Pensamiento
Vivir en la prórroga: leyendo a Marina Garcés entre tuit y tuit

Vivimos en la condición póstuma. Es el escenario postescenario, la historia posthistoria, del tiempo postiempo.

Libros texto 2
Intercambio de libros de texto en Móstoles, Madrid. FotogrAcción
Sarah Babiker
19 mar 2018 09:30

Si le preguntabas “cómo estás”, mi abuelo Pablo te sonreía y contestaba: “Pues aquí andamos, en la prórroga”. Eso fue en sus últimos años de vida, dolorido de ausencias, en un cuerpo atravesado de rendiciones. Y entonces él, hedonista terco, él que tanto había amado la vida, sentía que ya no podía defenderla ante el paso del tiempo y el apetito arbitrario de la enfermedad. La prórroga que habitaba no era una para meter el último gol y alzarse inesperadamente con la victoria. En realidad, el partido había terminado, y ya solo podía proteger exhausto la propia portería: ya solo le quedaba la duda de hasta cuándo iba a resistir.

Recientemente me acordé de la “prórroga” de la que hablaba mi abuelo con aquella sonrisa irónica. Fue leyendo el ensayo de Marina Garcés Nueva Ilustración radical.

En él, Garcés introduce un concepto que es un diagnóstico: vivimos en la condición póstuma. Es el escenario postescenario, la historia posthistoria, del tiempo postiempo. Atrás dejamos la promesa de un futuro próspero de la modernidad, pero también el bucle del presente eterno de la posmodernidad. El futuro sigue ausente, pero el presente ya no es sexy: es el tiempo agónico del relato póstumo, un “presente totalmente insostenible, (en el que) lo que se comparte es una misma experiencia del límite”. Y entonces, al igual que mi abuelo, en lugar de preguntarnos hacia dónde, la pregunta que nos hacemos es hasta cuándo. Solo que no estamos viejos, ni enfermas, solo que aún tenemos la vida por delante. Así que Garcés nos pregunta: “¿Por qué, si estamos vivos, aceptamos un escenario postmortem?”.

Temprano, cada mañana, busco a ciegas el móvil para apagar la alarma. Después, abro los ojos y entro a las redes sociales sometiéndome a una casera doctrina del shock. Son solo dos minutos para leer entre tuit y tuit el parte del último rapero enchironado, los próximos desahucios, el apellido del ladrón que será ascendido a vicepresidente de algo, variantes de la infamia y de la impunidad. Así que para cuando salgo de la cama, ya sé que vamos perdiendo. A veces me imagino a Naomi Klein apoyada en mi escritorio, ella, que escribió La doctrina del shock antes de Twitter y de Facebook, me ve salir de la habitación ya vencida, mientras se echa las manos a la cabeza y murmura: qué desastre.

Antes leía muchos libros, después muchos artículos, ahora muchos tuits. Es tan mucho de todo que cada vez suma menos. “El hecho decisivo de nuestro tiempo es que, en conjunto, sabemos mucho y que, a la vez, podemos muy poco”, dice con más concreción la Garcés.

Asumido esto, cuesta hasta prepararse el desayuno. Pero ahí vamos con el café y los periódicos, mientras la pobreza se extiende bajo los pies de quienes retuitean a primera hora de la mañana, lo imprescindible para la vida se agota y lo superfluo e innecesario inunda el mundo.

Los medios reproducen el último gran zasca de un tuitero de izquierdas. Un joven actor catalán se pregunta dónde ha aprendido a hablar castellano con desparpajo. Y yo ya tengo puesta la sonrisa irónica con la que nos enfrentamos a lo insoportable. La ironía era la última arma de mi abuelo en su etapa de epílogo. La ironía es el refugio de quienes ya no sabemos qué coño hacer. No hay ni un ápice de ironía en los grandes himnos revolucionarios, porque la ironía es el consuelo de los impotentes, de quienes saben demasiado para permitirse la utopía. Pues, como escribe Garcés, en este horizonte póstumo: “Con todos los conocimientos de la humanidad a nuestra disposición solo podemos frenar o acelerar nuestra caída hacia el abismo”.

El otro día conversaba con dos compañeras sobre todo esto. Intentábamos sacar adelante, encaminar, un proyecto chiquito en el barrio. Hablábamos de los últimos años, de una efervescencia amiga y estresante de charlas, encuentros, asambleas, proyectitos pensados en común, abandonados en la carrera precaria ante un abismo que enseña los dientes. Cómo pensar el otro mundo por venir mientras nos pasamos la vida apagando los incendios de este, nos decíamos, cansadas. En todo esto, falta algo, concordamos. Un horizonte nuevo, un hacia dónde. Una utopía desde lo que queremos y no desde lo que nos dejan querer. “Declararnos insumisos a la ideología póstuma es, para mí, la principal tarea del pensamiento crítico de hoy”, arenga Garcés desde las páginas de su ensayo.

