Torres de luz en Burgos
Torres de luz en campos de cultivo en Burgos. David F. Sabadell

La semana política
Una chispita de populismo

El Decreto que pretende congelar la subida de precios de la energía a los consumidores enfrenta al Gobierno con el poderoso sector eléctrico.
Pablo Elorduy
18 sep 2021 06:05

El barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas publicado el jueves 16 de septiembre muestra que el 3,8% de la población considera que las tarifas energéticas son una de las tres principales preocupaciones sociales. Es un porcentaje pequeño, muy lejos de los “problemas de índole económica” y del paro, que copan los primeros puestos de ese listado con tanta rotundidad como las Supremes y los Beatles copaban las listas de éxitos de los años 60, y está también lejos de los problemas de moda, relacionados con la crispación política (que nadie sabe muy bien qué es), pero es que, en junio, el porcentaje de encuestados que creían que la factura de la luz es uno de los problemas que más nos afectan era solo de un 0,8%

Ese 3% adicional de preocupación en solo dos meses era un aviso. El enfado podía tomar solo dos direcciones: o enfocarse contra quienes obtienen el mayor beneficio de cómo está montado el sistema eléctrico, o contra quien tiene las herramientas para intervenir ese sistema. Aunque lo asumieran con desgana, como algo fuera de su campo de intervención política, la oposición y la extrema derecha podían agitar ese segundo frente, ya estaban amagando con ello. 

El pequeño porcentaje de indignados por el precio de la luz aún no había tomado cuerpo, pero no se podía esperar más antes de que costase demasiado remontar las encuestas y terminase, de forma abrupta o languideciendo, pero con una inequívoca sensación de desencanto, la experiencia del Gobierno de coalición.

Así que cuando Teresa Ribera anunció el 14 de septiembre un plan de choque contra el alza de precios, la legislatura cambió definitivamente de signo. Y, aunque se agote ese esfuerzo en el trámite parlamentario del Decreto, algo perfectamente posible, Pedro Sánchez ya podrá contar que, durante unos pocos días, hizo algo que realmente le confrontó con los poderes establecidos. Unidas Podemos podrá defender que su hipótesis de las pequeñas cosas ha funcionado y mejorado la perspectiva para los próximos meses de una mayoría. 

La reacción del lobby eléctrico, como suele ser habitual, es exagerada, recuerda a la indignación maleducada del señorito ante los errores del servicio

Y, más importante que eso, se extenderá el mensaje de que quizá no es tan difícil como se pensaba hasta ahora obligar a las multinacionales a recortar sus beneficios, incluso aunque parte de esos beneficios —según está previsto por el Real Decreto— vayan a ser devueltos a partir de marzo, cuando se prevé que bajen los precios internacionales del gas. Incluso aunque esto no cambie nada el plan de reparto de los Fondos Next Generation, que beneficiará en primer lugar a las mismas empresas damnificadas por ese decreto. Incluso aunque un juzgado de lo contencioso —o una instancia judicial más alta— decida asumir la tesis del “hachazo” y obligue al Estado a pasar por las horcas caudinas e indemnizar, como pasó con el Castor.

Incluso si el business as usual se acaba imponiendo por lo civil o por lo criminal, al menos podrán decir que lo intentaron.

Reacciones estridentes 

El primer indicador de que un giro como el que ha anunciado el Gobierno tiene más efectos que la mera publicidad es la reacción de quienes se ven afectados. Y la respuesta de las tres grandes eléctricas recuerda a la indignación maleducada del señorito ante los errores del servicio.

El Foro Nuclear, formado por las principales energéticas del país, lanzó a las pocas horas del anuncio de Ribera un comunicado en el que amenazaba con el cierre “desordenado” y costoso en términos de empleo de los siete reactores nucleares que aun funcionan en España. No es solo que no tengan derecho a parar esos reactores, es que hablar de desorden cuando se trata de la energía nuclear es una invitación al pánico.


