Catalunya
Las trabajadoras del centro Estels eliminan la flexibilidad horaria en la primera huelga del tercer sector

CNT califica de “histórica” esta movilización en el sector de intervención social, ya que por primera vez los servicios mínimos eran del 85%, en vez del 100%, y han podido llevarla a cabo. Tras dos meses de huelga, hoy han firmado el preacuerdo.
Concentración de trabajadores en huelga en el centro de acogida Estels
Concentració de les treballadores en vaga del Centre d'Acollida Estels. Foto cedida por CNT

El centro de acogida a la infancia Estels, en el municipio Masnou (Barcelona), es aparentemente uno como tantos otros: un centro que ofrece un servicio público gestionado por una entidad privada. Sin embargo, sus trabajadoras, afiliadas a la CNT, han hecho historia: esta mañana han firmado el preacuerdo, tras casi dos meses de huelga, que les permitirá mejorar sus condiciones laborales en un sector que nunca antes había podido ejercer el derecho a parar y movilizarse. Es la primera huelga en el tercer sector, el de la intervención social, que ha tenido unos servicios mínimos del 85%, en vez del 100%. 

El seguimiento ha sido total desde que el 2 de abril iniciaran la huelga, que ha contando con movilizaciones paralelas y ha conseguido llamar la atención no solo del pleno municipal del Ayuntamiento del Masnou, sino también del Síndic de Greuges de Catalunya (el defensor del pueblo). El 8 de mayo, el Síndic realizó una visita al centro Estels para recabar información. Se reunió con la gerencia y las trabajadoras. Para entonces, las dos mediaciones que ambas partes habían realizado en el Departamento de Trabajo no habían dado frutos. 

Cuidados
Trabajo de cuidados Cuidar mirando el Excel
La precariedad y la mercantilización del sector de los cuidados y la intervención social son la regla en Euskal Herria, un territorio donde fondos de inversión y grandes empresas se han hecho con el control de un lucrativo negocio.

El origen del malestar se encuentra en el incumplimiento del calendario anual. Como explica la educadora Alba Berruezo, en el calendario anual debe plasmarse el 100% de la jornada (1.701 horas), pero la gerencia se reservaba un 10% de las horas para disponer de ellas a voluntad y de forma imprevista. “No podíamos tener desconexión digital ni conciliación. Y esa especie de “bolsa de horas” hacía que pudiéramos empezar el año debiendo horas, si esta había decidido que no las trabajáramos el año anterior”, indica. 

Junto con el fin de la flexibilidad horaria, las trabajadoras reivindicaban un incremento de la plantilla para poder adecuarse a la ratio y derechos sindicales en materia de prevención

Las reuniones con la gerencia empezaron en enero, pero no encontraron reconocimiento a sus malestares, ni tampoco legitimidad a su sección sindical. En marzo tuvieron lugar las mediaciones y, en abril, todas las cartas ya estaban encima de la mesa. De las 40 trabajadoras, casi 30 estaban afiliadas a CNT y 27 secundaron la huelga. Tras votar el preacuerdo, que deberá firmarse y ratificarse la próxima semana en las oficinas del Departament de Treball, Berruezo asegura que las educadoras están “muy contentas, hemos marcado un precedente en el sector”. Sabe que “el camino ha sido largo” y que ahora están “medio desorientadas”, tras el cansancio de mantener abierto un conflicto laboral en un entorno complicado. 

El responsable del centro, Toni Morales, de la Asossiació Asteroide B-612, sostuvo en llamada telefónica a El Salto que, por secundar la huelga, las trabajadoras habían “dejado al margen de los intereses de las criaturas, a las cuales lo que menos les conviene son situaciones conflictivas”. Consideraba que la bolsa de horas era para cubrir bajas, “tal y como reconoce la adjudicación”. Sin embargo, este medio no ha podido acceder al pliego de condiciones, a pesar de haberlo solicitado y buscado en el portal de adjudicaciones. El Departament de Drets Socials respondió con la normativa de los centros de acogida temporales a la infancia.

“Estamos muy contentas, hemos marcado un precedente en el sector”, indica Alba Berruezo

El artículo 8.3.4 indica que “la entidad debe de distribuir los turnos de manera libre y asegurar en todo caso el mínimo de educadores que garantiza una atención adecuada a las criaturas y adolescentes ingresados”, así como respetar “siempre” la ratio correspondiente en “cada día del año”, un incumplimiento habitual en el centro Estels, alerta Berruezo.

“Hay momentos del día en que se cumplen las ratios, pero en muchos otros no”, asegura, como cuando una educadora debe llevar a una criatura a una cita médica y durante los fines de semana, que solo se cumplen las ratios de 11 a 19.30h. El convenio colectivo del sector no reconoce la posibilidad de crear una bolsa del 10% de las horas. La distribución irregular de la jornada anual que establece el Estatuto de los Trabajadores, la normativa laboral más básica, exige un preaviso con cinco días de antelación y razones objetivas para el cambio horario. 

Cuidados
Violeta Assiego “Hay que crear hogares seguros y no gestionar centros para adolescentes”
Violeta Assiego insiste en criticar la primacía de la mirada adulta sobre las necesidades de los niños, niñas y adolescentes.

