Teatro
Recuperando la voz de las presas del franquismo

La compañía Olí-Ole Creaciones Teatrales presenta Presas de papel en el Teatro del Barrio, una obra para saldar deudas con la memoria histórica de las mujeres que lucharon durante la dictadura.

La obra de teatro ‘Presas de papel’
La obra de teatro ‘Presas de papel’ se representa en Teatro del Barrio durante el mes de febrero. Foto cortesía de Olí-Ole Creaciones Teatrales.

“Esta última escena es un homenaje a todas las mujeres que fueron apresadas por llevar un clavel rojo en el pelo, no llevar medias o ser familiar de un republicano”. Mientras un Teatro del Barrio abarrotado se deshace entre aplausos, las tres actrices de Presas de papel finalizan la obra con estas palabras. Palabras que encierran dolor e injusticia. Injusticia por lo que sufrieron e injusticia por lo que hoy siguen sufriendo las represaliadas de la dictadura, sumidas en un silencio oscuro, sepultadas por el anquilosado olvido que se impuso en este país con una historia contada por los vencedores. Y por los hombres.

Contra ese olvido pretende luchar esta obra. Olalla Sánchez (idea original y texto), Paloma García Consuegra y Nuri Draka ponen voz a las presas del franquismo. Incontables testimonios de incontables mujeres —solo en 1940 había 14.000 reclusas en el penal de Las Ventas— que atraviesan violaciones, torturas y penas de muerte. En cuatro actos se desgranan sus historias a través del teatro documental y del teatro gestual.

Minimalismo y canciones populares se van entrelazando en una atmósfera agónica que a ratos se torna irónica. Folclore como herramienta de resistencia y humor como vía de escape. Monjas que supervisan los penales y obligan a rezos, roban comida recibida durante las visitas y aplican castigos sin piedad. Confesiones a media luz entre reclusas, historias sobre su traslado hacia los penales, en asfixiantes vagones cubiertos de heces y con media cantimplora por cabeza. Mujeres al otro lado de las rejas, que van a visitar a sus parejas y que batallan por hacerse oír. Mujeres que sufren, mujeres que luchan, mujeres que ríen y mujeres que cantan. Mujeres de las que pocas veces se ha hablado y con las que el teatro está en deuda, según admiten desde la propia compañía.

Con un columpio, una caja de embalaje y un somier de tablas como único atrezo transcurre esta pieza que se apoya en cartas, expedientes y documentos de las propias reclusas. La narración aminora la velocidad para detenerse en la historia de algunas de ellas. Hablan de la activista Matilde Landa, quien puso en marcha la Oficina de Penadas en la cárcel de Ventas y acabó sus días recluida en Can Sales (Palma de Mallorca); de Juana Doña, sindicalista que pasó más de 18 años en prisión o de Justa Freire, la reconocida maestra republicana que creó un Orfeón en la cárcel de Ventas con la participación de cientos de reclusas.

“Es un homenaje a las mujeres que resistieron y lucharon desde dentro y desde fuera de las cárceles durante la represión franquista, entre el 39 y el 45”, explica Olalla Sánchez, que presenta esta creación con su compañía Olí- Olé Teatro y Creación, como un resultado tras años investigando, gracias a los testimonios recopilados por Tomasa Cuevas, activista comunista antifranquista o la web Cárcel de Ventas, creada por el historiador Fernando Hernández.

Sánchez explica a El Salto la génesis del proyecto que pasó del plano teórico al experimental antes de ser estrenada sobre las tablas. “Yo llevo años trabajando la perspectiva feminista desde el teatro social, teatro de las oprimidas. En una de las clases de trabajo cayeron en mis manos libros de maestras republicanas como Justa Freire. A partir de ahí, viendo la barbaridad que sufrieron estas mujeres empecé a investigar”. Tras la fase documental llevó sus primeras creaciones a terreno gracias al destacamento penal franquista situado en Bustarviejo (Madrid), su pueblo. “En 2011 se volvió a abrir el penal. Es una cárcel franquista que fue de hombres pero yo quise probar algunas piezas teatrales allí, un escenario de la arqueología represiva de España, cuando, como decía Marcos Ana, España era un inmenso penal. Probamos en febrero de 2017 con un primer texto y el impacto fue impresionante”, asegura. Tras estas piezas, que se convirtieron en visitas teatralizadas al penal, decidieron cerrar un montaje y presentarlo en el Centro Comarcal de Humanidades de La Cabrera. Corría ya 2018.

Y de ahí aterriza durante los domingos de este mes de febrero en Teatro del Barrio, en el corazón de Lavapiés. Con dos funciones a rebosar y la siguiente ya agotada, si se quiere disfrutar de la obra hay que darse prisa. “La acogida es muy positiva. Solemos recibir tres minutos de aplausos y estoy muy contenta. Pero necesitamos que aparezca apoyo a la producción para que esto siga creciendo. Las compañías pequeñas que no tenemos reconocimiento, ni apoyos, ni estructuras de la Comunidad de Madrid nos lo tenemos que guisar y comer todo. Necesitamos iniciativas de apoyo a la creación. Hay que soportar gastos y sin subvenciones es imposible”, sentencia esta dramaturga que tiene claro que debe saldar una deuda con la historia de las mujeres que lucharon durante el franquismo “y hay interés entre el público”.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

