Brexit
Cómo puede ser el Brexit de Boris Johnson

El nuevo primer ministro Británico representa el ala dura de los conservadores y tendrá como cometido llevar a cabo un Brexit “duro” antes del 31 de octubre.

Brexit, manifestación en Londres pro EU
Manifestación en Londres pro EU
24 jul 2019 05:00

En 1984 los diez países que entonces formaban la Comunidad Económica Europea (CEE) se reunían en el castillo de Fontainebleau (Francia) para decidir el futuro del mercado común. Margaret Thatcher, en aquel tiempo primera ministra de Reino Unido, destacó por un discurso muy duro: “Nosotros solo queremos que nos devuelvan el dinero que pagamos de más”. Desde entonces la idea del euroescepticismo se instalará en el imaginario británico durante décadas. La gestión Thatcher forma parte de la historia del neoliberalismo europeo y es la base de lo que hoy son estas cuatro naciones.

El año 2016 será un año que se recordará para siempre en Reino Unido. Tras cinco meses de campaña, Reino Unido vota si quiere salir de la Unión Europea, el llamado Brexit. Entonces Boris Johnson, polifacético político británico que ha dejado gloriosos momentos a las hemerotecas bitánicas y que hasta hace pocos días ha sido ministro de exteriores, recopiló argumentos a favor y en contra del Brexit. Finalmente se decantó por hacer campaña a favor de la salida de la UE, aunque la mayoría de su partido quería remain (postura a  favor de la Unión Europea). Para ello se sirvió de una impactante y digerible 'fake new': Reino Unido aporta 350 millones de libras semanales a la Unión Europea, que podrían emplearse en otras urgencias mayores y en el Sistema Nacional de Salud (NHS). Pintó un autobús y recorrió pueblos y ciudades proclamando esta cifra. Solo había un problema: era falsa.

Con el descuento a la aportación común que antiguamente consiguió Thatcher (el llamado cheque británico), Reino Unido aportaría 250 millones de libras semanales a la UE, a lo que habría que restar lo que recibe de Política Agraria Común (PAC), bastante menos en comparación con sus socios porque su sector agrario es mucho más pequeño. En total la cifra positiva es de unos 130 millones de libras semanales, según el documental El backstage del Brexit. Son dos veces menos de lo que afirmaba Boris Johnson. Desde el principio, Reino Unido ha impuesto sus propias condiciones para pertenecer al selecto grupo de los 28. 

Críticos a Johnson creen que su estrategia de apoyo al Brexit cuando todavía era alcalde de Londres tenía una finalidad clara: liderar el partido Tory y llegar a ser primer ministro. 

La elección ahora de Boris Johnson como primer ministro, pone en la mesa la posibilidad de que los flecos finales del Brexit se produzcan en negociaciones con una postura especialmente conservadora en algunos aspectos, como el económico y social. Johnson representa al ala Tory partidaria del conocido como “Brexit duro”. Su cometido principal será que la cámara de los comunes ratifique un acuerdo que ya ha sido rechazado tres veces, aunque lo más probable será salir de la Unión Europea sin acuerdo entre Bruselas y Londres. El plazo para que Reino Unido salga de la Unión Europea expira el 31 de octubre, debido a la prórroga que la UE otorgó a Theresa May, aunque puede salir antes si se levanta el veto de su parlamento. También podría alargar su salida, gracias al ofrecimiento que la semana pasada hizo la nueva presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.

Críticos a Johnson creen que su estrategia de apoyo al Brexit cuando todavía era alcalde de Londres tenía una finalidad clara: liderar el partido Tory y llegar a ser primer ministro. Si así fuese, Boris Johnson habría conseguido su objetivo plenamente, con una jugada maestra perfectamente orquestada. Su posición en cuanto al Brexit tiene incluso puntos en común en lo económico con el ultraderechista Nigel Farage (UKIP), principal amenaza parlamentaria de los conservadores y defensor a ultranza de la salida de la Unión Europea, aunque desde una postura xenófoba. Ambos políticos poseen fortunas millonarias que se verían beneficiadas por una salida de la Unión Europea que premiase a las clases más adineradas. Según una encuesta que el banco suizo UBS realizó en 2017, ocho de cada diez británicos con más de un millón de libras creían que el Brexit les iba a reportar más ganancias económicas.

El legado de Boris Johnson en Downing Street comienza con polémica. Según el medio británico The mail on Sunday, Johnson habría encargado que se amueblase su casa a cargo del erario público. El irreverente estilo de Johnson hace que su carrera política vaya acompañada de escándalos personales y ruptura de las formas. Por su parte, el líder laborista, Jeremy Corbyn, ha convocado una manifestación para el jueves para exigir nuevas elecciones. Según Corbyn, “menos de 100.000 personas de su partido eligieron a Boris Johnson y ahora será primer ministro. Él representa la austeridad, desigualdad y tenemos que darle a la gente joven seguridad y esperanza”.

Una de las principales fisuras para la aprobación del Brexit es la factura que Londres deberá pagar a los otros 27 de la Unión Europea por su salida. Las últimas estimaciones hablaban de 49.000 millones de euros, pero Alemania presiona para ajustar esta cifra. 

