Memoria histórica
Culpables aunque se demuestre lo contrario

Ahora que este sufrido año ya va peinando canas, es hora de recordar que inició su tiempo con una efeméride, la de los 70 años de la muerte de George Orwell, el 21 de enero de 1950. Dos novelas gráficas y una biografía han venido a salvar de ese olvido, nada fortuito, al inglés que vino a España a matar fascistas en 1936.


Orwell
George Orwell, c. 1940 Wikipedia


20 oct 2020 11:30

La celebración del aniversario, si la hubo, pasó de puntillas por el escenario de una actualidad mediática demasiado ocupada en montar mentiras dirigidas a los “proles”, el conjunto común de la clase trabajadora definida así por Orwell en su 1984. Tales mentiras, convertidas en falsas verdades de tanto repetirlas, son producto cómplice de otra de las clases más criticadas por el escritor inglés, la de los llamados intelectuales, encargados de ir de plató en plató de televisión vendiendo el humo de sus chismes o de tuitear “doblepensamientos”, la definición orwelliana de aquellas falsas creencias sostenidas en la mente del individuo a pesar de que han sido refutadas por la evidencia.

Dos novelas gráficas y la edición de una biografía han venido a salvar de ese olvido, nada fortuito, al inglés que vino a España a matar fascistas en 1936. George Orwell, Homenaje a Cataluña, de Andrea Lucio y Jordi de Miguel, con traducción del catalán de Miguel Temprano, publicada por la editorial Debate en marzo de 2019, es una excelente adaptación del libro homónimo que sigue viñeta a viñeta los pasos de Orwell por el frente de Aragón y la Barcelona de aquellos días, con numerosas referencias a nuestro presente. El comic incluye en su página 121 un código QR que conduce a la visualización y seguimiento de la “Ruta Orwell”, excursión que se celebra en Barcelona todos los años durante el mes de junio con ocasión de la celebración del “Día Orwell”. Las viñetas dedicadas a la intervención de Miguel Berga, profesor de Literatura inglesa de la Universitat Pompeu Fabra y tal vez el mayor experto en España sobre Orwell, ilustran a las mil maravillas una novela que supera en lo documental a lo gráfico y para cuya elaboración se ha partido de archivos como los de la FAL (Fundación Anselmo Lorenzo), el Arxiu Sant Feliú de Guíxols, el University College London College Archive y el Centro Documental de la Memoria Histórica.

La otra novela gráfica es Orwell, de Christin y Verdier, publicada por Norma Editorial en 2020. El subtítulo que aparece en la portada, rojinegra, lo dice todo sobre el carácter biográfico de la obra: “Orwell, etoniano, poli, proletario, dandi, miliciano, periodista, rebelde, novelista, excéntrico, socialista, patriota, jardinero, ermitaño, visionario”.


La fuente mayoritaria de esta novela gráfica, en la que participan maestros de la talla de Enki Bilal, se encuentra en George Orwell, una vida de Bernard Crick, una de las mejores –si no la mejor- biografías del autor cuyo nombre era Eric Blair y que, según parece, adoptó un seudónimo para no incomodar a sus padres en la firma de sus escritos: George por el patrón de Inglaterra; Orwell por un río muy significado en el condado de Suffolk, donde residía.

George Orwell. La biografía, de Crick, original de 1980, ha sido editada ahora por Ediciones El Salmón [que estos días publica también Somos revolucionarios a nuestro pesar, La vida en la tierra y El virus está desnudo. Crónica de una pandemia política] ,con traducción de Salvador Cobo y Sebastián Miras. Estaedición incluye como apéndice el texto George Orwell ante sus calumniadores, el opúsculo que esta misma editorial publicó en 2014 en coedición con DDT Banaketak.

