LGTBIAQ+
La piedra de Marsha P. Johnson 50 años después

Tras este medio siglo, podemos celebrar que quienes pusieron el cuerpo han conseguido liberar algunos de los derechos vitales que “la dictadura de lo normal” tenía secuestrados.

Pegatina Ocaña Orgullo Sevilla
Una pegatina colocada en el recorrido del Orgullo de Sevilla recuerda la figura de Ocaña. Francisco Javier Huete
Miembro de la Red Marikones del Sur e integrante del bloque crítico "Disidencias del Sur" (Sevilla)
28 jun 2019 06:00

En este mes de junio de 2019 se cumplen 50 años desde que Marsha P. Johnson arrojara una piedra contra el poder, materializado en forma de agente policial. Esa piedra portaba un mensaje: nuestros deseos no son perversos, nuestros afectos no están enfermos, y nuestros cuerpos e identidades nos pertenecen, le escueza a quien le escueza. Tras este medio siglo, podemos celebrar que quienes pusieron el cuerpo han conseguido liberar algunos de los derechos vitales que “la dictadura de lo normal” tenía secuestrados. Pero aunque en torno al Orgullo todo sea triunfal y los unicornios estén de moda, quedan muchas piedras por lanzar a diestro y siniestro.

Sobre todo a siniestro porque, tal vez, lo más tenebroso que pasa este año es que en el Estado español, y empezando por nuestra Andalucía, la extrema derecha ha salido de la incubadora y los partidos afines le han dado cobijo. No disimulan, lo repiten de un modo u otro, pero lo dejan claro: odian a la población LGTB+. Arrementen contra el colectivo cada vez que pueden: que si no puede llamarse matrimonio, que si en las escuelas se adoctrina, que si las terapias de conversión deberían ser legales... Entre eso y el genocidio checheno, entre eso y el asesinato de Marielle Franco, no hay tanta distancia. Entre otras cosas, porque la presencia de discursos como el de Vox normaliza y legitima actitudes que nos ponen en peligro (basta con ver el aumento de los ataques diversófobos). Pero las cifras que contabilizan la violencia diversófoba dejan fuera algo difícil de cuantificar, pero no por eso menos grave: entre las personas cisheterodisidentes existen mayores tasas de ansiedad, miedo social, depresión y suicidio. Los Orgullos institucionales invisibilizan estas realidades como parte de su estrategia comercial, los Orgullos están totalizados por los esbirros de la heteronorma.

La disidencia que habita en los márgenes tiene que ocupar el centro, si no, la piedra de Marsha voló para nada

Tenemos que desplazar a los cuerpos hegemónicos, asimilados por “la dictadura de lo normal”, que cuando bailan ostentosos la música que el opresor les pone con sus cuerpos normativos, silencian e invisibilizan a quienes menos espacio tienen dentro y fuera de la fiesta, y reproducen actitudes machistas, misóginas, tránsfobas, plumófobas, colonialistas, xenófobas, capacitistas, especistas... Los Orgullos críticos son propuestas que surgen desde la gente no binaria, la de género fluído, las bolleras, las marikas, los, las y les trans, las personas asexuales y bisexuales, las gordas, las viejas, las que habitan la diversidad funcional, las putas, y, por supuesto, las personas migrantes y racializadas. La disidencia que habita en los márgenes tiene que ocupar el centro, si no, la piedra de Marsha voló para nada.

La realidad es que, a pesar de las conquistas, Marsha P. Johnson hoy, en 2019, seguiría estando la última en la fila de las posibilidades, porque era trans, y las personas trans siguen siendo el colectivo más ninguneado dentro y fuera de nuestros círculos, quienes menos esperanza de vida tienen, quienes más difícil tienen el acceso al mercado laboral y a un sistema sanitario que las respete, incluso en Andalucía, con una ley trans con grandes aciertos, pero que no reconoce a las personas no binarias, porque la libre asignación de género solo tiene dos casillas: hombre o mujer.

