We can't find the internet
Attempting to reconnect
Something went wrong!
Hang in there while we get back on track
Crisis climática
Overshoot Day: España entra en déficit ecológico
Coordinador de Clima y Medio Ambiente en El Salto. @PabloRCebo pablo.rivas@elsaltodiario.com
Hay un día al año en que el conjunto de un país, con sus sectores económicos y el consumo de su población, sobrepasa el límite de lo que la Tierra puede generar. Hablamos del momento en que el territorio concreto de la Tierra habría consumido todos los recursos naturales que corresponderían a todo el año, lo que incluye agua, alimentos, energía y materias primas. Dicho de otro modo: si toda la humanidad consumiese como lo hace el país en cuestión, el planeta entraría en déficit ecológico ese día. En España la fecha se cumple este 20 de mayo.
Conocido como Overshoot day o Día de la Sobrecapacidad de la Tierra, la efeméride la otorga el think tank independiente Global Footprint Network, organismo que calcula anualmente la fecha de cada país, así como la global, que será anunciada el próximo 5 de junio y que el año pasado recayó en el 2 de agosto.
En el caso de la UE, el Día de la Sobrecapacidad de la Tierra se cumplió el pasado 3 de mayo
Más temprana en los países desarrollados —consumidores de más recursos— y más alejada en los menos, en esta ocasión el día en que España ha entrado en déficit ecológico se ha atrasado ligeramente respecto al año pasado. Si en 2023 fue el 25 de mayo, este año será cinco días antes.
Un sistema inviable
“Es de vital importancia limitar el uso indiscriminado de materiales y energía para adecuarnos a la capacidad que nuestro planeta tiene para regenerarse”, apunta Adriana Espinosa, responsable de Recursos Naturales y Residuos de Amigos de la Tierra. “El sistema actual es totalmente inviable para sostener la vida en la Tierra”, lamenta.
Esta organización denuncia que la huella material de la UE, esto es, la cantidad total de combustibles fósiles, biomasa, metales y minerales utilizados —importaciones incluidas— duplica los límites que podrían considerarse seguros y sostenibles. Es por ello que Espinosa pide que no se realicen “medidas cosméticas” y pide a los 27 que abandonen el dogma del crecimiento ilimitado: “Lo utópico es creer que podemos seguir consumiendo al ritmo actual sin que haya consecuencias sociales y ambientales desastrosas”.
Mientras que los 1.200 millones de personas más pobres son tan solo responsables de un 1% del consumo mundial, los mil millones de personas más ricas consumen el 72%
En el caso de la UE, el Día de la Sobrecapacidad de la Tierra se cumplió el pasado 3 de mayo. Fue el día en que, a un mes de las elecciones europeas, 317 organizaciones de la sociedad civil publicaron una carta abierta a las autoridades europeas y a los jefes de Estado de los 27 en la que pedían “asumir una posición política de alto nivel de prioridad en la triple crisis planetarias de cambio climático, pérdida de biodiversidad y contaminación dados los impactos devastadores y la creciente intensidad y frecuencia de eventos relacionados con el clima para los ecosistemas, la salud, las economías, la justicia social y la cohesión”.
Entre las medidas que planteaban para seguir esta senda regeneradora se encuentra profundizar y acelerar un Pacto Verde, hoy amenazado por los gobiernos conservadores y ultras de la UE, así como por la inestabilidad geopolítica y guerras como las invasiones de Ucrania y Palestina. También abogaban por “aumentar radicalmente las inversiones públicas en clima, medio ambiente y sociedad” y “fortalecer la gobernanza de la UE, la democracia y la participación efectiva de la sociedad civil”.
Mil millones se comen el 72% de los recursos
El índice elaborado por Global Footprint Network dibuja como pocos las desigualdades que se derivan del sistema económico actual: mientras que los 1.200 millones de personas más pobres son tan solo responsables de un 1% del consumo mundial, los mil millones de personas más ricas consumen el 72%.
Lejos de mejorar, la tendencia histórica no parece indicar de momento que la humanidad vaya a revertir la situación, más si se tiene en cuenta que el déficit ecológico se acumula año tras año. Si en 1971 la humanidad consumía los recursos equivalentes a los existentes en el planeta, en 2023 serían necesarias 1,75 Tierras para abastecer a la humanidad en su ritmo actual y que no se produjese déficit ecológico.
Desde Amigos de la Tierra abogan por adoptar un objetivo vinculante para reducir la huella material a nivel estatal
En el caso español, deberíamos de disponer de dos planetas y medio para que el consumo actual fuese sostenible, razón por la cual desde las organizaciones ecologistas reclaman al Gobierno que se ponga manos a la obra y establezca medidas que permitan reducir el consumo de recursos minerales y la generación de residuos.
En concreto, desde Amigos de la Tierra abogan por adoptar un objetivo vinculante para reducir la huella material a nivel estatal, acompañado de un plan con medidas concretas para alcanzarlo, así como por implementar la Directiva por el Derecho a Reparar, aprobada por las instituciones europeas en abril de este año,
“Alargar la vida útil de los productos, facilitar su reutilización y reparación, son medidas concretas que ya se pueden adoptar, pero que deben adoptarse dentro de un cambio de paradigma que deje de derrochar recursos naturales y priorice la justicia social y ambiental”, señala Espinosa.