Barrios
Necesitamos una batalla naval en cada barrio

Ayer en Vallecas había una batalla que es una fiesta, que es un derroche y un sindiós acuático. Una fiesta que tiene historia y es presente, pues cada año renueva sus reivindicaciones, pero también innova en el arte de la guerra naval de secano.

Batalla Naval Vallecas 2018
Batalla Naval de Vallekas Dani Gago
Sarah Babiker
15 jul 2019 09:41

Cuando camino por las calles del Sur de la ciudad ya no veo solo barrios, sino espacios en resistencia. Vida no domesticada por el capital para encajar en cosmopolitas estampas turísticas. Detecto la fertilidad de los márgenes, el tacto áspero de las aceras, que impide a la gente deslizarse sin más por toboganes retóricos que llevan hacia la nada. Veo repúblicas de facto, sentidos del vivir que escapan de las teorizaciones que distancian y se asientan sobre el vocabulario de lo concreto.

Fuera de los centros turísticos, económicos o administrativos, en las afueras del poder, veo el futuro amestizado. Es una aceleración del pasado, pues la pureza es una nostalgia aburrida que solo existe en la cabeza de los tristes. Distingo vínculos más fuertes que cualquier discurso del odio en las terrazas de lo bares de barrio y en los bancos de los parques. Bombas listas para detonar los planes del apartheid hacia el que quieren encaminarnos en las risas de la chiquillería diversa que se congrega en las zonas infantiles y las desborda, cuestionando los primeros muros, esos de colores en los que se intenta contener a la niñitud contemporánea.Ayer, en Vallecas, mientras pensaba en todo esto, me cayó encima un cubo de agua.
Necesitamos una celebración colectiva que sea de todos y de nadie, un carnaval que involucre a estudiantes y tenderos, a abuelos que aún recuerdan su pueblo extremeño y niñas de pelo afro
Había una batalla que es una fiesta, que es un derroche y un sindiós acuático. Un barrio de gente armada con metralletas de colores. Hermanada en la risa y el juego y la mala leche convivial del barreño proyectado desde las ventanas. Una fiesta que tiene historia y es presente, pues cada año renueva sus reivindicaciones, pero también innova en el arte de la guerra naval de secano. Un delirio que no es de nadie y es de todos. De enanos de un año, y señoras de 70. Del vecino que nació allí en los 40, y el que llegó de república dominicana en el 2010. De los propietarios chinos de los bazares y de quienes se aventuran desde el otro lado de la ciudad.Un ritual loco y pacífico, donde está permitido apuntar a quien tú quieras, y a cada disparo le sigue una sonrisa. Donde entre batucadas y escaramuzas se celebra el barrio habitado, la vecindad como un territorio amigo al que uno puede pertenecer, una identidad que es un puerto, un puerto de mar en Madrid, donde son bienvenidos todos los navegantes.Bailamos bajo las lluvias desordenadas que niños y abuelas provocan desde los balcones. Sucumbimos a los ataques de enanos enloquecidos que ese día forman las células de avance de este ejército anárquico de mojados. Como en los mejores carnavales, todo el mundo está patas arriba en la guerra más divertida de todas, donde solo hay soldados rasos, y si se llora es de risa.
Derecho a la vivienda
Los cinco bloques de vivienda que se han negado a pagar las subidas de alquiler impuestas por Blackstone

Ya son más de cien las familias de cinco bloques de viviendas que se han plantado y han dicho no a la subida de alquileres en las viviendas que Fidere, filial de Blackstone, compró a la EMVS en 2013. 

Aquí nadie habla de narcopisos, bandas, suciedad, ocupas, esos grandes temas que forman la cantinela de la decadencia periférica, de moda en los telediarios y en los discursos de la derecha. El barrio se purifica en delirante orgía, la fiesta vale más que mil millones de programas y proyectos de integración y convivencia ideados en los despachos.

Con el vestido empapado, tras cientos de ataques de manguera, pistola, cubo, metralleta, y esos palos tan raros de colores, que son los más traicioneros, me alejo de la batalla en busca del sol de la tarde. Una batalla naval en cada barrio, pienso para mis adentros, mientras esquivo a los últimos rambos infantiles que se parten de risa en las aceras de la avenida de la Albufera. O algo así, una celebración colectiva que sea de todos y de nadie, una locura hecha ritual ineludible, un carnaval que involucre a estudiantes y tenderos, a abuelos que aún recuerdan su pueblo extremeño, y niñas de pelo afro.Algo así necesitamos. Y hacer resistencia golfa en las calles sin saberlo, como tan bien saben hacer los marineros vallecanos.
Arquivado en: Barrios Barrios
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Cine
Cine ‘La ciudad es nuestra’, la película sobre las primeras asociaciones vecinales de Madrid, cumple medio siglo
‘La ciudad es nuestra’, de Tino Calabuig y Miguel Ángel Cóndor, continúa igual de vigente que cuando se filmó, convirtiéndose en una película de imprescindible visionado, tanto por su valor documental histórico como por el ejemplo que presenta.
Urbanismo
Madrid El Espacio Ibercaja Delicias se queda sin licencia al no ser “en ningún caso” una actividad temporal
El juzgado número 9 de lo contencioso-administrativo de Madrid anula las licencias temporales concedidas por el Ayuntamiento que han permitido el macrocomplejo de ocio llamado Espacio Ibercaja Delicias desde 2021.
Cádiz
Derecho a la ciudad La zambomba de Jerez, enésima víctima de la turistificación y del ‘city branding’
La ciudad vive su Navidad más larga de su historia tras encender su alumbrado el pasado 22 de noviembre. El Ayuntamiento lo enmarca dentro de una estrategia turística pese a las quejas vecinales y la mercantilización de una fiesta declarada BIC
Comunero
21/7/2019 14:00

No necesitamos "una batalla naval en cada barrio". Necesitamos que cada persona en cada barrio y pueblo trabaje por unas crear tejido y poder popular y sus fiestas propias. No necesitamos copiar lo de Vallekas. Y mucho menos necesitamos que Vallekas se convierta el nuevo Lavapiés, ese barrio guay donde todos los gafapastas quieren vivir y se nos llena de gentrificadores a los que les encanta y les parece súper radical las fiestas que hacemos los pobres.

