laura Palmer, encontramos otro amor entre jóvenes... que incluye malos tratos y disparos. Incluso un espacio de confort como la comisaría de Twin Peaks resulta mucho más gris.

Aunque algunos personajes ariscos o directamente criminales se hayan ablandado con la edad, el mundo parece más hostil en esta última temporada de la serie. No estamos en el cielo, ni siquiera en el espejismo paradisíaco con monstruos agazapados que nos presentaba la serie original. Quizá es parte de la lógica narrativa, después del triunfo del mal sobre el bien que se escenificaba en el final de la segunda temporada. O quizá también tiene que ver con la evolución vital de sus autores.

Explorando el final

El hombre que amaba las cosas de chavales (“porque hay tanto misterio cuando eres un chaval...”, declaró) ha firmado una de las series más gerontófilas de la modernidad. Y sí, la televisión no está sometida a la lógica del cine blockbuster, que intenta construir éxitos intergeneracionales usando a los adolescentes como grupo principal de interés.

Pero Lynch redobla la apuesta con su Twin Peaks de 2017: apenas hay añadidos rejuvenecedores de entidad (como una nueva agente del FBI) en un cásting plagado de intérpretes sexagenarios y septuagenarios. Varios de ellos murieron a lo largo del rodaje o antes del estreno de la nueva serie.

Twn Peaks, capítulo 8
El capítulo 8 de la última temporada de 'Twin Peaks' ha sido señalado como uno de los momentos cumbre de la serie. Showtime

El regreso a la comisaría de Twin Peaks resulta mucho más oscuro, entre referencias a la enfermedad del sheriff Truman (en este caso, una excusa para justificar la ausencia voluntaria del actor retirado Michael Ontkean) y, sobre todo, las apariciones de La Mujer del Leño. La vida de la actriz, enferma de cáncer que falleció en pleno rodaje, influye en el personaje. Sus enigmáticas y sufridas llamadas al agente Hawk inoculan en la serie algunas dosis de un dolor auténtico. Queda a un lado ese Lynch distante en la representación de la muerte, que filma tiroteos con un laconismo estupefacto, oscuramente cómico.

La mortalidad humana se filtra en algunas imágenes de la serie. Y su realizador prefirió no protegernos de ello, no levantar barreras de contención. Además, como ya hacían algunas secuencias de Cabeza borradora, la nueva Twin Peaks remite (voluntariamente o no) a un horror cósmico que puede tener vínculos con la espiritualidad. O al revés: a una espiritualidad que puede asociarse con el horror cósmico. Sus escenas pueden ir más allá del juego con el espectador, incapaz de seguir la narración sin dudas ni interrogantes, para convertirse en símbolos de la limitada capacidad humana para entender la vida, el universo y el tiempo.

Eso sí: el agente Cooper no cae en la locura propia de los héroes fracasados de H. P. Lovecraft. Y Lynch nos deja sumergidos en la oscuridad y la confusión, pero lo hace al estilo de Carretera perdida: con una resolución que puede tener ecos fatalistas pero también es juguetona.

El cineasta se despide con un golpe surrealista donde la catarsis no se encuentra en un golpe emocional que cierre el drama, sino en la apertura de una nueva puerta a través de otra pregunta. Con un continuará posible, aunque ya no podrán participar activamente en él muchos de los rostros que conocimos previamente en este sueño oscuro.