Marsha P. Johnson, además de ser una mujer trans que lanzó una piedra contra la dictadura de lo normal, era una mujer racializada negra que tiró una piedra contra la opresión de la blanquitud, y esa piedra sigue volando en 2019

Marsha P. Johnson, además de ser una mujer trans que lanzó una piedra contra la dictadura de lo normal, era una mujer racializada negra que tiró una piedra contra la opresión de la blanquitud y esa piedra sigue volando en 2019, con cientos de personas cisheterodisidentes racializadas que sienten el rechazo y la fetichización en los ambientes LGTB+ o cientos de migrantes que buscan refugio en este suelo pero las matan en el mar, las rajan en las vallas o las persiguen y apalean en la calle. Además, la piedra de Marsha era la piedra de una puta perseguida por su estrategia para subsistir económicamente, y tampoco esto ha cambiado demasiado, por eso es de recibo que las putas y las luchas transmarikabibollo tejamos alianzas, porque somos las putas y las putas tampoco somos bien recibidas en las familias de bien.

Finalmente, Marsha P. Johnson apareció muerta un día, la policía decidió que fue suicidio sin titubear y a otra cosa mariposa porque, aparte de todo lo anterior, era pobre y la justicia es clasista. Por todo esto, es humillante la presencia de Gaylespol (la asociación de policías LGTB+) en los Orgullos institucionales, porque no se puede estar en nuestra misa y con la porra dando, porque la persecución de personas indocumentadas, el asedio a prostitutas o la protección a grupos nazis es opresión, y todas las opresiones son una. En el mundo que queremos, no queremos una policía gayfriendly, queremos que las fuerzas represoras del Estado y sus centros de internamiento dejen de existir.

La realidad es que, a pesar de las conquistas, Marsha P. Johnson hoy, en 2019, seguiría estando la última en la fila de las posibilidades, porque era trans

Pero aún hay más piedras por lanzar. Una para los partidos y las instituciones oportunistas que se creen que les vamos a dorar la píldora por que sonrían para la foto tras una pancarta y ondeen una banderita del arcoiris, que marchan acaparándose de todo, haciendo campaña electoral en primera plana. El mensaje es bien claro: no les debemos nada. Su sitio es atrás y a la escucha de nuestras demandas y nuestros gemidos, los de placer y los de dolor. Si quieren apoyarnos, que nos dejen ser en plenitud y sin cuestionamientos. No son dignos de entrar en nuestra causa, proque malversan nuestros símbolos para blanquearse lo burgués y lo fascista. Si lo que quieren es hacer campaña, que se vayan. Y que les sigan todas las empresas que decidieron un día que la piedra de Marsha podía empaquetarse y venderse como un souvenir y que nuestra vivencia es rentable. Esas empresas no nos quieren diversxs, sino clasificables, en categorías de consumo, quietecitxs en los nichos de mercado, y lo hacen con tal descaro que invaden nuestra marcha, la acaparan, la dominan y a cambio, ¿qué? ¿Van a acompañarnos de vuelta a casa, van a intervenir en los recreos cuando haya acoso, van a proporcionarnos algo que de verdad nos resulte necesario? Aunque el capitalismo se vista de rosa, capitalismo se queda, y tampoco lo queremos en nuestra orgía.

Sobre o blog
Espacio para las luchas sociales en Andalucía abierto a la participación. Coordinado por El Salto Andalucía. Si quieres colaborar, escríbenos a andalucia@elsaltodiario.com.
Ver todas as entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.
Sobre o blog
Espacio para las luchas sociales en Andalucía abierto a la participación. Coordinado por El Salto Andalucía. Si quieres colaborar, escríbenos a andalucia@elsaltodiario.com.
Ver todas as entradas
Vigo
Política A exdirectora financeira de Povisa perfílase como a nova líder do PP de Vigo
Luisa Sánchez Méndez foi entre 1999 e 2023 alto cargo do Hospital Povisa desde onde Alfonso Rueda deulle o pulo á sanidade pública, dirixindo os Recursos Humanos da Consellería de Sanidade na área sanitaria de Pontevedra e O Salnés.
Vigo
Sanidade Unha multitudinaria manifestación enche Vigo contra a privatización sanitaria orquestrada desde a Xunta
Ducias de miles de persoas e os partidos da oposición acoden ao chamado de SOS Sanidade Pública para reclamar “a reconstrución da área sanitaria de Vigo”, empobrecida pola privatización de servizos e os sobrecustos do Álvaro Cunqueiro.
Poesía
Poesía A linguaxe contra o espolio
Daniel Salgado reformula as claves da poesía política na contemporaneidade.
Rap
Poetas Puestos “Tanto los medios como la política quieren que seas un tonto feliz”
Charly Efe y Teko, acompañados de una banda, publican el disco ‘Tontos felices’ donde mezlcan su carrera en el rap con ritmos rock para crear lo que han bautizado como rap‘n’roll.
Medio ambiente
Minaría A Xunta xestiona a reactivación de 51 minas en Galiza coa licenza caducada
O goberno de Alfonso Rueda publicou medio centenar de concursos de dereitos mineiros con permisos caducados que abrirán as explotacións unha vez conclúa unha fase de análise e investigación do solo.