Aquel librito que ahora se incluye como texto a la biografía de Crick era un intento más para desmontar la mentira lanzada por el periódico The Guardian, que en 1996 publicó una supuesta colaboración de George Orwell con los servicios de espionaje británicos para denunciar comunistas. Numerosos periódicos del resto del planeta se hicieron eco de esta falsa noticia, tratada de modo torticero con ambigüedades muy elaboradas. A día de hoy, y a pesar de que dichas mentiras fueron desmontadas inicialmente por los editores franceses de The Collected Essays, Journalism and Letters de Orwell, en la editorial Éditions de L’Encyclopédie des Nuisances y Éditions Ivrea, y otros autores como Christopher Hitchens, siguen pululando por los medios, y basta con un sencillo rastreo en Internet para encontrar a quienes todavía dan pábulo a semejante fábula: difama que algo queda.

En “George Orwell ante sus calumniadores” se retrata esta época en la que, frente a la mentira, habrá que tratar de probar lo contrario (como hizo falta probar la existencia de las cámaras de gas) y justificar la verdad ante un tribunal de mentirosos y amnésicos

Entre los editores de L’Encyclopédie des Nuisances se encontraba Jaime Semprún intelectual comprometido y honrado donde los haya, fallecido en 2010. La editorial Pepitas de calabaza publicó en diciembre de 2016 una edición en español de su obra El abismo se repuebla, con traducción de Miguel Amorós y Tomás González López, que parte de la mentira acerca de Orwell aireada por los periódicos europeos para desarrollar la idea de un abismo cada vez más poblado por la ignorancia, la mentira y la indolencia frente a estas últimas.

Los hechos que estamos viviendo, tales como la necesidad de que un grupo de historiadores e historiadoras tengan que salir a la palestra con un informe técnico para desmontar las mentiras acerca de Largo Caballero e Indalecio Prieto, mientras se destruye a martillazos en Madrid su memoria, vienen a confirmar todo lo que Jaime Semprún, editor también del pasquín inicial en defensa de Orwell (y a ciencia cierta su autor, a pesar de la autoría anónima), dejó escrito: “si la escuela estalinista de la falsificación sigue siendo un modelo para nuestra época es por su objetivo principal, antes que por sus procedimientos particulares. En efecto, es sabido que la propaganda totalitaria no necesita convencer para triunfar y que ni siquiera es ese su objetivo. El objetivo de la propaganda es causar el desaliento de los espíritus, persuadir a todo el mundo de su impotencia en restablecer la verdad a su alrededor y de la inutilidad de cualquier intento de oponerse a la difusión de la mentira”.

En efecto, es sabido que la propaganda totalitaria no necesita convencer para triunfar y que ni siquiera es ese su objetivo. El objetivo de la propaganda es causar el desaliento de los espíritus, persuadir a todo el mundo de su impotencia en restablecer la verdad a su alrededor y de la inutilidad de cualquier intento de oponerse a la difusión de la mentira

En George Orwell ante sus calumniadores se retrata esta época en la que, frente a la mentira, habrá que tratar de probar lo contrario (como hizo falta probar la existencia de las cámaras de gas) y justificar la verdad ante un tribunal de mentirosos y amnésicos (cita textual).

Semprún no deja títere con cabeza en este oficio de la falsificación, refiriéndose a los “proles” (el populacho que se alía provisionalmente con la élite, en palabras de Hannah Arendt) como “estos lisiados de la percepción, mutilados por las máquinas del consumo, inválidos de la guerra comercial, que lucen sus estigmas como condecoraciones, su enfermedad como uniforme, y su insensibilidad como bandera”.

Memoria histórica
George Orwell: hacer frente, después la revolución
“La única actitud posible para un hombre honesto”, decía George Orwell, es obrar “por el advenimiento del socialismo”. Esto es de sentido común. ¿Pero de forma más concreta?

La libertad es la libertad de decir que dos más dos son cuatro”. Lo dejó escrito Orwell, como tantas otras cosas. Animal farm (Rebelión en la granja) sigue siendo libro de lectura casi obligatoria en el inglés de Bachillerato, sin que su significado parezca dejar huella en una juventud que vive ajena a la Historia, diletantes junto a la gran masa de proles de una placentera misología, lo que Unamuno definió como “el odio al pensamiento”. En un artículo suyo de 1916, publicado en La Nación el 20 de diciembre de ese año, en plena Guerra Mundial y bajo el título Horror a la Historia, Unamuno escribía:

“Dícese que hay salvajes que no cuentan arriba de seis y que si se les quiere obligar a contar por encima de esa cifra sufren materialmente. Les da mareos: acaso jaquecas. Y si en un pueblo de esos salvajes cayera un civilizado que se empeñase en enseñarles la tabla de multiplicar, acabarían, si pudieran, por darle muerte, por ser un perturbador, y de la peor especie. Y si esos salvajes fuesen capaces de formular un sentimiento misólogo, dirían que no hay derecho a turbar la siesta de un pensamiento amodorrado”.