1
0
#37279
17/7/2019 16:04

Suso De Toro
‏ @SusodeToro1

Busque en las portadas de la prensa la noticia de la implicación del CNI en el atentado cometido por la célula del Imán de Ripoll: si no la encuentra es que ese medio de prensa le está engañando y es parte del mismo poder que permitió el atentado.

5
1
#37270
17/7/2019 15:54

"Pablo Iglesias
‏Verified account @Pablo_Iglesias_
3h3 hours ago

El silencio de los grandes medios sobre lo que el CNI sabía de los terroristas de Las Ramblas revela cómo funciona el poder en España. Y sirve para entender ciertos vetos para que nada cambie. ¿Por qué PP, PSOE y Cs impidieron que el Congreso investigara? ¿Por qué callan hoy?"

1
4
#37239
17/7/2019 15:29

A El Salto el terrorismo de estado le pilla lejos. Están en Madrid Central y comen magdalenas.

9
1
Xunta de Galicia
Sanidade A Xunta de Feijóo, condenada por negar as visitas a unha muller falecida de cancro por ter covid-19
A xuíza di que a situación requiriu medidas de prevención “flexibilizadoras”. Faleceu a principios de 2022 no Hospital Álvaro Cunqueiro durante os últimos meses de administración do xefe do PP con Julio García Comesaña como conselleiro.
Madrid
La burbuja del alquiler Sumar, Podemos y sindicatos de inquilinos presionan para convertir en indefinidos los contratos de alquiler
Sumar lanza una propuesta legislativa para transformar en indefinidos los contratos de alquiler, una de las principales demandas de la manifestación por la vivienda del 5 de abril. Una moción de Podemos, rechazada en el Congreso, pedía lo mismo.

Últimas

Historia
Descifrando a historia Así foi a rebelión antifiscal galega de 1790 contra a burocracia española
A monarquía española quixo implantar a Contribución Única, algo que provocou fortes protestas. A máis coñecida foi o motín da Ulloa, chamado así porque se produciu nas zonas desta comarca. Foi a maior revolta antifiscal do Antigo Réxime en Galiza.
Xunta de Galicia
Vivenda O ‘teléfono antiokupas’ da Xunta recibiu só tres chamadas por ocupacións en 2024
O servizo foi renovado este ano cun orzamento de 61.000 euros, coa colaboración do Consello da Avogacía Galega e 135 avogados para atender as consultas. O pasado ano atenderon 109 consultas, a maioría sobre desafiuzamentos.
Madrid
Acusaciones de violencia sexual Monedero, bajo investigación de la Universidad Complutense por la denuncia de acoso sexual de una alumna
La confidencialidad del expediente no permite saber cuándo se presentó la denuncia ante la Unidad de Igualdad o cuánto se demorará la resolución. La Complutense afirma que la Inspección de Servicios está tramitando la acusación.
Más noticias
Justicia
Justicia Rubiales, condenado por agresión sexual y absuelto del delito de coacciones
18 meses de multa con cuota de 20 euros al día por un delito de agresión sexual. Es la condena al expresidente de la RFEF Luis Rubiales por los hechos ocurrido en la ceremonia de entrega e medallas del pasado mundial celebrado en agosto en Sidney.
Egipto
Egipto Ashraf Omar continúa en prisión provisional por dibujar
Ashraf Omar, caricaturista político del medio digital AlManassa, sigue en prisión preventiva indefinida tras ser arrestado violentamente en su domicilio el 22 de julio de 2024.
Fascismo
Memoria antifascista Allí donde hay humo, hay fuego
A unos días de las elecciones alemanas, donde la ultraderecha acude fortalecida, un repaso sobre el proceso de desnazificación posterior a la Segunda Guerra Mundial y sus medias verdades.

Recomendadas

Feminismos
Ana Bueriberi “El activismo tiene que ser colectivo: para contribuir al cambio es imprescindible despersonalizar la causa”
La periodista madrileña Ana Bueriberi reconoce que no sintió la discriminación hasta que llegó a la Universidad. Hoy, desde el proyecto Afrocolectiva reivindica una comunicación antirracista, afrofeminista y panafricanista.
Inteligencia artificial
Militarismo La máquina de los asesinatos en masa: Silicon Valley abraza la guerra
Las fantasías distópicas sobre los futuros usos de las máquinas en la guerra están más extendidas que el relato de lo que ya está pasando en los campos de batalla.
América Latina
Extrema derecha Los soldados de Donald Trump en América Latina
Mientras algunos presidentes latinoamericanos, con mayor o menor ímpetu, intentan ponerle freno, otros tantos se arrodillan y le rinden pleitesía sin recibir nada a cambio. ¿Quiénes son los súbditos latinoamericanos de Trump?