Coronavirus
Redes de apoyo mutuo ante la COVID19: Análisis y memoria desde el ecofeminismo

Un estudio del Grupo Cooperativo Tangente analiza un centenar de iniciativas y redes de apoyo mutuo que surgieron durante el confinamiento por la COVID19 para dar respuestas colectivas a las necesidades de miles de personas.
La solidaridad en boca de todos - 6
Tres voluntarias, en el almacén de reparto de comida de la calle del Olmo. Laurie Marie Stührenberg
Coautora del informe “Solidaridades de proximidad. Ayuda mutua y cuidados ante la COVID19”
25 mar 2022 10:33

Este miércoles presentamos el informe “Solidaridades de Proximidad. Ayuda mutua y cuidados ante la Covid19“ que recoge los resultados de una investigación realizada a 100 iniciativas de apoyo mutuo de todo el país que surgieron durante el confinamiento por el coronavirus y que hemos elaborado desde el Grupo Cooperativo Tangente.

En este artículo puedes encontrar algunas de las conclusiones de este estudio. Yo me quiero centrar aquí en la lectura ecofeminista de toda esta ola de solidaridad y a la vez contribuir a hacer memoria de todo lo que sucedió y todo lo que se movilizó para poder sostener y acompañar a muchas personas. Parece claro que esta pandemia ha sido solo el tráiler de lo que puede venir así que necesitamos hacer este ejercicio de memoria y necesitamos rescatar todos los aprendizajes posibles para organizarnos en momentos de crisis (de crisis más grandes todavía que la crisis en la que ya vivimos, se entiende). 

La famosa interdependencia y la complejidad de los cuidados

La pandemia y el confinamiento que conllevó durante meses, nos dió de bruces con eso que no nos cansamos de recordar desde los feminismos, que hay cosas, esas cosas que hacen que nos mantengamos vivas y en unas mínimas condiciones de dignidad, que nunca se pueden dejar de hacer. De repente ser seres interdependientes se materializaba más que nunca ante nosotros. Necesitábamos cuidados, de toda índole, y los necesitaba hasta el más pintao.  

Solo en Madrid, la FRAVM calcula que las redes de apoyo que han estado vinculadas a las asociaciones de barrio han atendido a más de 45.000 personas. Para el resto del territorio es difícil estimar cifras pero lo que parece evidente es que las iniciativas colectivas ayudaron a miles y miles de personas. 

Además lo hicieron desplegando un abanico de ayudas que permitieron dar una respuesta integral a las necesidades que iban apareciendo. Porque nuestras vidas, todas,  son complejas y más aún las de quienes viven al día o no tienen derecho a acogerse a un ERTE. Tener comida para toda la familia, pagar las facturas, negociar con el casero, acceder a internet, contar con dispositivos electrónicos para seguir las clases del instituto o simplemente poder hablar con alguien cuando estás aterido por el miedo a que se mueren tus familiares sin poder despedirte. Todas estas necesidades fueron atendidas por las redes de apoyo.

La diversidad y la transversalidad que nos hacen más resilientes

Sabemos que la diversidad, como ocurre en los ecosistemas, nos hace más resilientes, nos hace ser más capaces de adaptarnos a los cambios bruscos. Así que nos interesaba saber cómo de diversas habían sido estas redes o iniciativas de apoyo mutuo. 

Podemos concluir que las redes han sido espacios diversos donde han participado personas sobre todo, en un primer momento, de diferente edad. Las personas jóvenes se han implicado mucho, a pesar de todo lo que se las demonizó durante el confinamiento. Un estudio del INJUVE de 2020 concluye que la mitad de los y las jóvenes habían participado de alguna manera en este tipo de iniciativas. Muchas nos han contado que al principio hubo menos participación de gente migrante. Como nos contaban dos compañeros del Sindicato de Manteros de Barcelona y Madrid en una entrevista, nosotros y nosotras vivimos en permanente crisis y cuentan con potentes redes de apoyo que se movilizaron desde el primer día. Aún así con el tiempo las iniciativas se fueron haciendo más diversas también en procedencia y las redes propias de personas migrantes hicieron red a su vez con muchas otras iniciativas cercanas. 