En enero de 2017, Kellyanne Conway, consejera de Donald Trump, en referencia a falsedades lanzadas por su partido que habían sido contrastadas con hechos verdaderos, dijo: “No son mentiras. Son hechos alternativos”.

“Ver lo que tiene uno delante de las narices precisa una lucha constante”, afirmaba Orwell en un artículo del Tribune en marzo de 1946, en una crítica al “doblepensar” de la gente y a las mentiras convertidas en “hechos alternativos” por el Poder y la intelectualidad que le besa el culo, si bien en una crítica a un libro sobre la España de Franco, publicada en el New English Weekly en junio de 1938, también dijo: “Es difícil que las personas inteligentes elogien las dictaduras, por la sencilla razón de que cuando una dictadura se pone en marcha lo primero que liquida es a la persona inteligente”.

Orwell no conoció personalmente a Antonio Machado, aunque ambos estuvieron en Barcelona y siguieron, prácticamente, los mismos pasos en su exilio: Orwell huyendo de los comunistas; Machado huyendo de los fascistas. Huían no sólo de la guerra, sino de una ignorancia sembrada a cañonazo limpio, cultivada como abrojo en el erial donde se marchitaba la razón, jaleada con orgullo hoy día por quienes ondean la bandera de España o la llevan tatuada en la mascarilla después de haberla paseado por el estercolero de la Historia.

El porquero de Agamenón, el último de sus sirvientes, se ha aliado con su señor y la verdad ya no es la verdad, la diga quien la diga, convencidos ambos e incluso conformes con la falta de ella.



Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Opinión
Opinión Vitoria 3 de marzo. El memorial que soñamos
Cuando se cumplen 49 años de una de las masacres que marcaron el periodo postfranquista, se ha avanzado poco en la creación de un Memorial que establezca el relato preciso de lo que sucedió en Vitoria y por qué luchaban quienes estuvieron allí.
La vida y ya
La vida y ya Habla más alto
La emoción no es solo por la noticia, es porque esta nieta que restituyó su identidad es la hermana de un amigo suyo de la infancia.
#72314
21/10/2020 8:45

Para enmarcar en esta época de miedo, estupidez y sumision

4
0
CRTVG - Corporación Radio y Televisión de Galicia
Medios públicos A TVG, condenada a rectificar por difundir unha información falsa sobre o BNG
A xustiza condena tamén ao director do ente público, Alfonso Sánchez Izquierdo, pola nova onde se afirmaba erradamente que o BNG non enviara representantes a un evento organizado pola Xunta e mais a Fundación Castelao para dar inicio ao Ano Castelao.
OTAN
Europa Los líderes de la UE cierran filas con Zelensky en el contexto de derrumbe de la alianza con Estados Unidos
La cumbre de Londres del domingo 2 de marzo se cerró con una hoja de ruta para llevar a EE UU de nuevo la mesa de negociaciones con Ucrania. La UE apuesta por el rearme ante la amenaza rusa y el desfallecimiento de la Alianza Atlántica.
Huelga
Derechos laborales Los sindicatos en Renfe y Adif llaman a siete días de huelga por “incumplimientos” en el traspaso de Rodalies
Las organizaciones consideran que no se están cumpliendo los acuerdos que previnieron una primera huelga en 2023. El traspaso de competencias es un momento delicado y los sindicatos quieren asegurarse de que la plantilla no sale perdiendo.
Estados Unidos
Análisis Trump, la naranja mecánica
La rueda de prensa entre el presidente de los Estados Unidos y su homólogo ucraniano fue una muestra de una humillación pública al más alto nivel.
Mozambique
Neocolonialismo La expansión del eucalipto en Mozambique para la papelera europea
VV.AA.
La creciente demanda de celulosa en Europa está dando lugar a nuevos mercados y a la expansión de las plantaciones de eucalipto en Mozambique. Pero algunas comunidades rurales ahora quieren recuperar la tierra que han perdido.