Esta misma semana se dan más de esos aspavientos. La subida de 15 euros del Salario Mínimo Interprofesional para el último cuatrimestre del año se aprueba sin el visto bueno de CEOE y Cepyme. El presidente de la patronal acusa de hacer política al Gobierno con la subida salarial, como si ese reformar “en clave política” no sea exactamente lo que se le puede exigir. Antonio Garamendi —sueldo de 300.000 euros anuales— exclama que está en riesgo el Diálogo Social, una especie de bibelot que durante el periodo 2010-2017 estuvo en el desván mientras se aprobaban todo tipo de recortes, decretazos y reformas, y que ahora, cuando habla la patronal, parece el Halcón Maltés, algo por lo que aparentemente merece la pena matar y morir.

Pero estas reacciones estridentes consiguen situar el debate donde conviene al Gobierno, más concretamente donde quiere Unidas Podemos y donde, tácticamente, le viene bien a Pedro Sánchez. Los que ganan mucho nunca van a aceptar que ese mucho es demasiado —de ahí que hagan todo lo posible por eludir el pago de impuestos— así que hay que decretar que mucho se ha convertido, por una vez, en demasiado. Se interrumpe el tiempo de rogar por la empatía y se abre un paréntesis de confrontación en un solo frente —porque sigue sin haber noticias de la Ley de Vivienda, con noticias diarias de desahucios y cortes de suministros—. Esa confrontación añade algo de mordiente al discurso de “que viene la ultraderecha” con el que se estaba rozando la autoparodia y, como se vio en mayo en la Comunidad de Madrid, allanando el terreno para la victoria del Partido Popular.

La tendencia a contrarrestar el plan del neoliberalismo zombie con eso que se llama “populismo” (y nadie sabe muy bien qué es o dónde está) no se está dando solo en España. Esta misma semana, el presidente estadounidense Joe Biden anunciaba un incremento de los impuestos a las grandes fortunas adoptando la retórica de la avaricia del 1% que hizo fortuna hace diez años en Occupy Wall Street. Es un método, más que un deseo, con el que se ponen algunos límites al capital con la intención de preservar las sociedades capitalistas tal y como las conocemos. O sea, sin nacionalización o publificación del ciclo eléctrico. 

La cuestión de cuánto tiempo puede durar este paréntesis populista es la pregunta de la legislatura. Más allá de este ciclo, el rectificado del Gobierno, que comenzó el mes negando que fuese posible la intervención que ha aprobado a mediados de septiembre, da una muestra para el futuro de lo que una mínima movilización, o un cabreo extendiéndose, aunque solo sea entre el 3,8% de la población, es capaz de cambiar.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Solo para socias
Solo para socias Nueva carta mensual: “Redactor en crisis”, por Pablo Elorduy
Después de La Semana Política, el coordinador de Política de El Salto regresa a un formato periódico.
La semana política
La semana política Lo que pasó, pasó
Hora de algunas despedidas. Ada Colau tiene difícil volver a ser alcaldesa de Barcelona y la izquierda tiene difícil volver a convocar el espíritu de una época en la que pudieron cambiar muchas cosas.
La semana política
La Semana Política La nave del misterio electoral
La compra de votos en Melilla y otros puntos del Estado agita la última semana de campaña y muestra el auge del conspiracionismo.
El Salto n.78
El Salto 78 Nueva revista, viejas injusticias: hablemos de Violencia Institucional
En el último número de la revista de El Salto dedicamos la portada y nuestro “Panorama” a una de las violencias que sufren las mujeres solo por el hecho de serlo, la que aún a día de hoy emana de un sistema irracional y patriarcal.
Galicia
Galicia La TVG se gasta 839.772 euros en un programa de Miguel Lago y lo saca de parrilla tras hundirse en audiencia
El programa ‘O novo rei da comedia’ apenas llegó a los 36.000 espectadores de media en su estreno y cayó en picado en su hasta ahora última emisión al 3,4% de cuota de pantalla en una cadena que tuvo de cuota media en marzo un 8,1%.
Palestina
Palestina La UE apoya a Palestina con 1.600 millones de euros más pero sin entrar en la situación de Gaza
Los ministros de Exteriores europeos, que se han reunido en la mañana del 14 de abril con la Autoridad Nacional Palestina en Luxemburgo, no aumentan las sanciones contra Israel.