Además es importante apuntar que todas las experiencias que hemos estudiado se han planteado de forma central el debate protagonistas vs asistencialismo y todas, en la medida que dejaban los tiempos y con más o menor fortuna, han trabajado específicamente para conseguir que las personas que recibían ayuda fuesen parte nuclear de la iniciativa. Esto ha ayudado a trascender sentimientos de culpa y vergüenza por otros vinculados a la cooperación y la solidaridad y al hecho de que todas en cualquier momento de nuestra vida necesitamos ayuda de otras.

También construimos resiliencia intercambiando conocimientos y recursos, esto nos permite entre otras cosas escalar y llegar a más personas. En todos los territorios las iniciativas trabajaron en red con otras cercanas para hacer más eficaces las donaciones o intercambiar recursos (alimentos que llegaban en mucha cantidad de repente, vehículos para ir a mercados centrales, etc). Nos estaba pasando algo, a todas juntas y a la vez, esta sensación de realidad compartida tuvo que ver con esta necesidad de comunicarse con quienes se estaban organizando para lo mismo.

Alianzas improbables y retaguardia invisible

En palabras de las personas protagonistas, cuando se trata de sostener urgencias de tanta envergadura y a tantas personas a la vez, lo ideológico, lo cultural o lo religioso queda en un segundo plano. Y así ha sido. Asociaciones vecinales, AFAs, asociaciones ecologistas, feministas, sindicales, clubes de fútbol, grupos de consumo, hermandades religiosas, Cruz Roja, parroquias, asociaciones de comerciantes, cooperativas … han participado de forma conjunta para albergar bancos de alimento, ofrecer locales, gestionar donaciones económicas, intercambiar contactos de personas que necesitaban ayuda o contactar con abogadas. Alianzas que en la llamada “normalidad” no se dan o lo hacen raramente.

Estas estructuras preexistentes han sido esenciales para poder desplegar una ayuda de la magnitud desplegada. La mitad de las iniciativas estudiadas procedían de grupos ya existentes, una asociación de una escuela o un grupo de scouts que pone en marcha un banco de alimentos y se empieza a sumar gente. En el resto de casos fueron grupos que surgieron espontáneamente, casi siempre por redes sociales pero que en la mayoría de los casos acabaron en algún momento por hacer red con alguna organización preexistente para tener un local, una cuenta bancaria, o para solicitar algo formalmente a la administración de turno. Es decir, se apoyaron de forma esencial en las estructuras y en los conocimientos adquiridos y ensayados durante muchos años por los movimientos sociales.

Una ética del cuidado colectiva

En las redes de apoyo mutuo han participado muchas mujeres. Era de esperar, muchas mujeres en todo el mundo están liderando luchas e impulsando organizaciones para hacer frente a las desigualdades y la explotación. También era de esperar porque estas iniciativas, sin abandonar la reivindicación, se han situado en lo micro, en la organización a través de redes informales, dando un peso muy relevante a la salud y la vida en las decisiones. Espacios todos ellos donde estamos acostumbradas, por cuestiones estructurales que tienen que ver con los roles de género impuestos, a ser activistas las mujeres.

Pero más allá de esto, las redes han vuelto a poner encima de la mesa con mucha fuerza aquello de que lo personal es político acuñado por Kate Millet. Reivindicando por un lado la necesidad de sostener a todas a las personas a la vez y visibilizando públicamente los trabajos esenciales. También han contribuido a construir y a demostrar que es posible una ética del cuidado desde lo colectivo, algo que muchas veces nos cuesta imaginar. 

La ecodependencia vuelve a posponerse por lo urgente

Si bien desde el principio, las organizaciones ecologistas y el mundo científico, comunicaron el hecho de que los orígenes de esta pandemia había que buscarlos en la degradación de los ecosistemas, hemos visto que este vínculo ha estado ausente en la mayoría de las iniciativas debido a la urgencia de atender las realidades cotidianas. En algunos casos, en el 20% de las estudiadas, el tema ha aparecido en conversaciones informales. Sólo en el 2,3% de los casos este tema ha derivado en compromisos que han modificado esta práctica cotidiana, principalmente introduciendo alimentos agroecológicos o poniendo en prácticas medidas para la reutilización y reducción de residuos.

