Zerocalcare

Fútbol a este lado
Anclajes

Hay quien necesita ir a un estadio y quien a una oficina, a una barra o a un feed. Quien a todas. Hace frío. Es necesario arroparse.

Puedo perder nombres pero no caras. No soy IMDB, más bien quien dice “este salía en esa otra”. En mis lagunas, los momentos que no se sumergen —nunca podrán mientras mis células nerviosas respondan— en esas aguas del olvido suelen llevar su fecha marcada. Sé identificar el año en que murió mi amigo Moncho por el examen que no pudo hacer pero también por la Eurocopa que se jugaba justo esos días. El guionista e ilustrador italiano Zerocalcare recuerda en la serie de televisión Cortar por la línea de puntos que la primera vez que habló con Alice, la Roma acababa de ganar el scudetto. Que era verano y que en Génova la carne sudó, se abolló, se amorató y se abrió y que mataron a Carlo Giuliani. 2001, año chino de la serpiente, Grecia entra en el Euro y Racing de Avellaneda gana la liga del corralito.

Reina un gran desorden bajo el cielo: la situación es excelente. No se sabe si Mao estaba describiendo la oportunidad revolucionaria o la noche de un sábado cuando todavía 30 horas para un lunes parecían una eternidad. Los sábados también muere la gente. Quizá la frase anticipaba la nostalgia tramposa de un tiempo que corría igual de rápido y se cobraba prendas con la misma voracidad que el actual, pero ante el que simplemente sentimos que teníamos más defensas, como la propia energía, la confianza y la estima colectivas y un mínimo protocolo y decoro por parte del enemigo. ¿Pausa, desconexión para reconectar? Sabe bien cómo impedirlo el equipo de fútbol que va ganando el partido. Se debe jugar con el tiempo del rival, hacérselo perder. Desesperarle: empujarle a cometer tantos fallos, tantos balones a la olla, pases comprometidos y tiros apresurados que la complicidad entre camisetas de un mismo color sea solo un charco al sol.

Nadie debería jugar a nada sin ganas. No hay contraataque probable con los gemelos cargados. Millones de calambres separados no hacen dinamo

Nadie debería jugar a nada sin ganas. No hay contraataque probable con los gemelos cargados. Millones de calambres separados no hacen dinamo. En esas estamos en este torneo llamado ola de sufrimiento que, ya no importa si es causa o añadido, excede a lo material. Si abandonas a mitad de partido, te lo dan por perdido. Si no compareces, no recoges el balón de tus redes pero es derrota igual. Lo aprendemos desde pequeñitos, cuando algunos le ponían de nombre No Presentado a su equipo del distrito por ver si colaba cuando los demás leían a quién tenían que enfrentarse. Con suerte, eran los otros los que se confiaban y no se presentaban. Los futbolistas se parecen a los aficionados en que se tienen que ir a la vez de los sitios. Si te vas de la grada antes del último pitido es cuando es más fácil derrumbarte, lejos, solo y finalmente invisible. Entonces preguntas cómo se volvía donde aún queda un murmullo.

Se aguanta hasta el final igual que se reza o se defiende el ambulatorio y la biblioteca pública, no por el escudo sino por hacer todo esto más llevadero

Se aguanta hasta el final igual que se reza o se defiende el ambulatorio y la biblioteca pública, no por el escudo sino por hacer todo esto más llevadero. No por la épica, no por la fe, sino por compartir escalones y la mirada fija en uno y otro bloque de cemento. Si algún escritor quiere llamarlo principios allá él, no será tampoco el primero. Nos olvidamos, cuando recelamos de ella —que siempre son los otros y por descontado unos otros menos perspicaces que nosotros—, de que la masa te sujeta. Hay quien necesita ir a un estadio y quien a una oficina, a una barra o a un feed. Quien a todas. Hace frío. Es necesario arroparse.

El aliento en la grada es compartido, optativo, nos diluimos en el colectivo y mimamos así la responsabilidad guardándola de lo peor que a esta le puede ocurrir: que se confunda con la culpa

No somos normalmente la última esperanza de nadie. Y menos mal. El aliento en la grada es compartido, optativo, nos diluimos en el colectivo y mimamos así la responsabilidad guardándola de lo peor que a esta le puede ocurrir: que se confunda con la culpa. Haber gritado desde el asiento “¡cuidado!” no habría evitado un gol ni tampoco nuestro portero podía calmar del todo otra de esas semanas que acabamos con más tareas pendientes, mismo ingreso y respiración corta que al comenzarlas. Nos cuesta dejar de creernos importantes porque es de lo poco que nos queda. También porque evitar sentimos un minúsculo punto en el universo tiene algo de amor hacia todas las personas que nos arropan y quieren. Es imposible que malgasten su tiempo en algo que no importa.