Johnson apunta a la firma de acuerdos de libre comercio con países como China o Estados Unidos. También a que la Commonwealth, organismo al que pertenecen 53 países,  vuelva a funcionar a pleno rendimiento

El gran escollo es la salida de Reino Unido del Mercado Común Europeo. Mientras que en la campaña anterior al referéndum el ministro de economía George Osborne hacía referencia a los elevados costes que supondría el Brexit para Reino Unido y las ventajas comerciales de quedarse para conseguir un 'remain' que no pidió con mucho énfasis, Boris Johnson esgrimía la posibilidad de acuerdos comerciales de libre comercio con países como China o Estados Unidos, como los que ya se negocian con la Unión Europea. Otra de sus aspiraciones era que la Commonwealth o Mancomunidad de Naciones, organismo al que pertenecen 53 países, en su mayoría antiguas colonias británicas, volviese a funcionar a pleno rendimiento. Los partidarios del Brexit creen que, en este sentido, la Unión Europea es un veto para acuerdos comerciales con estos países, ya que los acuerdos comerciales se hacen en bloque con la UE y no país a país.

Sin embargo, algunas de las medidas económicas que hoy propone Bruselas ya se aplicaron en época de Thacher en Reino Unido, como la privatización del sistema ferroviario. La antigua British Rail fue destripada en 28 trozos, que se repartieron 28 empresas privadas, a las que se les ofreció una infraestructura ferroviaria muy costosa y que había sido financiada con fondos públicos. El coste del tren en Reino Unido se incrementó en un 117 % desde 1995 a 2015, lo que lo convierte en el más caro de Europa. La nueva Unión Europea surgida de las elecciones del 26 de mayo no camina por otra vía. Los cargos que se han elegido hasta ahora son representantes de las políticas continuistas de la anterior etapa, que vino cargada de austeridad, rescates y estrangulación de la economía.

Frances O'Grandy, la secretaria general de la Confederación de los Sindicatos Británicos (TUC), expresó ayer que si Boris Johnson quiere realmente unir a Gran Bretaña —en alusión a su premisa principal de campaña para liderar su partido— “deberá prohibir los contratos de cero horas y todas las formas de trabajo inseguro, proteger nuestro sistema nacional de salud, escuelas y servicios públicos y acometer acciones para subir el salario de todos los trabajadores”.

El nuevo primer ministro comienza un camino difícil ante una salida de la Unión Europea que, aunque asumida por todos los actores implicados, va a estar llena de muchas aristas que Boris Johnson deberá definir.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Sidecar
Sidecar Tras el euroescepticismo: la extrema derecha y la Unión Europea
Lo que se está produciendo en la Unión Europea, es un giro a la derecha en la composición del Parlamento, pero el euroescepticismo estridente ha sido sustituido por un reformismo tibio.
Reino Unido
Simon Kuper “Oxford y su retórica fueron la cuna del Brexit”
A finales de los 80 en Oxford se encontraron algunos de los futuros líderes de la campaña por el Brexit. El periodista Simon Kuper analiza en 'Amigocracia' (Capitán Swing, 2023) la red de amistad que marcó la historia reciente del Reino Unido.
Galicia
Galicia A Xunta aprobou a celulosa de Altri argumentando que a súa cheminea de 75 metros sería “icónica”
O Informe de Patrimonio Cultural, favorable á multinacional, emitiuse con base en dúas encargas externas, contratadas e pagadas pola empresa ao ex presidente e ao actual tesoureiro de Icomos-España.
Alemania
Alemania Friedrich Merz es elegido canciller alemán por la gran coalición tras una jornada de suspense
El nuevo canciller alemán supera una votación extraordinaria tras un sonoro fracaso en su primer intento. Los conservadores gobernarán con el partido socialdemócrata.
Israel
Israel Netanyahu acelera los planes de ocupación total de una Gaza diezmada por el hambre
El ejército israelí quiere movilizar a 30.000 reservistas para una nueva expansión de la ofensiva sobre Gaza. Las organizaciones dependientes de la ONU alertan de la hambruna y las enfermedades en un enclave en el que escasea el agua potable.

Últimas

Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Madres organizadas contra los arrancamientos piden una reunión con Infancia
Pamela L.C. ve a su bebé dos horas a la semana después de que se lo retiraran dos días después de su nacimiento. Ella y otras madres han decidido organizarse para pedir medidas que frenen los arrancamientos.
Madrid
Madrid Sareb amenaza con desahuciar el centro social La Animosa, en Hortaleza
Los colectivos que participan del centro social okupado, y que han dado vida a este espacio durante los últimos cuatro años, convocan a defender su permanencia aunque se ha retrasado la fecha de desalojo hasta el 26 de mayo.
Opinión
Opinión España ya roza el 2,5% en gasto militar
Según el autor, investigador del Centre Delàs, el gasto militar real del Estado español será de 40.457 millones de euros y representará respecto al PIB el 2,48%. A esto se sumarán las inversiones comprometidas en programas de armamento.
Comunidad de Madrid
Universidad pública El alumnado de la UNED denuncia el “modelo antipedagógico” tras la supresión de tutorías presenciales
El proceso de eliminación de clases se remonta a 2008, aunque ha sido este año, con el nombramiento Claudia Sevilla como directora de centros asociados de Madrid, cuando el gobierno de Ayuso “ha pisado el acelerador”.
Opinión
Opinión El rentismo es racismo
La posición de las personas migrantes y racializadas en el conflicto del alquiler nos coloca como sujetos esenciales e imprescindibles en la lucha por la vivienda.

Recomendadas

Laboral
Laboral Coidar sen dereitos: a loita das traballadoras nas residencias privadas de Galiza
Sen tempo nin medios para ofrecer uns coidados axeitados, alertan dunha situación insostible nos centros e denuncian a privatización dun servizo a costa do benestar das persoas maiores e dependentes.
Alemania
Alemania Ines Schwerdtner: “Los conservadores tienen esta estrategia de normalizar la AfD, pero eso ha salido muy mal”
De profesión periodista, Ines Schwerdtner ha sido una de las responsables del ascenso de Die Linke, un partido que pasó de no aparecer en las encuestas a superar el 8% en las elecciones de febrero.