En el protagonismo comunitario, la creatividad social, la solidaridad y las reivindicaciones contra la desigualdad que han movilizado las respuestas ciudadanas, podría anidar una latente demanda de justicia ambiental, así como la potencialidad de que, ante próximas situaciones de emergencia, se encuentren mecanismos para tener más presentes las cuestiones ecosociales. No se improvisa un cambio de modelo productivo y de estilos de vida, pero podrían tomarse medidas para ir experimentando en este sentido.        

Os invito mucho a leer el informe completo porque aquí no he podido contarlo todo. El papel de las administraciones públicas, las colaboraciones público-comunitarias, la organización interna de las iniciativas y algunas otras claves de esta respuesta colectiva quedan explicadas en el estudio.

Sobre o blog
Saltamontes es un espacio ecofeminista para la difusión y el diálogo en torno al buen vivir. Que vivamos bien todas y todos y en cualquier lugar del mundo, se entiende. También es un espacio para reflexionar acerca de la naturaleza, sus límites y el modo en que nos relacionamos con nuestro entorno. Aquí encontrarás textos sobre economía, extractivismo, consumo, ciencia y hasta cine. Artículos sobre lugares desde donde se fortalece cada día el capitalismo, que son muchos, y sobre lugares desde donde se construyen alternativas, que cada vez son más. Queremos dialogar desde el ecofeminismo, porque pensamos que es necesario anteponer el cuidado de lo vivo a la lógica ecocida que nos coloniza cada día.
Ver todas as entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Presentan la primera demanda por mayores muertos en domicilios sin traslado hospitalario durante el covid
Los padres de Francisco murieron sin recibir traslado hospitalario ni asistencia médica a tiempo cuando enfermaron por covid-19 en su domicilio de Madrid, entre mediados de marzo y principios de abril de 2020.
Sanidad
Investigación La exclusión hospitalaria de mayores durante el covid en Madrid precedió a la existencia de protocolos
El primer protocolo de la Consejería de Sanidad sobre derivación a hospitales de pacientes de covid residentes en centros de mayores es del 18 de marzo, pero la disminución de residentes derivados empezó el 7 de marzo, según una investigación.
Justicia
Transparencia Un fallo judicial aporta más intriga a la reelección de Von der Leyen como presidenta de la Comisión Europea
El TJUE determina que la alta instancia comunitaria no veló por los derechos ciudadanos a la transparencia al ocultar demasiada información sobre los contratos con las farmacéuticas para obtener vacunas contra el covid-19.
Sobre o blog
Saltamontes es un espacio ecofeminista para la difusión y el diálogo en torno al buen vivir. Que vivamos bien todas y todos y en cualquier lugar del mundo, se entiende. También es un espacio para reflexionar acerca de la naturaleza, sus límites y el modo en que nos relacionamos con nuestro entorno. Aquí encontrarás textos sobre economía, extractivismo, consumo, ciencia y hasta cine. Artículos sobre lugares desde donde se fortalece cada día el capitalismo, que son muchos, y sobre lugares desde donde se construyen alternativas, que cada vez son más. Queremos dialogar desde el ecofeminismo, porque pensamos que es necesario anteponer el cuidado de lo vivo a la lógica ecocida que nos coloniza cada día.
Ver todas as entradas
Racismo
Racismo Dipo Faloyin: “En África no hay solo historias de pobreza y sufrimiento, sino también de éxito”
En su libro ‘África no es un país’, el periodista Dipo Faloyin se interna en distintas realidades, debates y resistencias para dinamitar con un estilo agudo toda visión monolítica del continente.
Honduras
Reportaje Honduras, el país que sembró Berta Cáceres
Honduras heredó del narcogobierno de Juan Orlando Hernández la violencia que ejercen de forma estructural la Policía, el Ejército, las maras y los sicarios contratados por las empresas para matar a líderes ambientales.
O Salto medra contigo
Que non che conten películas Subscríbete a O Salto e leva seis meses de Filmin de agasallo
Este Nadal, fai posible que O Salto chegue máis lonxe cos seus contidos críticos e leva de agasallo medio ano de Filmin. E se xa tes Filmin, subscríbete e regala o acceso a esta plataforma a quen queiras.
Laboral
Laboral ¿Están mejorando los salarios de los trabajadores y las trabajadoras?
Es importante saber lo que ha pasado con los salarios reales, los que resultan de descontar el aumento de los precios.