Registrar al capitalismo en busca de una moral es inútil. Si a este sistema se le pudiera colgar bocabajo, se horrorizaría de ver que de los bolsillos no le cae ninguna cartera antes que un solo valor. Es un engranaje que no tiene tiempo de comprobarlo todo, como apunta el armadillo de Zerocalcare, por eso es tan permeable a la falsedad. Convierte gemas en dudas andantes. Iguala el desvelo de quien aprieta la tuerca y de quien hace de tuerca. Defiende que achicar agua, el control de plagas, la absorción de daños y el recuento de bajas son un tipo de existencia. Confunde certezas con vidas basadas en hipótesis. No sé si todos hemos tenido o tenemos una Sarah que nos ponga en nuestro sitio, un Secco que siempre quiera helado, una Alice que ya no vive aquí, un “ya no nos gustábamos y era incluso mejor”. Lo que es seguro es que en un frío como este es cuando las lágrimas caen más calientes.

Arquivado en: Fútbol a este lado
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Fútbol a este lado
Fútbol a este lado Sol de invierno
Olvidamos que empezamos a descifrar palabras que subrayaban nuestros dedos en papel o cartón riendo, boquiabiertos, con la promesa de aventuras y nuevos mundos por probar y construir.
Fútbol a este lado
Fútbol a este lado El cesto de las chufas
En fútbol, o la industria antes conocida con ese nombre, es cosa de arqueología los casos de jugadores que podían desatascar un partido con tanta probabilidad como perder los nervios.
Fútbol a este lado
Fútbol a este lado Bar Nostalgia
¿Sería una desconsideración hacia su yo de infancia no cruzar la puerta? ¿Era posible capturar un tiempo más allá de imágenes, sabores y olores?
Bea
2/12/2021 11:52

Soy muy fan. Linda escritura

0
0
Minería
Minaría Bruxelas cava fondo: litio galego para o novo militarismo europeo
No medio do rearme ordenado pola UE, Galiza entra no ámbito xeopolítico como potencial provedor de litio para a industria de defensa. Un enclave de alto valor ecolóxico en Doade (Ourense) converterase en canteira de baterías militares.
Senegal
Senegal Una ‘Escuela de rehenes’ o cómo Francia usó la educación en África para transformar las mentes
La administración colonial francesa puso en marcha en 1855 un centro educativo que tenía el objetivo de formar a los hijos de los reyes locales mediante el borrado de su cultura.
Camboya
Camboya 50 años del inicio del genocidio en Camboya
El régimen de Pol Pot acabó con la vida de más de dos millones de personas. Solo tres integrantes de los Jemeres Rojos han sido condenados por crímenes contra la humanidad.
Palestina
Genocidio Israel sigue atacando hospitales, la ONU habla del peor momento en los 18 meses de asedio
No hay tregua en Gaza, donde Israel ha recrudecido las matanzas y sigue sin permitir el acceso de alimentos y productos de primera necesidad. La ONU denuncia asimismo el asesinato de más de 70 civiles en Líbano.
Grecia
Grecia Frontex pone de nuevo la mirada en Grecia
En enero de 2025 el Tribunal Europeo de Derechos Humanos acusó a las autoridades griegas de llevar a cabo devoluciones forzadas de manera sistemática.

Últimas

Crisis climática
Balance climático El Mediterráneo se consolida como zona especialmente vulnerable al cambio climático
Las víctimas de la dana suponen dos tercios de las muertes por fenómenos extremos en Europa en 2024, según un informe conjunto de Copernicus y la Organización Meteorológica Mundial que hace un balance climático del continente el pasado año.
Barcelona
Barcelona Activistas de los derechos humanos piden la retención de un barco dispuesto para armar a Israel
La naviera Maersk está transportando estos días componentes para los cazas F-35. El Estatuto de Roma sobre genocidio contempla acciones legales contra las empresas que favorecen las masacres.
Más noticias
Opinión
Opinión La coherencia de las políticas de Trump
No se pueden entender los aranceles de Trump sin su lucha por el control de los recursos minerales, sin Groenlandia, Ucrania o la República Democrática de Congo.
Partidos políticos
CIS de abril La ultraderecha recorta votos al PP arrastrada por el efecto Trump
El barómetro de abril vuelve a situar al PSOE como fuerza más votada. La izquierda española sigue su contienda por todo lo bajo.

Recomendadas

Comunidad de Madrid
Memoria histórica Contra la basura y el olvido: tras la pista de los cuerpos y de la memoria de los brigadistas internacionales
El Salto acompaña a un contingente internacional de políticos, políticas y activistas en una ruta en memoria de los brigadistas internacionales que acudieron a luchar a España contra el fascismo, en un ejercicio inspirador para el presente.
Poesía
Culturas Joan Brossa, el mago que jugó con la poesía para reinventar el poder de la palabra
Casi inabarcable, la producción creativa de Joan Brossa se expandió a lo largo —durante medio siglo XX— y a lo ancho —de sonetos a piezas teatrales, pasando por carteles o poemas objeto— para tender puentes entre el arte, la política y el humor.
República del Sudán
Sudán Cara a. Un Sudán en guerra
Se cumplen dos años de una guerra que ya deja más de 13 millones de personas desplazadas y más de ocho millones de sudaneses al borde de la inanición.
Galicia
Galicia La TVG se gasta 839.772 euros en un programa de Miguel Lago y deja de emitir nuevas entregas tras hundirse en audiencia
El programa ‘O novo rei da comedia’ apenas llegó a los 36.000 espectadores de media en su estreno y cayó en picado en su hasta ahora última emisión al 3,4% de cuota de pantalla en una cadena que tuvo de cuota media en marzo un 8,1%.