Junto con el fin de la flexibilidad horaria, las trabajadoras reivindicaban un incremento de la plantilla para poder adecuarse a la ratio y derechos sindicales en materia de prevención, para poder mantener reuniones periódicas con la entidad gestora para mantener una comunicación abierta. En cuanto al bienestar de las criaturas, a lo largo de estos dos meses han denunciado la baja calidad de los recursos disponibles en el acompañamiento, un punto que es competencia directa del Departament de Drets Socials y que este considera que “se debe garantizar”.

La infancia que atiende este centro de acogida temporal, antes de ubicarlos en distintos circuitos, son criaturas con autismo, hiperactividad, que han sufrido abusos sexuales, violencias en el hogar, drogodependencias, desamparo y otras negligencias. En el módulo de bebés ahora hay once y, en total, son 30 críos. “La ratio es una educadora por 3 bebés de 0 a 3 años”, recuerda Berruezo, recordando el incumplimiento sistemático realizado hasta ahora.

Desde CNT, Genís Ferrero alaba la huelga llevada a cabo por sus compañeras, la cual también califica de “histórica”. “Se han movilizado muchísimo, dentro del municipio, en otros centros de la red y en Barcelona, donde han ido a la patronal y a la Generalitat”, recuerda. Desde CNT Catalunya, Ferrero considera que esta huelga puede ser un “punto de inflexión” para que la gente del tercer sector se organice. El convenio colectivo está sin renovar desde 2018. 

Las trabajadoras han contando con la caja de resistencia de CNT para secundar esta huelga que empezó el 2 de abril y su último día fue el 29 de mayo. 

Arquivado en: CNT Huelga Laboral Catalunya
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Opinión
Opinión Libertad para las Seis de la Suiza
Cuando el sindicalismo entra en prisión, lo que está encerrado es mucho más que una protesta. Es el eco de todas las veces que dijimos “basta”.
Laboral
Laboral Jornadas de 50 horas semanales haciendo tareas de categoría superior: así se trabaja en hostelería
Es uno de los sectores con más sanciones e intervenciones de la Inspección de Trabajo, con más de 12.000 trabajadores extranjeros aflorados en las intervenciones y que cuenta con el 21% de las sanciones emitidas por este organismo.
CRTVG - Corporación Radio y Televisión de Galicia
CRTVG A Xunta do PP remata o seu plan de control sobre a CRTVG tras escoller á súa nova directora en solitario
A xornalista Concepción Pombo substituirá, co único aval do Partido Popular, a Alfonso Sánchez Izquierdo. O Goberno de Alfonso Rueda modificou a lei de medios para que os votos do seu partido fosen suficientes para elixila.
Altri
Altri A Plataforma Ulloa Viva cambia a súa directiva para os vindeiros anos de loita contra Altri
A veciñanza da comarca máis afectada escolleu entre dúas listas logo de non chegar a un consenso. A gañadora tratará de ampliar a súa base de socias e socios por toda Galiza e abrirá máis as portas ás grandes organizacións do país, como a CIG.
El Salto n.79
Altri A celulosa ou a vida: xornalismo situado e loita social para frear un ecocidio
O xoves 17 de xullo esperámosvos no CS 'A Nubeira' de Vigo para presentar o último número da revista El Salto xunto a algunhas das súas principais protagonistas: as que loitan contra o macroproxecto de celulosa liderado por Altri e avalado pola Xunta.
Altri
Altri Galiza elixe o rumbo da loita contra Altri nas eleccións á directiva da plataforma Ulloa Viva
A veciñanza da comarca máis afectada presenta dúas listas separadas logo de non chegar a unha proposta de consenso. Por unha banda, concorre unha candidatura continuísta e, pola outra, unha alternativa que se achega máis o nacionalismo institucional.

Últimas

O Teleclube
O Teleclube 'O Teleclube' alucina no deserto con Óliver Laxe e 'Sirat'
Laxe leva o seu cuarto premio de Cannes, esta vez en competitición, polo seu novo filme que explosiona na gran pantalla.
A Catapulta
A Catapulta O tempo, o espazo e a poesía de Estíbaliz Espinosa
A poeta visita A Catapulta para conversar sobre o seu traballo e a súa traxectoria literaria

Recomendadas

Medio rural
Medio rural A esperanza da xestión colectiva fronte ao espolio: os comuneiros de Tameiga contra o Celta
Mentres varios proxectos industriais tentan privatizar e destruír os ecosistemas galegos, algúns grupos de veciños e veciñas organizadas fan oposición social construíndo alternativas comunitarias. Ás veces, tamén gañan ao xigante.
Feminismos
Feminismo Dous anos sen reparación tras sufrir lesbofobia nun Rexistro Civil de Pontevedra cando ían inscribir a seu fillo
Un funcionario negouse a inscribir ao fillo de Antía e a súa parella. Un erro de redacción na lei trans está detrás dos argumentos que o funcionario esgrime para defender a súa actuación.
Ourense
Ourense Ourense organízase para loitar contra patrullas de extrema dereita nos barrios máis empobrecidos da cidade
A veciñanza e os movementos sociais responden ao discurso do medo promovido por Frente Obrero e sinalan a súa estratexia de criminalizar a pobreza e sementar odio en contextos de exclusión e abandono institucional.