Últimas

Guerra en Ucrania
Guerra en Ucrania Las izquierdas rusa y ucraniana, ante un posible acuerdo de alto el fuego en Ucrania
Una de las principales demandas de la izquierda rusa es la liberación de los presos políticos. La ONU ha alertado de que la aplicación por parte de Ucrania del tipo de “colaboracionismo” está siendo excesivamente amplia.
Feminismos
En primeira persoa Relato dunha furgoneta roubada e un embarazo que perdemos
Temos que saber que para ter a liberdade de sentir sen morrer sepultadas no propio silencio é necesario que sexan habilitados, considerados e acompañados todos os xeitos, todas as dores, todas as dúbidas e todos os laios en tódolos ámbitos da vida.
Sphera
Soberanía alimentaria Sembrar zanahorias, recolectar comunidad
Una comunidad que sostiene la agricultura es un grupo de personas que alquila tierra y contrata a agricultores para cultivar. Es la forma de obtener frutas y verduras de kilómetro cero.
Opinión
Pueblo gitano 3 de marzo, 526 años de persecución racista antigitana
Ni los Reyes Católicos ni toda su ralea, incluidos los Borbones que aún detentan la Corona, consiguieron su propósito.
Más noticias
Estados Unidos
Genocidio Trump aprueba un paquete de armas de 3.000 millones de dólares para Israel
El presidente estadounidense ha alegado una “emergencia” para eludir al Congreso y aprobar un envío de armas que no llegará a Israel hasta 2026.
Madrid
Madrid Inquilinas despliegan decenas de piquetes para ampliar la lucha antirrentista e impulsar huelgas de alquileres
Estos grupos agitativos territoriales, que se mantendrán a lo largo de los próximos meses, se han distribuido por distritos y barrios de Madrid como Villaverde, Lucero, Vallecas o Leganés.
Nicaragua
Salvador Marenco “Los crímenes de lesa humanidad no solo deben ofendernos a nosotros como nicaragüenses”
El abogado, activista y miembro de la colectiva Nicaragua Nunca Más habla sobre las sistemáticas vulneraciones de DDHH y el silencio mediático entorno al régimen de Ortega
Opinión
Opinión Vitoria 3 de marzo. El memorial que soñamos
Cuando se cumplen 49 años de una de las masacres que marcaron el periodo postfranquista, se ha avanzado poco en la creación de un Memorial que establezca el relato preciso de lo que sucedió en Vitoria y por qué luchaban quienes estuvieron allí.
Migración
México México, la última frontera
En la frontera sur, la presencia de migrantes está aumentando, entre otras razones, debido a la política del gobierno mexicano de devolver a los migrantes sin documentación desde el norte del país hacia el sur.

Recomendadas

Urbanismo
Urbanismo salvaxe Un pobo contra o asfalto: Bembrive e Mos rebélanse contra unha autovía que arrasará o seu pulmón verde
Veciñas e veciños conseguen presentar 25.000 alegacións contra unha estrutura de dez quilómetros, defendida xa só polo PSOE en Madrid e en Galiza, que partirá en dous unha poboación enteira e forzará a expropiación de decenas de vivendas.
Feminismos
June Fernández “Estoy abierta a reconocer modelos en los que haya personas cuyo rol sea gestar”
La periodista June Fernández publica ‘Sueños y vasijas’, un volumen sobre la gestación subrogada que no quiere sacar a nadie de su posición, pero sí sumar elementos para analizarla con perspectiva feminista.
Turismo
Turismo depredador Poca agua, mucho turismo: la crisis hídrica amenaza las islas Eolias en Italia
Las islas italianas del Mediterráneo están acusando especialmente las consecuencias de la turistificación, pero también de una crisis hídrica sin precedentes provocada por el cambio climático. Es el caso de las islas Eolias, en el norte de Sicilia.