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Crisis climática
Tres de cada cuatro niños y niñas en España están expuestos a olas de calor extremas
Coordinador de Clima y Medio Ambiente en El Salto. @PabloRCebo pablo.rivas@elsaltodiario.com
Era una noticia que se esperaba, pero no por eso es menos impactante o grave. El verano de 2024 —entendido como los meses de junio, julio y agosto— ha sido el más cálido jamás registrado, tanto a nivel global como a europeo. De hecho, como apuntaba la pasada semana Samantha Burgess, directora adjunta del Servicio de Cambio Climático de Copernicus de la Unión Europea, “durante los últimos tres meses de 2024, el planeta ha experimentado los meses de junio y agosto más calurosos, el día más caluroso registrado y el verano boreal más caluroso del que se tiene registro”.
Semejantes datos suponen que los más frágiles —mayores, enfermos y, por supuesto, niños— sufran de forma más acusada las consecuencias de la aceleración de la crisis climática. Ahora, un informe de Save the Children publicado este martes alerta de que casi tres de cada cuatro niños y niñas en España, el 72,7%, están expuestos a olas de calor extremas.
Un 25,8% de los niños y niñas residentes en España se ha enfrentado a temperaturas sin precedentes
Esa es la cifra de chavales que han sufrido olas de calor calificadas de extremas entre julio de 2023 y junio de 2024, lo que excluye los récords de los dos últimos meses y empeoraría aún más las conclusiones del estudio de la ONG. Solo en 2024 en España se sufrieron cinco episodios cálidos en los meses de julio y agosto —con 17 días de temperaturas fuera de lo normal sin llegar a ser catalogadas de ‘ola de calor’—, más dos olas de calor con otros 20 días con temperaturas extremas. Además, los datos suponen que un 25,8% de los niños y niñas residentes en España se ha enfrentado a temperaturas sin precedentes.
Educación infantil
Ola de calor Bebés a 35 grados: aulas sin refrigeración en una Escuela Infantil Pública de Madrid
Como señala el director general de la ONG, Andrés Conde, el hecho de que los más pequeños sufran olas de calor más intensas, duraderas y frecuentes “no solo pone en grave peligro su salud física y mental, sino también sus derechos como el de la educación”. Se trata además, como recuerda Conde, de la generación menos responsable del cambio climático y la que más tiene que perder en “un planeta cada vez más inhabitable”.
Una “catástrofe” que afecta a 766 millones de chicos
A nivel global, los datos de Save the Children no son mejores. Desde la ONG remarcan que uno de cada tres niños y niñas del mundo, es decir, 766 millones, estuvo expuesta a olas de calor extremo entre julio de 2023 y junio de 2024, principalmente en el sur de Asia. Además, 344 millones —el 15% del total— experimentó la temperatura más alta registrada en su municipio desde al menos 1980.
“El organismo de los niños y niñas es menos capaz de regular su temperatura que el de los adultos”, declara Conde
Entre las consecuencias de esta nueva situación está un aumento de las hospitalizaciones infantiles y de la prevalencia de afecciones respiratorias como el asma, además de afectar a la salud mental y al desarrollo general de los niños y niñas. “El organismo de los niños y niñas es menos capaz de regular su temperatura que el de los adultos, lo que les hace más vulnerables a enfermedades relacionadas con el calor, como el agotamiento y la insolación”, declara el director de la organización humanitaria.
El aumento de estos episodios supone además un agravamiento de las desigualdades y la inseguridad alimentaria. Shruti Agarwal, investigadora sobre crisis climática y economías sostenibles y autora del informe —quien califica el nuevo panorama de “catástrofe”—, señala que las olas de calor “golpean con mayor dureza a los niños y niñas más afectados por la desigualdad y la discriminación” y son “un riesgo grave para la salud y el bienestar de los niños y niñas y de las generaciones futuras”.
Temperaturas que limitan el derecho a la educación
El agravamiento de la crisis climática también afecta al derecho a la educación. Solo en abril y mayo de 2024, más de 210 millones de niños y niñas faltaron a clase debido al calor extremo, según los datos de Save the Children. Más cifras: en la provincia más poblada de Pakistán, el Punjab, al menos 26 millones de niños y niñas —el 52% de todos los alumnos de preescolar, primaria y secundaria del país— faltó a clase debido al calor extremo el pasado mayo.
Además, la ONG recuerdan que “en las zonas de conflicto, los efectos agravados de las olas de calor y las crisis humanitarias ponen aún más en peligro a los niños y niñas que ya se enfrentan a circunstancias precarias”.
“Los gobiernos deben reconocer a los niños y niñas como agentes clave del cambio en la crisis climática y garantizar que disponen de plataformas para expresarse”, afirma Conde. Para Save the Children esas voces deben incluirse en la respuesta mundial a la crisis climática, incluida la financiación de los países de ingresos más altos a los países de ingresos más bajos. “A nivel práctico, esto incluye garantizar que edificios como las escuelas sean más resistentes al aumento de las temperaturas para que los niños y niñas puedan aprender de forma segura”, remarca.