Arquivado en: Pensamiento
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Unión Europea
Unión Europea La sociedad del miedo al declive
La angustia ante el futuro acompaña a las sociedades europeas desde hace tiempo y precede a la Unión Europea. Se manifiesta con mayor claridad en los períodos de declive económico y las turbulencias políticas y sociales que los acompañan.
Pensamiento
Vincent Bevins “Me irrita que se piense que la decisión de usar la violencia la toman los activistas y no el Estado”
El autor de 'El método Yakarta' vuelve con 'Si ardemos', un ensayo sobre las protestas que tuvieron lugar en la primera década de los años diez en muchas partes del mundo.
Pensamiento
Economista Clara Mattei: “El liberalismo y el fascismo están unidos en su protección del orden del capital”
El ambicioso ensayo 'El orden del capital' nos traslada al Reino Unido y la Italia de la I Guerra Mundial, que se contemplan como un momento bisagra: el auge de socializaciones y cooperativizaciones que tuvo lugar durante la contienda y la inmediata posguerra fue abortado a través de un 'shock' austericida destinado a restaurar la centralidad de los grandes capitales.
#11533
21/3/2018 21:33

Excelente reflexión. De manera más prosaica, nos dejamos marcar ritmos, agendas y hasta el estado de ánimo,
por lo que no tenemos tiempo para lo importante. Enhorabuena por el artículo.

2
0
#11355
20/3/2018 15:22

Interesante reflexión y qué bellas palabras para darle forma... Como todo lo que escribe Sara. Muchas gracias!

2
0
Antonio Estévez - Director del Centro para Especies Amenazadas Félix R. de la Fuente
19/3/2018 15:59

Brillante, sublime. Enhorabuena.

2
0
Sara
19/3/2018 12:36

Me encantan tus artículos. Siempre tan certeros.

2
0
CRTVG - Corporación Radio y Televisión de Galicia
CRTVG A Xunta do PP remata o seu plan de control sobre a CRTVG tras escoller á súa nova directora en solitario
A xornalista Concepción Pombo substituirá, co único aval do Partido Popular, a Alfonso Sánchez Izquierdo. O Goberno de Alfonso Rueda modificou a lei de medios para que os votos do seu partido fosen suficientes para elixila.
Altri
Altri A Plataforma Ulloa Viva cambia a súa directiva para os vindeiros anos de loita contra Altri
A veciñanza da comarca máis afectada escolleu entre dúas listas logo de non chegar a un consenso. A gañadora tratará de ampliar a súa base de socias e socios por toda Galiza e abrirá máis as portas ás grandes organizacións do país, como a CIG.
El Salto n.79
Altri A celulosa ou a vida: xornalismo situado e loita social para frear un ecocidio
O xoves 17 de xullo esperámosvos no CS 'A Nubeira' de Vigo para presentar o último número da revista El Salto xunto a algunhas das súas principais protagonistas: as que loitan contra o macroproxecto de celulosa liderado por Altri e avalado pola Xunta.
Altri
Altri Galiza elixe o rumbo da loita contra Altri nas eleccións á directiva da plataforma Ulloa Viva
A veciñanza da comarca máis afectada presenta dúas listas separadas logo de non chegar a unha proposta de consenso. Por unha banda, concorre unha candidatura continuísta e, pola outra, unha alternativa que se achega máis o nacionalismo institucional.

Últimas

O Teleclube
O Teleclube 'O Teleclube' alucina no deserto con Óliver Laxe e 'Sirat'
Laxe leva o seu cuarto premio de Cannes, esta vez en competitición, polo seu novo filme que explosiona na gran pantalla.
A Catapulta
A Catapulta O tempo, o espazo e a poesía de Estíbaliz Espinosa
A poeta visita A Catapulta para conversar sobre o seu traballo e a súa traxectoria literaria

Recomendadas

Medio rural
Medio rural A esperanza da xestión colectiva fronte ao espolio: os comuneiros de Tameiga contra o Celta
Mentres varios proxectos industriais tentan privatizar e destruír os ecosistemas galegos, algúns grupos de veciños e veciñas organizadas fan oposición social construíndo alternativas comunitarias. Ás veces, tamén gañan ao xigante.
Feminismos
Feminismo Dous anos sen reparación tras sufrir lesbofobia nun Rexistro Civil de Pontevedra cando ían inscribir a seu fillo
Un funcionario negouse a inscribir ao fillo de Antía e a súa parella. Un erro de redacción na lei trans está detrás dos argumentos que o funcionario esgrime para defender a súa actuación.
Ourense
Ourense Ourense organízase para loitar contra patrullas de extrema dereita nos barrios máis empobrecidos da cidade
A veciñanza e os movementos sociais responden ao discurso do medo promovido por Frente Obrero e sinalan a súa estratexia de criminalizar a pobreza e sementar odio en contextos de exclusión e abandono institucional.