Últimas

Ocupación israelí
Ocupación israelí Israel firma el acuerdo con Hamás, pero todavía tiene que votarlo el Gobierno
Los representantes israelíes en Doha validan el pacto para un cese temporal de las hostilidades y un intercambio de prisioneros. Este viernes se vota en el Gobierno israelí, donde dos partidos ultras se oponen.
Entrevista La Poderío
Entrevista La Poderío Carmen Fernández Gálvez: “El origen de la creatividad está en la naturaleza”
Carmen Fernández Gálvez (1979) nace en Vélez Málaga. Como mujer inquieta y curiosa decide realizar estudios de psicología. Su pasión por la cosmética natural y los remedios vegetales comenzó años más tarde.
Groenlandia
Análisis Por qué Groenlandia es clave en la carrera por las materias primas
El anuncio de Trump parece salido de una precuela de la película 'Don’t Look Up', en la que los intereses geopolíticos y económicos no nos dejan ver el colapso inminente.
Más noticias
Opinión
Opinión Un alto al fuego hecho a la medida de Trump
El esperando anuncio del cese temporal de los ataques sobre Gaza responde a una estrategia de los EEUU de cambio de paradigma regional. El acuerdo es injusto e insuficiente para los gazaties, que han sufrido un genocidio aún impune.
China
Pulsos bajo el cielo Beijing rave: amor, unidad y respeto
Exploramos los entornos de la música electrónica underground en Beijing, donde los jóvenes siguen creando espacios y nuevas formas de relacionarse y entenderse
Gobierno de coalición
Gobierno de coalición El CIS vuelve a situar la vivienda como el principal problema de la población
Uno de cada dos votantes de las izquierdas sitúan la vivienda entre los tres grandes problemas que afronta el país. La encuesta del CIS muestra a los partidos de la izquierda en la misma situación de desinfle que el mes pasado.
Análisis
Análisis El PSOE intenta pescar en el río revuelto de la izquierda para acercarse al PP
Entre los votantes del PP solo hay dos cosas que produzcan ilusión: el rechazo a Sánchez y su Gobierno e Isabel Díaz Ayuso. Feijóo no es una de ellas.
Historia
Descifrando a historia As cortes de Melide, así foi como o medo da nobreza galega tratou de frear novas revoltas como a Irmandiña
No ano 1520 en Castela, estala a Guerra das Comunidades. Esta revolta vai ter un carácter antiseñorial e tamén en contra o novo rei, Carlos I. En Galiza, tamén tivo o seu eco.

Recomendadas

Literatura
Letras Galegas Da Sección Feminina do franquismo ao Cancioneiro Popular Galego: o pobo é quen canta e baila
As cantareiras protagonizarán o Día das Letras Galegas de 2025. Beatriz Busto e Richi Casás fálannos delas, de Dorothé Schubarth, do Cancioneiro Popular Galego e da dificultade de acceder aos arquivos sonoros que conservan as súas voces.
Historia
Historia La segunda vida de Joaquín Maurín
Alberto Sabio reconstruye en ‘Excomunistas’ la vida y el pensamiento del fundador del POUM: desde su politización en el republicanismo hasta su giro socialdemócrata y anticomunista durante la Guerra Fría.
Ocupación israelí
Expansionismo israelí El Golán sirio, radiografía de una joya natural diezmada por la ocupación israelí
Las actividades extractivistas del Estado israelí sobre los recursos hídricos o proyecto de parque eólico en las tierras colonizadas amenaza el sustento diario de las comunidades locales.
Represión
Represión Cómo descubrir a un infiltrado, el manual
Un grupo de afectadas por el espionaje policial publica un texto colectivo como herramienta y reflexión sobre este fenómeno.