Últimas

Fronteras
Fronteras El Gobierno de Mauritania alerta de que ya son más de cien cadáveres hallados en sus costas en 2025
Desde 2023 Mauritania es el principal punto de salida de embarcaciones hacia las Islas Canarias. El Gobierno reconoce el hallazgo de cuerpos. Mali reclama un trato humanitario a las personas que permanecen varadas en el país vecino.
Represión
Represión Una marcha reclama la liberación de los seis de Zaragoza tras un año en prisión
Organizaciones como Amnistía Internacional han expresado su preocupación por este caso, apuntando a posibles vulneraciones de derechos y al aumento de la represión de la protesta social.
Cómic
Cómic Viajando por ‘Bone’, de Jeff Smith, la fantasía de aventuras definitiva
En 1991 Jeff Smith dio comienzo a ‘Bone’, un hito del cómic de aventuras, muchas veces recordado por ser una alternativa de alma ‘cartoon’ a ‘El señor de los anillos’.
Censura
Extremadura El Partido Popular censura “flores republicanas” en el cementerio de Santa Marta de los Barros (Badajoz)
Izquierda Unida denuncia que la alcaldesa popular ha ordenado que “durante su mandato únicamente se colocarán flores de color blanco”. Han convocado a la ciudadanía a una nueva entrega floral este lunes 14 de abril a las 17 horas.
Literatura
50 aniversario Aresti vive en la memoria de un pueblo vasco en disputa
Hoy comienzan en Bilbao los actos del 50 aniversario de la muerte de Gabriel Aresti, referencia ineludible e incómoda de la literatura vasca moderna.
Más noticias
València
València La Generalitat supo del primer desaparecido el día de la dana ocho horas antes de enviar los SMS
La delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, testifica delante de la jueza que avisó a la consellera Salomé Pradas de una primera desaparición en torno a las 12.30h de esa mañana.
Asturias
Educación Asturies impulsa la gratuidad del primer curso universitario
La medida, aprobada por el Gobierno de PSOE-IU Convocatoria por Asturies, llega en plena polémica por los proyectos de apertura de centros privados en la comunidad.
Rusia
Opinión ¿Es Rusia una amenaza para Europa? Lo que nos muestra la historia
¿Cuál es el motivo para tanto rearme y actitud belicista? Pues, según muchos en la UE, la causa es Rusia, que supuestamente está lista para invadir y anexionarse Europa en cuanto termine de derrotar a Ucrania. ¿Tiene base real esta amenaza?
Comunidad de Madrid
Sanidad Pública Más de 760.000 personas no tienen médico de familia o pediatra en la Comunidad de Madrid
En los 267 centros de salud existentes en la región faltan 3.812 médicos y médicas y 983 pediatras. Hay 43 centros de salud caídos, esto es, con menos del 20% de la plantilla, mientras que el año pasado había 21 centros en esta situación.

Recomendadas

Globalización
Crisis del multilateralismo El terremoto Trump sacude las instituciones del orden mundial y la “globalización feliz”
Muchas de las instituciones que marcaron la vida internacional desde la caída del Muro han entrado en crisis. ¿Todas? No, especialmente aquellas que intentan regular los derechos humanos, de los pueblos y de la naturaleza.
Economía
Crisis de los aranceles La claudicación de Trump: del momento Lehman a la derrota a lo Liz Truss
La crisis en el mercado de bonos estadounidenses y las advertencias de Wall Street hicieron frenar a Trump. Fiel a su estilo, el presidente de EE UU ha reclamado la victoria, pero la desconfianza hacia su rumbo político persiste.
Salud mental
Cambio de paradigma De la deprescripción de psicofármacos al refuerzo de plantillas: claves del Plan Nacional de Salud Mental
El Ministerio de Sanidad ha logrado un consenso para aprobar una nueva estrategia en salud mental, poniendo de acuerdo de un lado a todas las comunidades autónomas y del otro a todas las asociaciones.
Lobo
Especies protegidas Organizaciones tratan de evitar la caza del lobo: “Volver a la receta de la gestión letal no funciona”
El lobo está desprotegido desde la entrada en vigor de la ley de desperdicio alimentario el pasado 2 de abril. Organizaciones ecologistas y Podemos están llevando a cabo denuncias, recursos y otras acciones para revertir la desprotección del cánido.