Últimas

Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Metro de Madrid circula sin una ley de seguridad ferroviaria
Las normas de circulación de Metro de Madrid están reflejadas en una normativa interna que no es de obligado cumplimiento: ningún organismo supervisa la seguridad en el suburbano, tal y como revela una investigación del sindicato Solidaridad Obrera.
Israel
Según un informe Amnistía Internacional asegura que Israel “ha cometido y continúa cometiendo” un genocidio en Gaza
Israel trata a la población palestina de Gaza como un grupo infrahumano que no merece derechos humanos ni dignidad, según un informe de Amnistía Internacional.
Opinión
Madres protectoras Cuando la mayoría de medios decían que Juana Rivas había secuestrado a sus propios hijos
Los niños y niñas que están siendo arrancados de sus madres un día hablarán. Es entonces cuando el poder mediático y el poder judicial se darán de bruces con la realidad.
Palestina
Semana de Lectura por Palestina Literatura palestina toma el Metro de Madrid
Tuneando la campaña “Libros a la calle” activistas distribuyen poesía de autores palestinos en el transporte público madrileño en la semana de lectura por Palestina.
Literatura
Nerea Ibarzabal “En un bar me interesan más las conversaciones de cocina que las de barra”
Nerea Ibarzabal es una voz comprometida. “Siempre es el momento, pero ahora es imprescindible”, explica. 'Bar Gloria' es su ópera prima (Susa, 2022), traducida por consonni (2024), y fue la obra más prestada en las bibliotecas el año de su aparición.
Más noticias
Patrimonio cultural
Patrimonio La noria-mirador que pudo destrozar el Palmeral de Elche
Hace quince años la acción ciudadana fue clave para detener el despropósito urbanístico en este espacio patrimonio de la humanidad
El Salto Radio
El Salto Radio ¡Viva el mal!
Proyecto UNA, presentan “La viralidad del mal. Quién ha roto internet, a quién beneficia y cómo vamos a arreglarlo” en Señales de Humo.
Análisis
Análisis Los fantasmas de 1964 atormentan a la democracia brasileña
Con la Ley de Amnistía de 1979, la política del perdón hecha a costa de los perseguidos por la barbarie autoritaria no sólo consolidó el pacto de silencio, sino que estableció la banalización de las violaciones de los derechos humanos.
Isabel Díaz Ayuso
Fraude fiscal El Supremo cita a declarar a Miguel Ángel Rodríguez en el caso contra el Fiscal General
El caso sobre las informaciones que dieron a conocer el reconocimiento del fraude fiscal de la pareja de Isabel Díaz Ayuso evoluciona con la citación del jefe de Gabinete de la presidenta de la Comunidad de Madrid.

Recomendadas

En el margen
Thimbo Samb “Ganar el Goya con ‘Los cayucos de Kayar’ implicaría que el mundo del cine español valora historias diversas”
Cansado de los papeles que le ofrecen como actor negro, Thimbo Samb busca sus propias historias para mostrar de lo que es capaz, la última, un documental sobre su propia vida, que ha sido preseleccionado para los Premios Goya.
Palestina
Palestina “Es nuestra tierra”: colonos israelíes acampan en la frontera con Gaza para lograr un regreso permanente
Envalentonados, un grupo de ultranacionalistas israelíes están acampando cerca de la frontera con la Franja de Gaza para ser los primeros en establecer ahí su nuevo hogar.