El Salto Radio
El Salto Radio Podcast | Franco ha muerto, casi seguro
Eugenio Merino y Darío Adanti presentan en Señales de Humo “Chistes contra Franco” y Manuela Perles Liáñez la Plataforma de familiares de víctimas del franquismo de Huelva
Violencia machista
Violencia machista Las redes sociales, el escenario de dos nuevas denuncias por agresiones sexuales a varias actrices
Las denuncias por agresión sexual publicadas en redes sociales contra el actor y profesor Juan Antonio Codina y el director de cine Eduard Cortés airean la violencia machista que sufren las trabajadoras de las artes escénicas y el sector audiovisual.
A Catapulta
A Catapulta Esther F. Carrodeguas, dignidade en escena
A multifacética artista rianxeira achéganos á súa carreira teatral e poética no programa A Catapulta
#47506
15/2/2020 17:44

Donde se puede ver esta obra? Gracias.

0
1
Opinión
Opinión Non sempre ter moitas luces é sinónimo de intelixencia
Que impacto ecolóxico e social produce a iluminación do Nadal de Vigo? A cidade sofre máis aló da masificación, o caos de tráfico, as molestias á veciñanza, o malgasto ou os recortes en orzamentos de emerxencia social.
València
Exclusiva El Gobierno de València contrata 12,9 millones en obras de la dana a una constructora investigada por pagos al cuñado de Barberá
La Generalitat Valenciana ha hecho el encargo a Ocide, una empresa cuya matriz está siendo investigada en el caso Azud por pagos “de naturaleza ilícita” al abogado José María Corbín a cambio de contratos adjudicados por el Ayuntamiento de València.

Últimas

Palabras contra el Abismo
Palabras contra el Abismo Lee un capítulo de ‘Café Abismo’, la primera novela de Sarah Babiker
El barrio es el espacio físico y social en los que transcurre ‘Café Abismo’, la primera novela de la responsable de Migraciones y Antirracismo de El Salto, Sarah Babiker.
Memoria histórica
Memoria histórica Museo del franquismo, ¿eso dónde está?
España sigue ajena a la proliferación mundial de espacios museísticos dedicados a dictaduras y resistencias democráticas.
Unión Europea
Unión Europea La ultraderecha europea, ante la victoria de Trump
El triunfo de Donald Trump da alas a todas las formaciones ultraderechistas de Europa y del resto del mundo, que han visto cómo el millonario republicano ha conseguido volver a ganar las elecciones sin moderar un ápice su discurso.
Tribuna
Tribuna Vivienda: es hora de organizarnos
La situación de crisis inmobiliaria nos exige leer el momento para acertar en las batallas que debemos dar ahora, reflexionar sobre los modos de acción colectiva y lograr articular una respuesta política amplia.
Más noticias
Pontevedra
Ecoloxismo Unha investigación revela alta contaminación por nitratos en augas superficiais da comarca do Deza
Os resultados da análise de Ecoloxistas en Acción, con máis de 80 puntos de mostraxe, reflicten concentracións xeneralizadas e moi altas de NO3. Só o 19% das augas superficiais analizadas están “fóra de toda sospeita”.
Racismo
Racismo institucional Diallo Sissoko, una víctima más del sistema de acogida a migrantes
La muerte de este ciudadano maliense durante su encierro en el Centro de Acogida, Emergencia y Derivación (CAED) de Alcalá de Henares ha puesto de manifiesto algunas de las deficiencias del sistema de acogida a migrantes en el estado español.
Comunidad de Madrid
Violencias machistas Huelga en la red de atención a la violencia de género de la Comunidad y Ayuntamiento de Madrid el próximo 25N
Las trabajadoras de ambas redes se unen para reivindicar mejoras laborales y de atención a las mujeres víctimas en un paro de 24 horas. “Te sientes impotentes porque no puedes ayudar como deberías”, explican.
Turismo
Opinión Abolir el turismo
VV.AA.
Lleguemos a donde lleguemos, no puede ser que sea más fácil imaginar el fin del capitalismo que el fin del turismo.
Opinión
Opinión La eclosión del autoritarismo reaccionario y otras nueve tesis sobre la victoria de Trump
La victoria del candidato republicano nos ha demostrado que estamos en una nueva era: la del neoliberalismo autoritario, en donde el camino del mal menor propuesto por los Demócratas ha sido la fórmula más rápida para llegar al mal mayor.

Recomendadas

Galego
Dereitos lingüísticos Miles de persoas desbordan a praza da Quintana para mudar o rumbo da lingua galega
A Plataforma Queremos Galego, que convocou esta mobilización, sinala unha nova data para outro acto protesta: o vindeiro 23 de febreiro na praza do Obradoiro, en Santiago de Compostela.
València
Dana y vivienda “La crisis de vivienda multiplicada por mil”: la dana evidencia el fracaso de las políticas del PP en València
La dana ha dejado a miles de familias sin hogar. Ante la inacción de las instituciones, han sido las redes familiares las que han asumido el peso de la ayuda. La Generalitat, tras décadas de mala gestión, solo ha podido ofrecer 314 pisos públicos.
Redes sociales
Redes sociales Bluesky, la red social donde se libra la batalla por el futuro de internet
Ni es descentralizada ni está fuera de la influencia de los ‘criptobros’ que han aupado a Trump a la Casa Blanca, pero ofrece funcionalidades útiles para recuperar el interés por participar en redes sociales.