Arquivado en: Series
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Cine
Cine y series ‘Cómete a los ricos’ en la pantalla: ¿moda, provocación o conflicto de clase?
Desde el éxito de ‘Parásitos’, el mainstream del audiovisual ha dejado más de una docena de títulos dedicados a ridiculizar a los megarricos, pero, ¿contienen una crítica real de clase o son simples gamberradas superficiales?
Series
Series Los Chochos voladores vienen por ti
Ha vuelto ‘We are Lady Parts’, alhamdulillah, pero igual no te gusta lo que tienen que decir. ¡Un, dos, tres, cuatro!
Redes sociales
MeToo en Instagram “Anónimo, por favor”: escritoras, publicistas y actrices pasan del testimonio en redes a la organización
Varias cuentas de Instagram publican testimonios que dibujan una escena de abuso de poder y violencia sexual normalizada las artes escénicas, la música o la publicidad. Sus impulsoras se organizan para transformar la realidad.
Dana
Medio ambiente y violencia machista Luchar contra la violencia de género; un pilar de la responsabilidad ambiental
La violencia de género y la crisis medioambiental atraviesan nuestras estructuras y se refuerzan mutuamente, creando un círculo vicioso que agrava las vulnerabilidades específicas de las mujeres frente a los desastres naturales como el de Valencia.
Galicia
Medio ambiente Balsas mineras: una amenaza perpetua en favor del lucro empresarial
Las balsas de residuos de la mina de Touro y Riotinto serían ilegales en muchos países por no cumplir normas básicas de seguridad. Estas estructuras ya han provocado docenas de catástrofes y vertidos tóxicos.
Opinión
Violencia sexual El estudio de Igualdad sobre trata alienta el control y el estigma hacia las trabajadoras sexuales
Es necesario reflexionar sobre los mecanismos de control social de corte patriarcal y racista que oprimen a las trabajadoras sexuales. Un feminismo plural debería sentirse interpelado a reconocer el nefasto impacto de estudios faltos de rigor.
Justicia
Reportaje El imperio de los jueces-soldado
La justicia española ha entrado en un callejón peligroso. Desde hace años, el Poder Judicial se ha mostrado escorado a la derecha y más como un problema para la resolución de cuestiones cruciales para el Estado.

Últimas

Palabras contra el Abismo
Palabras contra el Abismo Lee un capítulo de ‘Café Abismo’, la primera novela de Sarah Babiker
El barrio es el espacio físico y social en los que transcurre ‘Café Abismo’, la primera novela de la responsable de Migraciones y Antirracismo de El Salto, Sarah Babiker.
COP29
Cumbre del Clima La COP29 cierra su acuerdo de financiación en 300.000 millones y corta la ambición de los países del sur
Tras dos semanas de negociaciones arduas, la Cumbre del Clima celebrada en Azerbayán ha aumentado sus objetivos de financiación, pero quedan muy lejos de las demandas de los países en vías de desarrollo que pedían al menos 500.000 millones para 2035.
Opinión
Revista El Salto Debajo de la palabra “lawfare” no está la playa
El sistema judicial, si se fijan, no obedece o asume propuestas o presiones del Ejecutivo o del Legislativo. Sino que más bien ocurre lo contrario.
Galicia
LGTBIfobia El jurado declara culpables de asesinato a tres de los acusados por el asesinato de Samuel Luiz
El tribunal popular aprecia homofobia en el crimen, absuelve la única mujer encausada y considera cómplice al único varón que no estaba en la cárcel.
Opinión
Opinión La distopía no es un género literario
Hay grandes carteles por todos lados donde te hacen responsable de tener el móvil bien cargado y aconsejan llevar una batería externa para evitar percances.
COP29
Cumbre del clima La propuesta de los países ricos para cerrar la COP29 enfurece a las naciones en desarrollo
El Norte global, causante histórico del cambio climático, propone 250.000 millones de dólares anuales para la adaptación y mitigación climática del Sur, cuando el propio borrador del acuerdo establece que al menos serían necesarios cinco billones.
Análisis
Análisis Tenemos que hablar de esto: enfermedad, daño y comunidades de cuidado
La comprensión resolutiva o positivista de la enfermedad esconde la profunda obligación de “estar bien”; una obligación que está quebrando nuestras sociedades sin que nos demos cuenta.
Opinión
Opinión Aprender de las fantasías de la conspiración
Difícilmente los desmentidos científicos convencen a quienes ya han incorporado una fantasía de la conspiración. Sin embargo, estas fantasías se corresponden con un hecho como que el desasosiego por el futuro es un sentimiento generalizado.

Recomendadas

Dana
València Mazón se atrinchera detrás de un militar y cierra su crisis de gobierno
El president valenciano ha remodelado el Consell de la Generalitat dando salida a dos conselleras y fichando un general en la reserva para la vicepresidencia.
América Latina
Leandro Morgenfeld “El triunfo de Trump va a empoderar a los Milei y los Bukele”
El historiador e investigador argentino especializado en la relación entre Estados Unidos y América Latina, analiza el triunfo electoral de Donald Trump y el impacto que tendrá en una región que Washington sigue considerando su “patio trasero”.